Costumbres Argentinas lanzó un nuevo concepto de franquicias "mini" y apuesta al Microcentro

El Microcentro porteño se convierte en una oportunidad, sobre todo para el sector gastronómico. La pandemia generó decenas de cierres y un escenario desolador para la clásica zona de oficinas. Pero, ante el regreso a la presencialidad y la falta de oferta culinaria, las marcas apuestan a esta zona nuevamente con nuevos conceptos.

Costumbres Argentinas, entiende de oportunidades y en este escenario lanzó un nuevo concepto de franquicia bajo el nombre de tienda "mini". Se necesita una inversión baja con espacios pequeños que, apuestan sobre todo a revalorizar la zona del Microcentro.

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"Son locales pequeños que se pueden desarrollar en 30 metros cuadrados (m2) en adelante. La inversión inicial es de u$s 19.500 y viene a responder a la demanda que hay hoy en las zonas céntricas", explicó  Gustavo Galop, Director Comercial de Costumbres Argentinas.

Además la marca busca aggiornarse al nuevo escenario que generan las próximas elecciones con incertidumbre política y financiera. "Responde a la necesidad que tiene hoy el franquiciado", remarcó. Solo en 2023 tiene previsto abrir 20 tiendas de 30 m2 promedio.

La marca que ofrece desde productos panificados, pasando por comidas rápidas y artículos congelados ya cuenta con 100 franquicias en todo el país. "Es un modelo de local que va a funcionar muy bien y que apuesta a compras de paso", agregó Galop.

El nuevo formato "mini" se centra en productos de alta rotación, principalmente panes, pastelería, pizzas y empanadas. Al tratarse de espacios pequeños, solo se necesitan tres empleados y desde la empresa calculan un recupero de la inversión en 24 meses.

En promedio, cada franquicia factura entre $ 2 millones y $ 3 millones al mes. Un promedio de $ 36 millones al año.

La empresa de alimentos tiene su propia planta de producción, de 14.000 m2 en la localidad de Don Torcuato, provincia de Buenos Aires. Allí, emplea a un total de 600 trabajadores: 290 en fábrica y el resto distribuidos a lo largo de sus 100 sucursales.

Ofrece cuatro modelos de inversión: El flamante "mini" con un promedio de 30 m2, negocios "chicos", de hasta 60 m2; "medianos" con un máximo de 80 m2 y por último los negocios con "panadería y cafetería" que cuentan con espacios de comedor. "Estos últimos locales crecieron mucho después de la pandemia y aún hoy hay muchas aperturas. La gente en los barrios sigue buscando espacios donde sentarse a comer", agregó Galop.

El año pasado Costumbres Argentinas, invirtió más de u$s 500.000 y desembarcó en Uruguay con el objetivo de alcanzar un total de 15 tiendas operativas en 2024. A diferencia de los locales en la Argentina, en Uruguay, las sucursales son similares a confiterías: con mesas para poder comer las cuatro comidas del día. La apuesta es seguir creciendo en el exterior con el ojo puesto también en Chile

Nueva línea

La marca tiene una gran variedad de productos: medialunas, empanadas, pizzas, artículos panificados, helados y hasta comidas rápidas. 

La apuesta este año está en lanzar una nueva línea veggie que se suma a los productos Kosher que tiene la marca. Por ahora la oferta se centra en los panificados, y algunos artículos congelados de panadería.

"Esta nueva apuesta muestra una vez más que siempre estamos atentos a las necesidades de nuestros franquiciantes, pensamos formatos acordes a sus posibilidades para poder acompañarlos en su crecimiento", finalizó el ejecutivo.