Cuarto intermedio en la cumbre de Juntos por el Cambio por el affaire Schiaretti
Sorpresiva presencia de Luis Juez, que fue escuchado antes del inicio. Expectativa por el debate caliente en medio de la elección cordobesa. Drástica posición de la UCR de Córdoba.¿Ampliar ahora o después de votar?
La reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio pasó a cuarto intermedio sin fecha y sin decidir sobre la incorporación de Juan Schiaretti y su frente partidario antes de la elección PASO. Formalmente el encuentro empezó en hora, pero fue para escuchar al senador y candidato a gobernador cordobés por la coalición opositora, Luis Juez, que sorpresivamente se presentó en el Comité Nacional de la calle Alsina. La tensión se palpaba desde el inicio.
"Esta originalmente era una reunión de cuatro, no hemos resuelto nada de lo que vinimos a resolver" fueron las primeras declaraciones del titular del partido, Gerardo Morales, al aceptar que "es necesario bajar los decibeles entre Patricia (Bullrich) y Horacio (Rodríguez Larreta)". De hecho, la culpó a la precandidata a presidente de haberle realizado un piquete. "Ella manda la gente", dijo.
Formalmente la reunión de mesa nacional de Juntos por el Cambio donde el gobernador de Jujuy precandidato a presidente, Gerardo Morales, fue anfitrión. Como titular del centenario partido, fue su equipo el encargado de convocar al presidente interino del PRO, Federico Angelini, el presidente de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro y el presidente del Encuentro Federal Republicano, Miguel Angel Pichetto que se está desarrollando en el tercer piso del histórico edificio.
Sorpresivamente se hizo presente Luis Juez, candidato a gobernador en la provincia de Córdoba por la coalición, quien llevó la voz de Juntos por el Cambio y el acuerdo transversal que competirá en elecciones el próximo 25 de junio. Su presencia guarda relación con la jugada propuesta ayer en público por Rodríguez Larreta para incorporar al gobernador Juan Schiaretti, rival de Juez en Córdoba. "Tiene razón de estar enojado", dijo después Morales en diálogo con los periodistas.
Entre los cuatro se esperaba dar inicio público a una discusión que se mantuvo soterrada hace varios meses. ¿Cuál es el perfil de la coalición opositora ante los nuevos tiempos, sin liderazgos claros dentro de los dos principales partidos? También se vio ingresar a uno de los operadores del PRO, coordinador con los demás partidos en la mesa, el ex ministro de Trabajo Jorge Triaca. Aparecieron sorpresivamente otros miembros de la coalición, Alberto Asseff y Ricardo López Murphy, "mandados por Patricia", pero no se los dejó participar del encuentro.
Morales le echó la culpa de la interna al PRO, pero tampoco él la tiene fácil. No solo la UCR cordobesa (abajo último comunicado) se pronunció en contra, tampoco provincia de Buenos Aires, Santa Fe y Mendoza acompañan su estrategia de este momento. "Se metió solito", dijo una destacada referente partidaria, atenta que la política de alianzas deberá volver a discutirse con más precisiones el próximo 12 de junio, en la convención que se desarrollará en Parque Norte.
Era probable que durante el encuentro se formalice la inclusión del partido GEN, de Margarita Stolbizer, y concluya la discusión para la incorporación a Juntos por el Cambio de José Luis Espert, sobre la que en principio no hay discusión aunque restan algunos pasos formales. Pero hoy no pudo avanzarse al respecto.
El punto caliente fue el ingreso bajo un sistema de frentes de Juan Schiaretti y el peronismo no K, que es rechazado enfáticamente no solo por Patricia Bullrich, sino incluso por los partidos que forman parte de la coalición en la provincia de Córdoba, el candidato a intendente de la ciudad capital, Rodrigo De Loredo (UCR), Soher El Sukaria (PRO) y el mismísimo candidato a gobernador, Luis Juez (Frente Cívico de Córdoba).
"Hemos logrado frenar la decisión y se pasó a un cuarto intermedio sobre este tema. No me vine a llevar ningún triunfo ni ninguna derrota. Represento una alianza plural en la provincia de Córdoba. Hicimos todos los deberes, la oposición se ordenó, se disciplinó y el electorado lo está reconociendo", expresó el referente cordobés al salir.
Y añadió: "Van a evaluar el tema y las definiciones pasarán para más adelante. Levantamos nuestra bandera y venimos a plantear que somos una opción distinta al aparato monstruoso que necesitó el peronismo para mantenerse en el poder y no estamos dispuestos a renunciar. Entiendo que fui escuchado".
Con la reunión en la sede nacional del partido ya iniciada, la UCR de Córdoba amplió su pronunciamiento del fin de semana contrario a la inclusión de Schiaretti y dio un paso más: se le dio instrucción a los convencionales provinciales para plantearlo en "la convención nacional que se realizará el 12 de junio".
Incluso fueron directo contra el titular del partido. "Que el presidente del Comité Nacional de la UCR a quien se solicita dirigirse, es también gobernador de una provincia, por lo que descontamos que considera que, resolver la incorporación ya planteada, como una inaceptable intromisión que, en el contexto actual, significa una flagrante violación al federalismo".
En Córdoba, mientras tanto, esperan mañana la llegada de Mauricio Macri, otrora socio político en las sombras de Schiaretti, hoy alineado en la estrategia contraria Morales y quien esperaba ser su delfín, Horacio Rodríguez Larreta. El radical De Loredo será el encargado de presentar su libro, Para qué. Compartirán escenario con El Sukaria, la figura más cercana a Macri hoy en la provincia y hoy candidata a viceintendenta de la capital cordobesa. Por si fuera poco, Macri compartirá escenario con Juez en la Bolsa de Comercio.
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