El E-Commerce es el intercambio de bienes, productos o servicios a través del uso de Internet. Se puede realizar a través de distintas aplicaciones: e-mail, redes sociales, catálogos y carros de compra, intercambio electrónico de datos (EDI), servicios web y protocolo de transferencia de datos (FTP).
A diferencia del comercio tradicional, el E-Commerce permite realizar compraventa sin que sea necesaria la presencialidad. Por otra parte, no existen fronteras geográficas para el cliente, quien además tiene disponibilidad de 24 hs durante los 365 días del año. Para aquellos que poseen un negocio, el E-Commerce brinda conocimiento de la clientela, pudiendo segmentarla y clasificarla. El E-Commerce elimina los intermediarios y facilita el contacto entre fabricantes y consumidores.
A continuación, indicamos en un listado los diferentes rótulos que distinguen los distintos tipos de comercio electrónico: Business-to-Consumer (B2C); Business-to-Business (B2B), Business-to-Employee (B2E), Business-to Administration (B2A), Business-to-Investors (B2I), Consumer-to-Business (C2B), Consumer-to-Consumer (C2C), Administration-to-consumer (A2C), Administration-to-Business (A2B).
Tanto la plataforma musical Spotify como la audiovisual Netflix son del tipo B2C, es decir, Business to Consumer.
De acuerdo con un informe realizado por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) junto con la consultora Kantar, se estima que la facturación por e-commerce creció en el país un 124% durante el año 2020. A diferencia con el año 2019, hubo un 6% más de personas que empezar a comprar a través de Internet, es decir, casi 1.3 millones de usuarios.
El Dropshipping se define como un modelo de negocio en el que una empresa opera sin mantener un inventario, al poseer depósito para almacenar sus productos y enviarlos a los clientes. Los vendedores minoristas se asocian con un proveedor de Dropshipping para que este los almacene o bien fabrique los productos, y los envíe al cliente en nombre del minorista. A través de este modelo de negocio se elimina la necesidad de que el vendedor tenga un negocio con una ubicación física.
Las principales empresas de Dropshipping a nivel mundial son: Amazon, eBay, Mercado Libre, AliExpress y Alibaba. Todas estas empresas ofrecen servicios de e-commerce a través de su plataforma digital.
En principio, la mayor ventaja del Dropshipping es la menor inversión para satisfacer una demanda inicial, ya que no es necesario invertir en stock por adelantado; prácticamente, no es preciso siquiera comprar un producto. Comenzar, en este sentido, es más fácil. Por otra parte, un negocio de Dropshipping puede realizarse desde cualquier parte, siempre y cuando tenga conexión a Internet. Al no ser necesario comprar por adelantado los productos que se pueden vender, es posible ofrecer una gama mayor de productos. A partir del Dropshipping la escalabilidad del negocio es mayor: al estar apoyado el procesamiento de pedidos en los proveedores, el negocio puede escalar con menos recursos de operación y financieros.