La familia española que pelea en el negocio de las papas fritas con su marca popular
Krachitos maneja un 20% del market share de snacks en el mercado local. En 1962 Cándido López Fajardo emprendió junto a sus hijos, aunque en otro rubro.
En la Argentina se consumen más de 20 millones de kilos de snacks. Las papas fritas son las estrellas del segmento con casi la mitad del volumen total. Si bien las etiquetas internacionales son las dominadoras de la categoría, en los últimos años las marcas argentinas ganaron terreno en el mercado. En particular, una de las más populares es Krachitos, que nació para acompañar el negocio cafetero original de la familia fundadora.
En 1962, el español Cándido López Fajardo, nacido en 1919, fundó una compañía de café junto a su esposa Adela Sobrino. El objetivo inicial del emprendimiento era ser proveedor del canal gastronómico, puntualmente de cafés y restaurantes. Al proyecto se sumaron los dos hijos mayores del matrimonio, Cándido y Agustín López Sobrino, de 18 y 15 años, respectivamente.
Del café al copetín
Poco a poco la firma de los López se expandió con más clientes dentro del rubro hotelero. A su vez, con el correr de los años se sumaron los otros hijos de López Fajardo y Sobrino: José, Camilo y Jacinto. Así fue que en 1974 fundaron la sociedad Los 5 Hispanos SA como homenaje al país en el que habían nacido todos.
Durante esa misma década la familia decidió diversificar su negocio y empezaron a fabricar snacks para bares y café. Elaboraban toda una línea de copetín, desde papas fritas hasta palitos y maní que luego distribuían entre sus clientes conocidos. Y a fines de los 80 ampliaron esta unidad a los supermercados bajo la marca Krachitos.
Los pioneros del snack argentino
El pionero dentro del negocio de las papas fritas en la Argentina fue el empresario vasco-filipino Augusto Aboitiz, que fundó Bun en 1958 para replicar el éxito que aquel producto tenía en los Estados Unidos. Con esta empresa lanzó los snacks de queso Kesbun unos años más tarde.
Luego, en los 60, llegó Kellogg's con las papas fritas Frenchitas y el maíz inflado sabor queso Chizitos. Pero PepsiCo se transformó en el protagonista con su lanzamiento en el mercado argentino en los 90. Primero adquirió Bun en 1993, más tarde se quedó con el negocio de snacks de Kellogg's y en 1997 compró la marplatense Pehuamar.
Nueva generación
Si bien PepsiCo, con Lay's, Cheetos, Doritos y otras marcas de su portfolio, lideran el segmento de snacks; Krachitos maneja entre un 15 y 20% del market share. En los últimos años también surgieron nuevas etiquetas que empezaron a comer participación dentro de la categoría, como Gauchitas, Quento, Nuestros Sabores y Alwa.
Hoy Cándido López Sobrino está a cargo de la empresa junto a sus hermanos. Si bien el grupo dio sus primeros pasos en el negocio del café, la pata de snacks ya se lleva la mayor parte del volumen con sus dos plantas en la zona oeste del Gran Buenos Aires.
López Fajardo, el fundador de la compañía, falleció en 2008. Sus hijos, en homenaje, lanzaron una variedad de café premium con la marca Don Cándido. Se trata de un café en granos blend 100% arábica en lata.
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