Adiós a la remesas y divisas: Estados Unidos impondrá una fuerte medida que afectará a los más pobres en México
La presidenta Claudia Sheinbaum alza la voz ante la iniciativa de congresistas estadounidenses que busca imponer un impuesto a las remesas: "Es discriminatorio y viola un tratado entre ambos países".
Una propuesta fiscal que avanza en el Congreso de Estados Unidos ha encendido las alarmas en el Gobierno de México. Se trata de un nuevo impuesto a las remesas, el cual impactaría directamente a los millones de mexicanos que viven en el país vecino y que cada mes envían dinero a sus familias. "El impuesto a las remesas que plantean los congresistas de Estados Unidos afecta a quien menos tiene, es discriminatorio y viola el convenio entre ambos países para evitar la doble imposición", denunció la presidenta Claudia Sheinbaum a través de su cuenta de X.
La preocupación no es menor. El reciente informe del Gobierno de México mostró que solo en 2024, México recibió 64 mil 700 millones de dólares en remesas, el equivalente al 3.5% del Producto Interno Bruto (PIB). Estos envíos constituyen el sustento de millones de familias y representan más del 20% del ingreso familiar en muchas regiones del país. "Nuestros paisanos también contribuyen a la economía mexicana", recordó la presidenta Claudia Sheinbaum el 16 de mayo en conferencia de prensa.
El impuesto propuesto viola un tratado internacional firmado en 1994
De acuerdo con el comunicado oficial del Gobierno de México, la medida violaría el Convenio para evitar la doble imposición e impedir la evasión fiscal en materia de Impuestos sobre la Renta (ISR), firmado entre México y Estados Unidos en 1992 y vigente desde 1994.
El Artículo 25 de ese acuerdo establece que "los nacionales de un Estado Contratante no serán sometidos en el otro Estado Contratante a ningún impuesto que sea más gravoso que aquellos a los que están sometidos los nacionales del otro Estado".
En palabras de Sheinbaum, "no estamos de acuerdo con este impuesto. Primero, es discriminatorio y segundo, viola un tratado firmado entre México y Estados Unidos", expresó tajante en La Mañanera del 16 de mayo.
La medida de EE.UU. afectaría a los que menos tienen
Sheinbaum explicó que esta iniciativa no tiene un carácter persecutorio hacia los migrantes, sino que responde a una necesidad del gobierno estadounidense de recaudar más recursos para cerrar el año fiscal.
"No creemos que tenga un afán de persecución... es más bien un asunto de recaudación. ¿Qué decimos nosotros? Pues que recauden en otro lado", dijo.
La mandataria también advirtió que los más afectados serían los sectores de menor ingreso tanto en Estados Unidos como en México: "Es mejor gravar a los que más tienen y no a los que ya pagan impuestos y que ayudan a sus familias".
El impuesto a las remesas que plantean los congresistas de Estados Unidos afecta a quien menos tiene, es discriminatorio y viola el convenio entre ambos países para evitar la doble imposición e impedir la evasión fiscal, que claramente en su artículo 25 dice:
— Claudia Sheinbaum Pardo (@Claudiashein) May 16, 2025
"Los nacionales de... pic.twitter.com/mMri5mNRjO
México lanza ofensiva diplomática para frenar la medida
El Gobierno de México ya activó una estrategia diplomática. El embajador Esteban Moctezuma Barragán se reunirá en los próximos días con organizaciones de mexicanos en Estados Unidos y con la comisión del Senado que viajará a Washington para dialogar con congresistas.
Además, Sheinbaum convocó a los connacionales a hacer oír su voz: "Envíen su posicionamiento frente a esto. México, el Gobierno de México, las Cámaras, no estamos de acuerdo con esta medida discriminatoria".
La presidenta también advirtió que su gobierno tomará más acciones para visibilizar el desacuerdo y presionar políticamente. "Podríamos encabezar otras acciones para visibilizar a México y difundir nuestro desacuerdo con esta iniciativa", remarcó.
Las remesas: columna vertebral de la economía de millones de familias mexicanas
Según datos del Gobierno, el 99.1% de las remesas llegan por transferencias electrónicas reguladas entre ambos países. Cada operación representa en promedio entre 393 y 400 dólares, lo que permite sostener a familias enteras, especialmente en comunidades rurales o marginadas.
Imponer un impuesto a estas transferencias sería, en palabras de Sheinbaum, "una medida que afecta directamente a quienes menos tienen y que han sostenido la economía en tiempos de crisis".
En un contexto donde la economía popular aún se recupera del impacto de la pandemia, y en donde millones de familias mexicanas dependen de estos envíos mensuales, la decisión que se tome en Washington podría cambiar drásticamente el panorama social y económico del país.