Sueldos ejecutivos 2024: los escenarios que proyectan las empresas según quién gane las elecciones
Cualquiera sea quién asuma, deberá aplicar programas de reordenamiento, pero la profundidad de las medidas y la situación de las empresas variará según quien resulte electo.
El escenario electoral, con sorpresas como el batacazo de Javier Milei en las PASO y el resultado de tres tercios, con Patricia Bullrich y Sergio Massa en segundo y tercer lugar, elevó la incertidumbre sobre el 2024, por lo que las proyecciones de muchas empresas están en el freezer y los economistas apelan a sus recuerdos de experiencias pasadas y hasta a su imaginación para prever lo que sucederá el año que viene. Eso incluye el impacto que pueda tener en el mercado laboral el ascenso de uno u otro candidato.
Lo primero que hacen los economistas antes de estimar ese efecto es señalar qué medidas podrá adoptar el próximo presidente en el primer año de gestión y cuáles deberán esperar.
"Hay que plantearse 2024 como un año de cambios o de transición hacia ellos. Cualquiera de los tres candidatos que gane tendrá que pasar por ese proceso", dice el economista Dante Sica, director de la consultora Abeceb. "Seguramente Massa será la continuidad de lo que estamos viendo ahora, con un poco más de orden fiscal y un poco más de dólares del comercio exterior", proyecta.
Sica señala que, sea quien fuere quien gane, tendrá que implementar, con mayor o menor profundidad, un programa que tienda a la estabilización y a la corrección de los desequilibrios.
"Claramente, en un escenario en el que gana el oficialismo, ese programa será mucho más suave, sólo para ir estabilizando de a poco, pero sin reformas estructurales, donde todos los factores de administración de comercio actuales, incluidos los tipos de cambio múltiples y la discrecionalidad, van a estar presentes", estima. Señala, además, que, en ese marco, la inflación podría descender levemente.
"Si gana Bullrich, el programa incluirá un giro de 180 grados y en dos partes, con una segunda mitad del año con una inflación en franco proceso de disminución hacia un dígito y un reacomodamiento de los precios relativos", prosigue. Y completa: "Milei seguramente también planteará un programa de estabilización macroeconómico, con una dolarización larga; por lo tanto, en una primera etapa, habrá un proceso de reformas monetarias y cambiarias, igual que lo que puede estar previendo Cambiemos".
Sica sugiere, sin embargo, que la aplicabilidad de las medidas propuestas por Milei es dudosa, con un Congreso que no le sería favorable y sin acuerdos políticos que le permitan implementar las medidas estructurales que anuncia.
Escenario 2024 para los planes de las empresas
Este panorama es el que están anticipando las consultoras a las empresas para poder orientar los presupuestos de 2024, pero siempre en términos condicionales.
"He estado en muchas reuniones de planeamiento estratégico de muchas compañías en las últimas semanas, antes y después de las PASO, y las empresas hacen escenarios, pero los candidatos, también. Además, la mayoría de las propuestas anunciadas, aun las más drásticas, no se implementarán de manera abrupta el primer día. Así que la mayoría de las empresas grandes están trabajando más en principios, que en decisiones", apunta Luis María Cravino, docente de la Licenciatura en Recursos Humanos de UADE.
Esos principios son -enumera- hacer un esfuerzo para adecuar a la inflación las compensaciones de los niveles fuera de convenio, hacer ajustes cada vez más seguido y aplicar sistemas de gestión de desempeño para que los aumentos no sean iguales para todos. Para Cravino, se puede anticipar que, si la economía tiene una pendiente de inflación mayor que la actual, podría haber ajustes mensuales de salarios.
"El gran punto para saber qué va a suceder con los salarios es conocer qué va a pasar con las empresas. Si cambia la variable dólar, las firmas que están más vinculadas con las exportaciones tendrán más margen. Si cae el consumo interno, las que están más relacionadas con el mercado local tendrán menos", resume y afirma que, en caso de un incremento elevado de la inflación, esta se impondrá como parámetro (antes que la evolución del dólar) para adecuar sueldos.
Federico Carrera, cofundador y COO de la consultora de reclutamiento ejecutivo High Flow, reúne a Milei y Bullrich en la misma línea de acción y les atribuye también similar impacto. "Si ganan Milei o Bullrich, el escenario local podría seguir una tendencia distinta a la que tendría un gobierno de Massa", anticipa. Señala que si cualquiera de los dos ganara -y si se reducen las propuestas de ambos a la unificación del tipo de cambio, la flexibilización laboral y la eliminación o reducción de las retenciones a las exportaciones- sus medidas serán pro-mercado y tenderían a un mayor nivel de competencia, en el que las inversiones del exterior, los ejecutivos locales y los consumidores se verían favorecidos.
"Si vemos la continuidad del proteccionismo, la restricción de las importaciones, las retenciones y la multiplicidad del tipo de cambio como tendencia pro-Estado, encontramos una restricción selectiva al comercio internacional, en la que sólo parte del empresariado local, proveedores del Gobierno y los trabajadores estatales se verán beneficiados, dado el desincentivo a invertir y competir en el país", completa.
Sueldos ejecutivos en plena incertidumbre
Cabe tener en cuenta que no se llega al incierto 2024 en un camino sin sombras. Todavía hay empresas que no pueden definir los sueldos de su personal fuera de convenio hasta fin de este año, debido a la imposibilidad de prever las turbulencias que puedan producirse a partir de las elecciones, con el antecedente del cimbronazo en los mercados que tiende a haber en la Argentina en estas ocasiones. Es por eso que Mariela Rendón, senior manager de People & Organisation de PwC Argentina y Damián Vázquez, socio a cargo de Management Consulting de la misma firma, aclaran que la situación exhibirá algunas similitudes.
"Consideramos que el escenario será igual de complejo. Las empresas tienen que estar muy pendientes de los movimientos del mercado y saber anticiparse y prepararse. La gestión de compensaciones y beneficios seguirá siendo un gran desafío para todas, sin importar su tamaño o rubro", consideran.
Bullrich y Milei anticipan cambios estructurales en el mercado de trabajo, lo que, para algunos analistas, terminaría redundando en transformaciones para todos los empleados.
"Hay que decir que en la Argentina falta una reforma laboral. Hace por lo menos 30 años, ha habido gobiernos de todos los signos, tanto del Frente de Todos como de Cambiemos, y ninguno, por negligencia o por incapacidad, ha hecho cambios en serio", opina Matías Ghidini, CEO y socio de GhidiniRodil.
"De todas formas, la reforma laboral requiere de consensos, de mucho diálogo, de entender el trabajo del futuro, de articular intereses de los sectores público y privado y del sistema educativo. Mi sensación es que no va a ser una prioridad dentro de todas las urgencias que tiene hoy la Argentina, pero sí creo que la reforma laboral es inevitable para poder generar empleo privado de calidad", manifiesta.
Por su parte, Sica defiende la idea de implementar cambios legales en el mercado de trabajo. "Se plantea una adecuación de todo el sistema laboral a las nuevas formas de trabajo y eso va a implicar modernización de los convenios colectivos y atacar los problemas de judicialización de las relaciones laborales, así como todas aquellas nuevas formas de contrato. Es decir, las normas que permitan dar una mayor cobertura tanto a los que están fuera como dentro de convenio", afirma.
La situación macroeconómica hace que las compañías se debatan entre restringir las erogaciones y ser laboralmente competitivas y es difícil pensar en un cambio en ese sentido para 2024. "Las empresas hoy ya son conservadoras. Tenemos que pensar, más que eso, en que los cambios que hay que dar a la economía tienen que servir para que las empresas pasen de una actitud defensiva a una mucho más propositiva. Eso se logra con transformaciones que den previsibilidad para hacer negocios", apunta Sica y destaca que hoy las compañas planean sus obligaciones mes a mes.
La versión original de esta nota se publicó en el número 357 de revista Apertura.
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