Menos dólares del agro: cuánto perdió AFIP por la sequía en lo que va del año
Producto de las menores ventas externas de soja y la mayor importación de producto de Brasil y Paraguay, el "dólar agro" no pudo mejorar el balance de las finanzas públicas. El efecto en las metas con el FMI.
El primer semestre no sólo cerró con un rojo en las reservas del Banco Central, el efecto nocivo de la sequía se sintió también en la recaudación de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), que sólo sumó u$s 2579 millones por retenciones y frenó el cumplimiento de las metas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Pese al incentivo del Gobierno para alzar la liquidación de divisas y cerrar la brecha fiscal, el "dólar agro" alzó los compromisos, pero no logró compensar la caída de ingreso de divisas del campo, que llegó a mínimos históricos en el primer trimestre del año.
Los Derechos de Exportación (DEX) que graban las ventas al exterior, se retrajeron prácticamente la mitad de lo que explicaron en el mismo período de 2022, indica un informe de la Bolsa de Cereales de Rosario (BCR) y advierte sobre el efecto de las menores ventas externas del agro en la economía.
En un año en que la sequía le costó al país cerca del 40% de su producción granaria, el impacto de "tamaña pérdida" se "disemina a lo largo de toda la economía", expresaron los economistas Julio Calzada y Javier Treboux.
"Los recursos aduaneros son una parte importante de la recaudación del Estado Nacional, sobre todo al considerar que no se coparticipan entre las provincias, y representaron cerca del 8% de la recaudación total del 2022", aseveró el informe.
En la primera mitad de 2023, se recaudaron $571.395 millones de pesos por este concepto, un 10% por debajo del año pasado en pesos corrientes y 50% por detrás del año previo medido en dólares estadounidenses, según información de AFIP.
El ingreso de la cosecha gruesa y la instauración del Programa de Incremento Exportador (PIE III) tuvieron un efecto positivo para morigerar la caída, pasando de una contracción del 80% en moneda dura en marzo (mes contra mes), a una caída del 6% en junio.
"La caída en las ventas externas de los complejos agroindustriales, segmento que representó 9 de cada 10 pesos que recaudó el Estado en DEX el año pasado, fue el factor fundamental de la merma", indica la BCR.
Menos ventas, menos dólares
Entre enero y junio de 2023, las Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) disminuyeron de forma considerable entre los principales complejos.: las de aceite y harina de soja cayeron entre un 40 y un 45% mientras que las de maíz un 60%; por su parte la comercialización de trigo pasó de 11,5 millones de toneladas en el primer semestre de 2022, a prácticamente cero.
Sumado a estos menores volúmenes declarados en ventas externas, los analistas destacan el peso de la mayor importación de soja de Brasil y Paraguay, para compensar la falta del producto nacional.
Este punto se vuelve central ya que se debieron importar unas 5 millones de toneladas de soja en el semestre, un "récord absoluto" que produce un doble efecto negativo para las reservas del Banco Central.
Por un lado, los productores demandan más dólares oficiales y, la recaudación se reciente ya que los productos que se exportan a partir de la molienda de mercadería importada, tributan solo sobre el valor agregado.
Impacto del "dólar agro"
Tras el desplome de los primeros meses, Economía puso en marcha el "dólar agro", una versión ampliada en tiempo y productos a las anteriores que sólo impulsaban con un mejor tipo de cambio a la soja.
Según las estimaciones de la BCR, considerando los complejos soja, girasol, cebada y sorgo durante el plazo de vigencia de la medida para cada uno de los cultivos, el impacto en recaudación por retenciones de los complejos alcanzados fue de aproximadamente u$s 1130 millones.
Del total, u$s 1060 millones estuvieron explicados por el complejo soja; las ventas de cebada dejaron u$s 30 millones, en línea con las de girasol mientras que el sorgo se acercó a los u$s 10 millones.
Por último, al realizar la comparación contra los anteriores programas, que se implementaron en los meses de septiembre y diciembre de 2022, el impacto en el fortalecimiento de las reservas fue similar al programa anterior.
El contraste fue mucho mayor con la primera versión del PIE, que representó un shock de recursos aduaneros por u$s 3296 millones.
La recaudación de la iniciativa que llevó de $211 a $300, el tipo de cambio para la comercializan los productos del complejo sojero y de las economías regionales, hasta ahora representa tan sólo un tercio del primer incentivo exportador.
En relación al segundo semestre, las expectativas están puestas en el inicio de la siembra ya que el producto que se perdió no podrá recuperarse. En ese sentido, en la negociación con el FMI, el gabinete económico apuesta a la reducción de gasto que generará el Gasoducto Néstor Kirchner, pero pone la mira en 2024, cuando se restablezca el ingreso de divisas del campo.
Compartí tus comentarios