La marca que escandalizó a todos con la zunga y hoy está en más de 100 países
Speedo nació en 1928 y causó controversia en las playas australianas cuando lanzó su modelo ajustado y sin piernas. La historia detrás de la marca.
Un mediodía de 1961 en la playa de Bondi, en Australia, un grupo de hombres llamó la atención del resto de los que disfrutaba el sol y la arena. Entre sorpresa e indignación, todos miraban los trajes de baño de estos atrevidos visitantes. A diferencia de los bañadores de la época, estos eran más atrevidos, ceñidos a la cintura y con un corte que dejaba al descubierto sus muslos. Un inspector llamó a la policía y los detuvo por exposición indecente, sin embargo luego fueron liberados. Esta fue la carta de presentación de uno de los productos más disruptivos de la australiana Speedo.
La compañía habido sido fundada en 1914 por un inmigrante escocés, Alexander MacRae. Él había viajado a Australia en 1910 y ahí fundó MacRae Hosiery, un emprendimiento de fabricación de ropa interior. Pero la fuerte cultura de playa del país oceánico lo llevó a redireccionar su negocio hacia los trajes de baño.
Su diferencial estuvo en la materia prima utilizada. En lugar de fabricarlos con lana, que causaba un mayor arrastre a la hora de nadar, MacRae usaba algodón y seda, lo cual permitía mayor flexibilidad y velocidad para los nadadores.
El nacimiento de Speedo
Al principio el nombre elegido para su marca fue Fortitude, a partir de una de las palabras que se encontraban en el escudo de su familia. Pero lo modificó en 1928 tras el lanzamiento de su primer producto que apostaba a mostrar más piel. Ese año presentó la malla enteriza sin mangas con el slogan "Speedo on your speedos" y oficialmente rebautizó a su etiqueta.
El primer gran deportista en usar sus trajes de baño fue el nadador sueco Arne Borg, quien estableció un nuevo récord mundial con su Speedo.
En 1932, la australiana Claire Dennis ganó la medalla de oro en la prueba de 200 metros estilo pecho en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. Su victoria causó controversia porque, aseguraban, la nadadora había mostrado demasiado los hombros con su modelo. Lo mismo sucedió en los JJ.OO. de Berlín 1936 con el equipo australiano masculino de natación y su diseños sin torso.
Demasiada piel a la luz
Speedo dedicó gran parte de su capacidad productiva a la fabricación de materiales para las fuerzas armadas durante la Segunda Guerra Mundial. Una vez terminado el conflicto bélico, la empresa retomó uno de sus proyectos más desafiantes: el bikini.
Al traje de baño de dos piezas se le sumó el slip o zunga, lanzado a comienzos de los 60. La compañía buscaba un modelo arriesgado para promocionar su expansión a los Estados Unidos y al Reino Unido. Entonces contrató al diseñador Peter Travis que buscó emular al popular short hawaiano, pero sin pernera y más ceñido. Aunque al principio los hombres compraban el talle más holgado, pronto se animaron a las opciones ajustadas.
A partir de 1970, Speedo cambió el algodón por el nylon, que se transformó en la tela más popular dentro del rubro. La marca creció a partir de adquisiciones, apertura de oficinas y entrega de licencias. Así desembarcó en Europa del Este, Brasil, México, Islandia, Japón y Sudáfrica. Para 1980 ya se encontraba en 112 mercados.
Speedo en la Argentina
El grupo JMC maneja la licencia de la marca en la Argentina. La firma fundada por Arturo Alacahan también cuenta en su portfolio con New Balance, Joma y New Era, los encargados de lanzar y producir la gorra oficial de Bizarrap. A su vez, abrieron en el país los outlets de H&M y las primeras tiendas de Forever 21.
Desde 1991 Speedo está en manos de Pentland, dueño de marcas como Berghaus, Endura y Mitre. En total el grupo tiene ventas anuales por u$s 8000 millones. A comienzos de 2020 pasó a manejar Speedo a nivel global tras la adquisición de la subsidiaria estadounidense, Speedo North America, a PVH Group por u$s 170 millones.
Compartí tus comentarios