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El gasto público ya es menor al de la 'era Macri', pero el ajuste continúa: dónde se recorta más

Las erogaciones son 2% menores al promedio de la gestión Cambiemos, aunque crecieron las partidas para subsidiar energía. En este rubro, el recorte se profundizó en abril. Lo que viene, en año electoral y con la tutela del FMI.

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El Gobierno profundizó el recorte del gasto público en abril y redujo el déficit fiscal, a pesar de la fuerte merma que la sequía ocasiona en los ingresos. El nivel de ajuste es tal que el gasto primario se encuentra 2 puntos porcentuales por debajo del promedio del gobierno de Mauricio Macri, según un estudio de la consultora Analytica.

Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), el déficit primario devengado cayó más de 9 puntos porcentuales, en términos reales, en el primer cuatrimestre. El grueso del ajuste cae sobre subsidios energéticos (-29,5% anual), asignaciones familiares (-29,9%) y gastos de capital (-26%). Así y todo, la meta fiscal del primer trimestre del acuerdo con el FMI quedó lejos, porque los ingresos corrientes acumulan una caída del 9,9%.  

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Tanto Analytica como la OPC reportan datos de presupuesto devengado (ya comprometido), a diferencia del Tesoro, que informa la marcha de las cuentas públicas "base caja" (pago efectuado). Pero la tendencia es sostenida. Sin embargo, el déficit del primer trimestre, de $ 689.927 millones, superó con holgura el tope de $ 441.500 millones nominales del acuerdo con el Fondo.

Lo que queda por ajustar

"El gasto se está estacionando un 2% por debajo del promedio 2016- 2019", indicó Analytica. Ese promedio combina la primera mitad del mandato de Mauricio Macri, signada por el "gradualismo" en el recorte del gasto, y la segunda, caracterizada por el fuerte ajuste comprometido con el FMI al firmar el acuerdo de stand by, a mediados de 2018. 

"Si bien los subsidios crecieron 33,6% en comparación con la gestión Cambiemos, el gasto sin subsidios retrocede 5,5% y también lo hace el gasto social (-1,1%), aunque no alcanza a igualar la aceleración de la inflación de los últimos meses", indicó la consultora.

El gasto primario es 2% inferior al promedio de la era Macri, según Analytica.

Subsidios energéticos

El gasto en subsidios energéticos es, en la actualidad, 31,8% superior al registrado en 2020, durante la pandemia. Pero allí se concentró el grueso del recorte de los últimos meses, con la segmentación y el aumento de tarifas. En abril, según la OPC, los subsidios energéticos cayeron casi 36% interanual, en términos reales. En lo que va de 2023, se devengaron casi$ 604.000 millones, con una caída del 29,5% medida en pesos constantes.

"Hay un cambio de dinámica en agosto de 2022, con el ingreso de Sergio Massa en la conducción de Economía. El gasto primario disminuyó 12,1% si se compara contra el período mayo de 2021 - abril de 2022", indicó Analytica. "El recorte se advierte, sobre todo, en subsidios (-20,2%), y no tanto en gasto social (-3,7%), ya que el Gobierno busca compensar el efecto de la aceleración de los precios sobre los sectores más carenciados", continuó.

Gasto social

Según OPC, el gasto en AUH cae 12% real en cuatro meses, pero las asignaciones familiares que perciben trabajadores en relación de dependencia cayeron 40,8%. Otros programas de asistencia se mantienen en carrera contra la inflación. El Potenciar Trabajo, por ejemplo, aumenta 2,7% real. Las becas Progresar, 14,3%. Las partidas destinadas a Política Alimentaria caen 7,3%. Las partidas destinadas a pagar salarios públicos se sostienen en terreno positivo y suben 9,2% real en el cuatrimestre.

Sequía de obras

La ejecución de Gastos de Capital estuvo muy influenciada por el gasoducto Néstor Kirchner. Sin embargo, los algo más de $ 480.000 millones devengados entre enero y abril suponen una caída de 26% en comparación con el mismo periodo de 2022, reportó la OPC. El fuerte del recorte se concentra en las Transferencias de Capital a las provincias (-28,4%). La inversión real directa cae 6,2%.

El grueso del ajuste recae en subsidios a la energía, asignaciones familiares y gastos de capital, según la OPC.

Para Analytica, la menor ejecución de obra pública se concentra en proyectos de vivienda social y el Procrear, que iniciaron el año con un recorte de presupuesto del 24% anual, en términos reales. A su vez, las transferencias de capital a empresas públicas se direccionaron a Ieasa (con un crecimiento del 893% anual) para el gasoducto. En contraposición, las partidas dirigidas a Aysa cayeron 35% real.

En un año electoral, el esfuerzo fiscal se concentra en los subsidios energéticos y las obras que "bajan" a las provincias, con transferencias para construir viviendas. "Sea vía cuota presupuestaria o como porcentaje de ejecución, los niveles de gasto devengado revelan que el Gobierno está frenando partidas en niveles superiores a los observados en el base caja del primer trimestre de 2023. 

El ajuste viene de arriba hacia abajo", indicó Analytica. "Aún está por verse la parte más dura de la contracción fiscal" pronosticó. "La reformulación del acuerdo con el FMI le exigirá al Gobierno aceptar, como mínimo, mayores recortes sobre el gasto primario, focalizados en especial en los subsidios", concluyó.

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