Enfoque

Reaparecen talibanes y se aleja el acuerdo con el FMI

Resultan inquietantes las últimas novedades políticas mirando el incierto cuadro económico que se avecina para la administración Fernández-Fernández en su segunda mitad. Parecen ganar espacio los talibanes tanto en el gabinete como en la definición del rumbo del Gobierno.

Se teme ahora que una vez terminado el proceso electoral ya prácticamente definido en contra del Gobierno, no se llegue a un acuerdo con el FMI y que la decisión de Cristina sea radicalizar la economía, intentando más estatizaciones, más intervención en los mercados y mayor persecución a las empresas. Morir con las botas puestas.

Viajan en estas horas a los Estados Unidos tanto el ministro Martin Guzmán como el jefe de Gabinete, Juan Manzur a negar la radicalización. Intentan apoyo internacional, pero deberán explicar en Washington la fuerte resistencia del cristinismo y La Cámpora para reducir el déficit, aumentar tarifas y devaluar para aliviar en parte el déficit y el cepo cambiario. Ya el organismo aclaró que las condiciones para la Argentina no se van a modificar. No habría espacio ni para bajar la tasa ni para subir de 10 a 20 años el plazo de pago.

Tanto la llegada de Roberto Felletti a la secretaría de Comercio; como las complicaciones cada vez más evidentes para lograr un acuerdo que evite el default con el FMI en el futuro inmediato, alimentan renovados temores del mundo económico a una radicalización de la política económica.

En línea con la estrategia de colocar en el Presidente y su ministro de Economía la mayor responsabilidad por la derrota electoral en la PASO, tanto Cristina como Máximo Kirchner se lanzaron a un cuestionamiento creciente y por izquierda a la conducción económica y a la voluntad de lograr un acuerdo con el FMI. Roberto Felletti viene siendo uno de los principales voceros en ese sentido.

No aceptan ni el aumento de tarifas para reducir subsidios, menos sincerar parte de la devaluación acumulada en meses y meses de emisión monetaria fuera de control. Al contrario: reclaman mayores controles de precios y del dólar, redoblar la emisión y reparto de subsidios, y combatir la inflación con la amenaza de la ley de abastecimiento. "Clausurar comercios", según reclamó la diputada Cecilia Moreau, como si cerrar establecimientos no atentara contra la actividad, el empleo y sobre todo, el abastecimiento. Nada de abrir las exportaciones de carne o de granos. Finalmente no se levantó el cepo a las exportaciones de la vaca china como anunció Julián Domínguez. Habrá cupos. Y se cerró de prepo el registro para exportar maíz disponible. Administrar exportaciones, más intervencionismo contra el sector más eficiente y que más divisas ingresa cada año al país.

Extraña respuesta del oficialismo a la derrota electoral. La gente votó contra la política que le impuso Cristina y la Cámpora al Presidente. Está claro que Alberto no fue una víctima, sino un cómplice de semejante destino. Tanto las principales decisiones económicas, sanitarias, educativas y de política exterior fueron impuestas por Cristina. En contra de lo que el Presidente y Sergio Massa habían prometido a la ciudadanía desilusionada con Macri y Cambiemos en 2019. Prometieron que no iban a ser ni Cristina ni Axel ni La Cámpora. Gobernaron con más autoritarismo que Cristina y con más cepos y controles económicos que Axel Kicillof.

En la derrota, redoblan la apuesta. Tal vez porque mucho no les preocupa la voluntad popular. La izquierda extrema, peronista y aliados, nunca la respetó. Ni en los 70', ni en los 80', ni en los 90'.

Lo dijo con todas las letras el dirigente oficialista Emilio Pérsico. El líder más iracundo del movimiento Evita se sinceró en el acto de los piqueteros oficialistas. Se manifestó en contra de la democracia representativa, de las leyes, costumbres y la Constitución Argentina; y a favor del modelo económico y político marxista de planificación económica estatal que rige en Cuba o Venezuela.

Sectores de izquierda y ultra izquierda que han organizado la protesta de los millones de pobres abandonados por la política tradicional, y que hoy representan a través de los movimientos sociales un factor de presión política extremadamente sensible. Pueden no sumar más de 10% de los votos en todo el país, pero establecieron a través de los piquetes y los cortes de calles un sistema de extorsión a la política y a la sociedad de imposible solución. Desde el asesinato de los activistas Kosteki y Santillán en 2002; la política optó por liberar las calles para no correr el riesgo de nuevas víctimas por la represión policial.

Hoy los movimientos sociales tienen aún más poder que los gremios. Reciben mayor volumen de subsidios, administran casi un millón de planes sociales y se financian con los impuestos de todos los argentinos. Detrás de la loable ayuda a los más postergados, existe un proyecto político: remover la democracia representativa, evitar la alternancia en el poder e instalar un autocracia en el país, modelo a la criolla en los espejos de Cuba, de Venezuela, de Rusia o de China.

Importan los resultados electorales, la Justicia y el nuevo armado de la oposición para enfrentar la amenaza de radicalización en el Gobierno; si es que después de las elecciones Cristina decide ir por todo, empezando por Alberto.

Mientras se discute si Cristina será finalmente pragmática (con el FMI, Manzur, Insaurralde y los gobernadores del PJ), o seguirá profundizando el modelo de Axel, Pérsico y Felletti, el descontrol macro económico se acelera.

La devaluación se hace todos los días. A cada minuto que se emite sin respaldo para financiar el déficit. En contra de lo que se requiere para frenar la inflación. Se hace lo contrario. Sigue aumentando el gasto, se profundiza el déficit y la maquinita de imprimir billetes ya no da abasto. Merecen atención estos números que reveló el economista y periodista Daniel Sticco:

- Los pasivos monetarios remunerados del BCRA, que es donde los bancos guardan el dinero de la gente depositado en cuentas corrientes, cajas de ahorro y plazo fijos, prácticamente se duplicaron en 9 meses.

- Eran 2,7 billones a diciembre de 2020, y treparon a 4,2 billones al 30 de septiembre último. Aumentaron de 2,3% a 4,4% del PBI.

- Es la bola de nieve de pesos que crece al 40/50% anual y que dispara el dólar y la inflación.

- El Gobierno sigue aumentando el déficit a pesar de que hace 13 meses consecutivos que sube la recaudación en términos reales, y de que existe hoy la mayor presión impositiva de la historia.

- Nada alcanza, el gasto no para de subir, tampoco la inflación y la pobreza.

Parece improbable que ante este desmadre se vaya a contener la inflación amenazando a la empresas con la cárcel. Mucho menos que habrá mejor futuro para los argentinos plantando al FMI y yendo a un default con el mundo.

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Comentarios

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  • LD

    Luciana Dangelo

    12/10/21

    Esta nota esta escrita toda en potencial "teme" "llegue", ahora el editorial del cronista hace futurología.
    También ¿En donde esta la seriedad en comparar a funcionarios de una republica democrática con fundamentalistas militantes (ultra violentos) de la religión islámica?.
    Otro tema, ahora tomarse tiempo para lograr mejores condiciones en un acuerdo tan importante como re perfilar la deuda impagable, que nos dejo (de muy mala fe) a todos los argentinos el gobierno anterior, ¿es una complicación? .
    Y por ultimo deberían dejar de desinformar, hagan control de estos editoriales, se están jugando su credibilidad como Diario, las exportaciones están abiertas, el cupo es eso, un limite a cuanto pueden exportar. La ganancia la tienen, no por nada hubo récord de ganancia en el campo, los que les duele es no poder ganar todo lo que quieren.

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    • HB

      Hector Bod

      12/10/21

      Las notas escritas en potencial previniendo al pueblo cuando la runfla llegó al poder se transformó en una real y concreta tragedia que hoy vivimos y que felizmente en noviembre vamos a corregir. Recuerden a Kicillof en TV, con Canosa pocos días antes de las elecciones reconociendo 250 mil millones de dolares de deuda en su gestión. No saber no es pecado, repetir mentiras como loritos si.

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    • JLB

      jose luis Bellusci

      12/10/21

      LO que tu dices es totalmente una IGNORACIA , y el verso K, Macri hizo muchas maxanas pero la deuda no la inventó él, vene de mucho mas atras, lo que hizo el gobierno anterior es, poner las cosas al día del desastre que venía la Argentina y abríó los mercados interncionales al país. Lo demás es pura historieta.

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  • JMR

    Juan Manuel Roma

    12/10/21

    Como el cronista tiene como nota principal del día esta pedorrada de editorial? Por favor un poco de seriedad, no se entiende en que película vive este señor...

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  • TG

    Tomás García

    12/10/21

    Kohan, la verdad que usted no es serio.

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    • HB

      Hector Bod

      12/10/21

      por suerte para serio está AnIbal... jeje

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