Ni matcha ni té verde: la infusión que cura todos los dolores musculares y sirve como potente antiinflamatorio

Las infusiones son la mejor manera de complementar una alimentación saludable, ya que reemplazan las bebidas azucaradas como gaseosas y brindan una amplia gama de vitaminas que potencian el bienestar del organismo.

En este contexto, el té verde es un aliado esencial para quienes desean cuidar su cuerpo. La planta es rica en antioxidantes, antiinflamatorios, ayuda a prevenir la atrofia muscular y potencia las funciones cerebrales.

El té verde: un aliado clave para potenciar la salud

Los orígenes de la milagrosa bebida se remontan al año 2737 antes de Cristo y desde entonces ha formado parte de las culturas asiáticas hasta convertirse en un emblema para países como China, Japón e India.

Proviene de la planta Camellia sinensis que pertenece a la familia de las Theaceae. Suelen medir entre 4 y 15 centímetros y pueden ser reconocidas por sus flores axilares.

La planta es una gran fuente de catequinas, un tipo de antioxidante conocido por acelerar el metabolismo en un corto periodo, por lo que está recomendado para quienes desean adelgazar.

En la misma línea, contiene polifenoles EGCG (epigalocatequina-3-galato) que protegen las células del paso del tiempo. Además, se une con el colesterol en el intestino para evitar ser absorbido en el torrente sanguíneo.

Cabe resaltar que estimula la termogénesis, por lo que incrementar la temperatura corporal y aumenta el gasto calórico. También estimula la oxidación de grasas, por lo que es comúnmente consumido por quienes inician una dieta.

La epicatequina: el compuesto del té verde que previene la atrofia muscular

El té verde también contiene una gran cantidad de epicatequina, un compuesto fenólico que promueve la diferenciación del músculo esquelético y contrarresta los mecanismos que participan en la degradación de proteínas.

Según un estudio publicado en la revista Nutrients, las epicatequinas podrían favorecer las acciones miogénicas e interferir en la síntesis de mitocondrias de los músculos.

Además, mejoraría el rendimiento de la musculatura esquelética al ser combinada con ejercicio. Así, su acción antioxidante y antiinflamatoria podría prevenir la atrofia muscular.