

Con la llegada del calor, los argentinos ya comenzaron a planear sus vacaciones de verano. La costa atlántica, como cada año, se perfila como uno de los destinos más elegidos para descansar, disfrutar del mar y escapar de la rutina.
Pero este verano trae una novedad que promete cambiar la forma en que nos protegemos del sol. Una nueva tendencia está ganando popularidad y se presenta como el reemplazo ideal de las sombrillas, ofreciendo mayor comodidad, diseño y funcionalidad.
¿Cuál es la nueva tendencia que sustituye a las sombrillas este verano?
Se trata de los toldos compactos. Esta alternativa moderna combina sombra, portabilidad y resistencia al viento, lo que los convierte en una opción cada vez más elegida por quienes buscan practicidad en la playa.

A diferencia de las sombrillas tradicionales, los toldos compactos se arman en pocos minutos, gracias a varillas elásticas o tensores que se fijan con estacas o bolsillos de arena. Su estructura flexible y aerodinámica les permite mantenerse firmes incluso en condiciones de viento fuerte.
Beneficios de los toldos compactos
Esta nueva alternativa para protegerse del sol tiene muchas ventajas. Entre ellas se destacan:
- Mayor cobertura y estabilidad: ofrecen más sombra que una sombrilla común y resisten mejor el viento.
- Fácil armado: se instalan en minutos sin necesidad de herramientas ni esfuerzo físico.
- Portabilidad: plegados, ocupan el espacio de una mochila, ideales para caminatas o escapadas.
- Versatilidad: se pueden usar sobre arena, césped o piedra sin necesidad de clavar profundamente.
- Diseño moderno: disponibles en diferentes tonos como beige, terracota, azul o verde, alejándose de los colores estridentes y rayas clásicas.
- Durabilidad: no se oxidan ni requieren mantenimiento complejo.

¿Cuánto cuesta un toldo para la playa?
El precio de los toldos compactos varía según el modelo y la marca, pero actualmente se encuentran en un rango de entre $ 73.000 y $ 180.000.
Aunque son más caros que las sombrillas tradicionales que cuestan entre $ 30.000 y $ 100.000, su durabilidad, funcionalidad y diseño justifican la inversión para quienes buscan una experiencia más cómoda en la playa.













