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Del campo y la industria a la biotecnología: por quién se juega el poder económico en Santa Fe

¿Cómo votan los diversos sectores que conviven en uno de los distritos más poblados y ricos del país? De la 125 a Vicentín, ecos del histórico duelo del kirchnerismo con el mundo rural y el impacto de las decisiones políticas sobre los negocios

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En la provincia de Santa Fe conviven dos sectores clave, que a veces se los presenta como antagónicos: el campo y la industria. En los últimos años, la provincia con forma de bota, además, se convirtió en un polo biotecnológico que se aplica, sobretodo, en dos grandes sectores: el agro y la industria farmacéutica. Ahora bien, ¿cómo votan los diferentes sectores económicos que conviven en el distrito que este fin de semana celebrara sus Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO)? 

Dos hitos que ocurrieron en los últimos años simplifican el análisis de los consultores radicados en Santa Fe. El primero es el conflicto del gobierno de Cristina Kirchner con el campo, allá por 2008, que derivó en la Resolución 125 y el voto "no positivo" de Julio Cobos. El segundo: los intentos por parte del gobierno de Alberto Fernández de expropiar la exportadora Vicentin, en 2020. 

Ambos hechos permiten sacar una primera conclusión: el campo, en Santa Fe, no se referencia en el peronismo y, mucho menos, en el "peronismo K". Vale recordar que el día en el que Fernández anunció la intención de expropiar la empresa radicada en Avellaneda, lo hizo con la camporista Anabel Fernández Sagasti sentada a su lado.

"Desde la 125 hay una preferencia generalizada por Juntos por el Cambio", sintetizó un consultor de Santa Fe. El crecimiento de JxC, que en Santa Fe iba por carriles separados con el Partido Socialista le jugó una buena pasada al peronismo; la división de los votos benefició a Omar Perotti. El rafaelino logró imponerse en las elecciones de 2019, dejando atrás 12 años de socialismo.

Cuatro años más tarde de volver al poder, en 2019, con Juntos por el Cambio y el socialismo alineados en un mismo frente opositor, las chances de retener el poder en manos del PJ parecen menores.


Cómo votan en Santa Fe

Como le resumió un consultor a este medio: "En el norte y en el sur de la provincia -que son más ricos porque se concentra la mayor cantidad de productores junto con la industria mecánica- se referencian en Juntos por el Cambio". 

Al mismo tiempo, esa fuente aseguró que, mientras que Maximiliano Pullaro mide mejor en el interior, su rival, Carolina Losada, lo aventaja en Rosario.

"El sector del agro acá se dirime entre Pullaro y Losada", sintetizó una fuente de la Sociedad Rural de Santa Fe. ¿El motivo? "Creen que debe cambiar Santa Fe, sin el peronismo". 

Algunos de los reclamos que le hacen al partido que hoy es gobierno son: la falta de respuesta a los damnificados por la sequía; piden que haya apertura de exportaciones así como también un tipo de cambio único. Y, obviamente, que se eliminen las retenciones al agro. Como resumió esa misma fuente, "le reclaman al gobernador que se ponga más firme con muchos temas que son nacionales".

De hecho, la "falta de firmeza" en torno a los intentos por parte del Ejecutivo de hacerse con la exportadora terminó catapultando a otra figura del radicalismo, por entonces poco conocida a nivel nacional: el intendente de Avellaneda Dionisio Scarpín, que fue compañero de Losada en las legislativas de 2021. 

Ambos ingresaron al Senado y hoy Scarpín la acompaña encabezando la lista de diputados provinciales.

La figura de Scarpín trascendió las fronteras tras el intento del Gobierno de expropiar Vicentin.

En el peronismo santafesino reconocen que el capítulo Vicentín "hizo arrasar a Juntos por el Cambio". De todas maneras, le ponen algunas fichas a las obras de infraestructura que se hicieron durante la gestión de Perotti, sobre todo acueductos en el norte de la provincia, que beneficiarían a los productores agropecuarios. "Habría que ver cómo eso mueve el amperímetro", le dijeron a El Cronista.

En pocas palabras: el peronismo es más fuerte en áreas urbanas y en los sectores de clase media. En el departamento de Rosario, por caso, en las elecciones del 2021, cuando Carolina Losada y Marcelo Lewandowski compitieron por la senaduría -hoy se vuelven a enfrentar pero por la gobernación-, el exrelator de fútbol se impuso por cuatro puntos

En cambio, el radicalismo y el socialismo son más fuertes al interior de Santa Fe.

Biotecnología: un universo dividido

Durante el Gobierno de Alberto Fernández se sancionó una nueva ley de biocombustibles que, a contramano de lo esperado por el sector y los que siguen la agenda del medioambiente, redujo los cortes obligatorios de biocombustibles en nafta y gasoil

¿Por qué esta ley tuvo su impacto en Santa Fe? Porque allí se localizan 18 de las 54 plantas de biocombustibles que hay en todo país y se produce el 80% de biodiesel de la Argentina.

La propuesta, que llamativamente estuvo impulsada por el camporista oriundo de esa provincia, Marcos Cleri, despertó fuertes críticas en el sector. Apenas un puñado de empresarios, con Federico Pucciariello a la cabeza -a quien vinculan con el kirchnerismo-, se mostró a favor de la iniciativa. La oposición le achacó fomentar un "capitalismo de amigos K" con el mismo sector que acompañó su proyecto. 

El resto de los empresarios, que fueron invitados al debate en comisión de la Cámara de Diputados, alertaron que la ley implicaría un cepo al crecimiento del sector que, paradójicamente, comenzó a desarrollarse durante el gobierno de Néstor Kirchner, cuando se impulsó un régimen de promoción.

Más allá de los vaivenes en torno a esa ley, lo cierto es que al menos algunos de los empresarios de ese sector dejaron en claro que votarían por Juntos por el Cambio. "Perotti no hizo nada por el biocombustible", sintetizó uno de los jugadores del sector. La explicación que dio es concreta: el oficialismo bajó el corte obligatorio y, encima, no lo cumple. Y remató: "Nos obligan a vender a un precio que no cubre los costos.

La biotecnología aplicada a la industria farmacéutica se vio beneficiada por los diferentes Gobiernos.

Ese mismo empresario -que prefiere no dar su nombre- apuesta todas sus fichas a Carolina Losada. ¿El motivo? Su equipo técnico "es el que más se preocupa por el sector y su crecimiento genuino", dijo. De paso, destacó, puntualmente, a la diputada nacional Ximena García, hoy candidata a diputada provincial por ese espacio. "Siempre se calentó por el sector y por el medioambiente", dijo el empresario sobre la legisladora nacional.

Pero vale aclarar que la biotecnología tiene otra pata: la farmacéutica. La particularidad, destaca un economista que sigue muy de cerca al sector, es que "se vio beneficiado por Néstor Kirchner, Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández". Podría decirse que existe algo similar a una "política de Estado" en el sector. Es por eso que allí es más difícil detectar afinidades partidarias. 

En otras palabras, un discurso anti-Estado como el que suele pregonar algunos sectores de Juntos por el Cambio (o incluso Javier Milei) no sería el adecuado para un sector que "depende mucho de la política y de la intervención estatal". Como bien sintetiza ese mismo economista, es un sector que creció al calor de "la protección estatal en términos comerciales y de propiedad intelectual".

De todas maneras, como acotó el vocero de una de las empresas con mayor peso en la provincia, en Santa Fe tampoco prende un discurso anti-mercado. "Un Juan Grabois local es impensado", remató.

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