Idea revolucionaria: estos rosarinos usan moscas para transformar desechos en alimento balanceado
Dos amigos pusieron en marcha un proyecto de biotecnología que transforma los residuos de la industria cervecera en harina, aceite y fertilizante a través de la ayuda de un tipo de mosca.
Mosquita Feed Co convierte materiales orgánicos y residuos de poco valor en productos sostenibles, bioseguros, de alto valor e impacto para la alimentación y agroindustria. Sus creadores son Juan Ubieta y Gianfranco Speciale, quienes co-crean junto a científicos y emprendedores soluciones simples, con un modelo de negocio que potencia la cadena de valor de la industria cervecera, revalorizando su principal residuo: el "bagazo cervecero".
Usan una herramienta biológica, la Hermetia Illucens o mosca soldado negro, para obtener tres productos que sirven luego como insumo para producir alimento balanceado animal: Mosquita Meal, una harina proteica; Mosquita Oil, un mix de aceites; y Mosquita Ferti, un fertilizante orgánico.
Este proyecto fue uno de los ganadores de la quinta edición de la StartUp Competition de la Universidad de San Andrés y el Centro de Emprendedores de la universidad, una de las más destacadas iniciativas en el país, que busca impulsar los proyectos o ideas de emprendedores y emprendedoras.
¿Cómo nació el proyecto?
Los rosarinos Ubieta y Speciale se conocieron cuando eran estudiantes de Administración de Empresas, y emprendieron luego de recibirse. Fue su primer trabajo porque, según cuentan, siempre quisieron ser emprendedores y dar soluciones a problemas. Sabían que la industria cervecera desechaba bagazo, un residuo de bajo valor que, si se quiere aprovechar, tiene que hacerse en las propias instalaciones de la industria porque si no, su traslado es muy caro. Arrancaron en 2019 y salieron a validar su idea. Luego, se aliaron con la venture builder Xerendip, que aportó capital y los ayudó a crecer.
¿Qué hacen?
Se dedican a la biotransformación del bagazo cervecero, el principal desecho de la industria, para transformarla en insumos para alimentación animal: harinas proteicas, aceites y fertilizantes orgánicos. Su principal aliada en esta misión es un tipo de mosca, la soldado negro, que se encarga del proceso que le permite revalorizar más de 135 veces este residuo.
Sus clientes son los formuladores de alimento balanceado, y las empresas cerveceras son partners, quienes les permiten montar plantas de bioconversión de bagazo en las cercanías de sus plantas, que son modulares y escalables para la necesidad de cada cervecería. En ellas se desarrolla todo el proceso biotecnológico hasta el procesamiento para dar con el producto final.
¿Qué planes tienen para 2022?
El 2022 será el año en que monten la primera planta industrial. Hasta ahora solo contaban con una planta piloto en la ciudad de Rosario, pero el próximo paso será comenzar con la construcción de esta planta para luego ir expandiéndose a través de nuevos clientes. Su visión es hacer de esto un proyecto con clientes en toda la región.
En cifras
- Fundación: 2019
- Inversión total hasta la fecha: US$ 150.000
- Cantidad de empleados: 10
- Facturación 2022 (p): US$ 500.000
La versión original de esta nota se publicó en el número 336 de revista Apertura.
Compartí tus comentarios