China avanza en Argentina: Swaps, litio, un enviado de Massa y la central nuclear
El embajador argentino en China confirmó que habrá una misión liderada por Marco Lavagna que viajará a Beijing para avanzar en los acuerdos bilaterales. El aumento de reservas del Central con Swaps, los proyectos mineros y la central nuclear.
El embajador argentino en Beijing, Sabino Vaca Narvaja, calificó la relación de la Argentina y China desde "una perspectiva pragmática". Esto implicó varios ejes que marcarán en el futuro inmediato los vínculos diplomáticos bajo algunos anuncios concretos como: el incremento de reservas del Banco Central con Swaps, nuevas inversiones en litio, financiamiento para obras de infraestructura y la puesta en marcha del memorándum de La Franja y La Ruta de la Seda.
"Argentina necesita fortalecer reservas y China es un socio estratégico en ese sentido. Eso hace que debamos fortalecer el diálogo para la ejecución de los proyectos y su financiamiento", dijo Vaca Narvaja desde Beijing.
En relación a la existencia de una "rivalidad estratégica" entre Estados Unidos y China el embajador argentino destacó que "es esa misma situación la que brinda márgenes de maniobra para mantener un diálogo inteligente con ambos países".
Durante una extensa entrevista con El Cronista el embajador Vaca Narvaja adelantó que el Gobierno argentino está coordinando la realización de una misión técnica que liderará Marco Lavagna antes de fin de año con el fin de avanzar con cada uno de los proyectos contemplados en el Plan Integral de Cooperación en el marco del memorándum de La Franja y La Ruta, firmado en la visita que hizo Alberto Fernández a Xi Jinping en febrero pasado.
- ¿Cuáles son los proyectos centrales para avanzar cuanto antes en el financiamiento de China?
-Hemos cumplido medio siglo de relaciones diplomáticas con China, lo cual nos permite afirmar que la relación está plenamente consolidada. Sin embargo, hay muchas áreas en las que aún podemos seguir creciendo. Un paso en ese sentido ha sido la firma entre ambos países del Memorándum de Entendimiento en Materia de Cooperación en el Marco de la Iniciativa de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI el pasado mes de febrero, durante la visita del presidente Alberto Fernández a China.
La adhesión de la Argentina a la iniciativa, así como la firma de otros instrumentos conexos, garantiza un financiamiento para inversiones y obras de infraestructura enumeradas en dichos instrumentos.
En cuanto a cuáles son los principales proyectos para avanzar con las inversiones chinas, estos están definidos en el mecanismo de Dialogo Estratégico para la Coordinación y Cooperación Económica (DECCE). Las obras ahí especificadas son de gran importancia para el desarrollo del país y han sido pensadas con un fuerte sentido federal.
Por su envergadura, sobresale la cuarta central nuclear Atucha III. Pero también tenemos otros proyectos como la construcción y ampliación de gasoductos para acrecentar la producción de Vaca Muerta, la ampliación del parque solar Caucharí y el parque eólico/solar Cerro Arauco, la rehabilitación de ferrocarriles Belgrano Cargas y San Martín, la compra de nuevo material rodante para la línea Roca, la reactivación de las represas patagónicas, obras para renovar y ampliar la infraestructura de transporte eléctrico en el AMBA, como asimismo acueductos, corredores viales y plantas potabilizadoras, entre otras iniciativas.
- ¿Cree que en el contexto internacional actual China puede convertirse en un aliado central de Argentina más allá de Estados Unidos?
-Argentina necesita fortalecer reservas y China es un socio estratégico en ese sentido. Eso hace que debamos fortalecer el diálogo para la ejecución de los proyectos y su financiamiento. Somos conscientes de la existencia de una rivalidad estratégica entre ambas potencias, pero entendemos que es esa misma situación la que brinda márgenes de maniobra para mantener un diálogo inteligente con ambos países.
Necesitamos conducir nuestra política exterior de modo autónomo y en función de nuestros intereses nacionales. Pero esta autonomía no puede derivar de una política de aislamiento o mera oposición. El vínculo con las dos grandes potencias debe cultivarse desde una perspectiva pragmática. Incluso cuando observamos el vínculo bilateral entre China y los Estados Unidos, vemos que este no es blanco o negro, en ocasiones puede ser de colaboración y a veces, por supuesto, de tensión. El punto, insisto, radica en anteponer nuestros intereses.
- ¿Cómo evalúa la situación de Argentina respecto de la posibilidad de construir una central nuclear con tecnología y financiamiento de China?
-Tal como dijo en su reciente visita al país el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica, Rafael Grossi, la "energía nuclear está en agenda porque es un complemento de las demás renovables" y por eso, en consonancia con todos los estudios serios, "en Argentina apuntamos a que un 15% de nuestra matriz energética sea ofrecida por la energía nuclear".
En ese marco, y en un proyecto que tiene su apoyo, participamos en febrero de este año de una ceremonia virtual donde las máximas autoridades de Nucleoeléctrica Argentina y la Corporación Nuclear Nacional de China firmaron un contrato para la construcción de la cuarta central nuclear en el Complejo Nuclear Atucha de la localidad de Lima, provincia de Buenos Aires.
La central va a ser es uno de los proyectos más grandes que va a ejecutar China en Latinoamérica, al igual que las represas patagónicas que se construyen en Santa Cruz. Para nuestro país, el paso dado es muy importante ya que implica la recuperación de la política de desarrollo del sector nuclear por parte del Estado Nacional. Luego de 41 años de espera estaríamos construyendo una nueva central nuclear en Argentina.
La última, Atucha II, comenzó a construirse en 1982 y fue paralizada en 1994, para ser reactivada en 2006 por voluntad del ex presidente Néstor Kirchner. Con la nueva central queremos recuperar ese espíritu y dar curso a una obra fundamental para el desarrollo argentino. En estos momentos estamos trabajando para cerrar el contrato financiero, lo cual esperamos se concrete en breve.
- ¿Hay posibilidad de ampliar los Swaps de china y aumentar el canal de financiación al banco central?
-El tema está bastante avanzado. Bregamos para que la ampliación del swap se dé antes de fin de año. La ampliación de dicho mecanismo junto a las gestiones realizadas sobre los Derechos Especiales de Giro (DEG) permitirá sumar nuevas reservas al Banco Central.
En el caso del swap, además, permite financiar el comercio de ambos países. Recordemos que el año pasado acordamos pagar las últimas 20 millones de dosis de vacunas, que compramos a China en plena pandemia, con yuanes. Desde que el FMI incluyó dicha moneda a la canasta de Derechos Especiales de Giro, años atrás, la internacionalización del yuan no se ha detenido.
Para una economía escasa de dólares como la nuestra, poder comerciar con China con nuestro segundo mayor socio comercial en su propia moneda es fundamental. En este sentido será muy relevante la próxima cumbre de Jefes de Estados del G20 que se realizará el 15 y 16 de Noviembre en Bali, Indonesia. Este puede ser un ámbito propicio, para que en el marco de un encuentro bilateral se profundicen estos temas.
- ¿Por qué cree que en Argentina hay tantos cuestionamientos al gobierno de la oposición por la relación estrecha de China y Argentina?
-Lamentablemente, la oposición adelantó la campaña para 2023 y va a rechazar cualquier política que intente impulsar el gobierno del presidente Alberto Fernández y el canciller Santiago Cafiero, incluso cuando pueda ver algún beneficio material en aquellas. Para entender lo que estoy diciendo, veamos que pasó en los cuatro años que gobernó la alianza Cambiemos.
Si bien hubo momentos de tensión con China y en lo discursivo decidieron sobreactuar su alineamiento con los Estados Unidos, en la práctica esto fue más matizado. Recordemos al entonces presidente cuando dijo que Argentina necesitaba "reinsertarse" al mundo y que iba a fortalecer las "tradicionales relaciones con Europa y los Estados Unidos".
El plan de "inserción inteligente al mundo" y de "política exterior desideologizada" y alineamiento con las potencias occidentales terminó en una búsqueda de cierto equilibrio entre los dos polos, China y los Estados Unidos. Un ministro de esa gestión afirmaba que, si bien los Estados Unidos eran nuestros aliados estratégicos en la región, había que reconocer el lugar de China en el concierto internacional y asimismo el hecho de que es nuestro principal socio comercial.
Lo mismo podemos decir sobre el acercamiento que algunos dirigentes de ese partido tuvieron con China: por citar un ejemplo, en el año 2019, un municipio como Lanús, gobernado desde 2015 por Cambiemos, firmó un convenio de hermanamiento con la ciudad china de Changzhou.
El propio ex presidente Macri participó del primer foro de La Franja y La Ruta que, luego el ex canciller Faurie fue parte del Segundo Foro y fueron sumamente elogiosos con la iniciativa, esto está reflejado en las crónicas de esos tiempos. Asimismo, el PRO como partido participó institucionalmente de varias de las cumbres partidarias convocadas por el Partido Comunista de China.
Es muy importante consolidar políticas de Estado en el vínculo con China ya que es nuestro segundo socio comercial y probablemente en algunos años sea nuestro primer socio comercial, como ocurrió con nuestros países vecinos. Para esto, tenemos que conseguir los consensos entre las distintas fuerzas para mejorar nuestra representación en China.
Hoy China duplica el mercado de consumo de EEUU, sin embargo participamos oficialmente en más de 30 ferias comerciales en los EEUU y solo en 8 de la República Popular China. Nuestra embajada en China cuenta con la mitad de empleados locales y diplomáticos que las embajadas de Brasil y de Estados Unidos. Tenemos una representación similar a la de Francia, España y Alemania. Estamos tratando de revertir esta situación para poner a la altura del volumen comercial y de inversiones la representación con China.
Este año estamos abriendo un nuevo consulado en Chengdu, capital de Sichuan, en una zona económicamente dinámica de China como es la región del Oeste. En este sentido a nivel consular contamos actualmente en china solo con 4 consulados, cuando las actuaciones que se realizan aquí superan ampliamente a las realizadas en países con una mayor cantidad de oficinas como en el caso de Brasil (10 consulados) o EEUU (7 consulados).
- ¿Cree que Argentina debió objetar en la ONU la situación de violación a los derechos humanos en China?
-El voto argentino absteniéndose de votar a favor o en contra de este tema durante la sesión del Comité de Derechos Humanos se relaciona, como hablábamos antes, con ese margen de autonomía que deben guardar los países en el ámbito internacional. Desde nuestra perspectiva, es necesario seguir fortaleciendo la cooperación internacional para promover y proteger los Derechos Humanos.
En este sentido, se pretendió tratar un informe que no tuvo el consentimiento de China, rompiendo con el fundamento de cooperación entre los miembros de Consejo, politizando el mecanismo. La señal que se quiso dar, junto con los demás países que se abstuvieron, estuvo relacionado con esto. El Consejo no puede resultar un ámbito de disputa entre las grandes potencias.
En las declaraciones oficiales de la entonces Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michel Bachelet, aclaraba que la visita realizada el 25 de Abril no consistió en una investigación. Estas declaraciones figuran en la página oficial de dicho organismo. Argentina se abstuvo al Igual que muchos países de nuestra región que participan en el Consejo como Brasil y México, además se abstuvieron países como India, Armenia y Ucrania, entre otros.
- ¿Hay posibilidad de que China logre aumentar las inversiones en litio y otros sectores claves de la economía argentina?
-La minería y en particular la extracción e industrialización del litio serán clave en nuestra relación con China. En conjunto con otras áreas de nuestro gobierno estamos trabajando para aumentar exportaciones de mayor valor agregado, sumando inversiones de empresas chinas en sectores estratégicos. El litio es uno de ellos. Argentina posee, junto con Bolivia y Chile, las mayores reservas de litio del mundo.
La ventaja comparativa de nuestro país es que cuenta con un destacado desarrollo de su sector industrial, tanto en el sector automotriz como en el metalúrgico en general, y un desarrollo no menor de su Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología. La instalación de fábricas de baterías o incluso la fabricación de vehículos eléctricos es un gran paso para lograr el objetivo fijado. Como ejemplo de esto podemos citar la reciente inversión de la empresa china Gotion en Jujuy para desarrollar una planta de baterías de Litio o el convenio firmado por la empresa Tianqi Lithium e YPF Litio para desarrollar dicho vector de forma conjunta.
Por otra parte Argentina cuenta con grandes reservas de Cobre que es otro mineral estratégico junto al Litio para las llamadas energías renovables con impacto directo en el sector de electromovilidad, ya que los autos eléctricos utilizan casi tres veces más cobre que los vehículos a combustión. Contando con estos recursos estratégicos y una industria automotriz con capacidad de reconversión podríamos liderar, si cooperamos con china este segmento en la región.
Para poner algunos ejemplos del peso comercial que tienen los minerales en las relaciones bilaterales podemos citar a Brasil, Peru y Chile que presentan balanzas comerciales positivas con China, lo cual se explica centralmente por la exportación de minerales como Hierro, Cobre y Plata. El año pasado el sector minero de Chile exportó aproximadamente 57 mil millones de dólares (siendo China uno de sus principales importadores), en el caso de nuestro país el año pasado exportamos algo más de 3 mil millones.
Esto nos muestra con claridad el potencial con el que aun cuenta dicho sector como generador de divisas para equilibrar una balanza comercial, que hoy con China es deficitaria.
También hay otras áreas en las que ambos países colaboran de manera sostenida y sobre las que vamos a buscar una mayor inversión de capitales chinos. Me refiero a sectores claves como la biotecnología, la nanotecnología, los servicios informáticos digitales, el área del software y, en términos generales, a las distintas actividades vinculadas a las economías del conocimiento.
Tenemos un capital científico-técnico de excelente nivel y empresas del sector, tanto públicas como privadas, de gran prestigio. El INVAP, por caso, firmó un acuerdo con Jiangxi Nuclear Power para desarrollar dos reactores de radioisótopos medicinales en suelo chino. Mantener esta orientación es esencial para reducir la brecha comercial con China y también para pensar el desarrollo económico sustentable de nuestro país.
- ¿Está contemplada una misión del ministerio de Economía a China para acelerar los proyectos acordados?
-Estamos trabajando de forma intensa con todos los Ministerios y áreas del gobierno involucradas en los distintos proyectos de infraestructura a financiar por china. En ese sentido los equipos del nuevo ministro de Economía, Sergio Massa, que asumió además las funciones de Producción y Agroindustria, están avanzando desde el primer día para cumplimentar todos los requisitos técnicos para avanzar en los respectivos contratos financieros de cada uno de los proyectos considerados prioritarios.
Estos equipos, encabezados por Marco Lavagna, han tenido numerosas reuniones de trabajo. Se está coordinando la realización de una misión técnica antes de fin de año con el fin de avanzar con cada uno de dichos proyectos. Asimismo la Cancillería China ha elevado el Plan Integral de Cooperación en el marco del memorándum de La Franja y La Ruta, firmado en el mes de Febrero en la visita presidencial. Dicho acuerdo involucra a varios mecanismos y ministerios de Argentina que están tomando intervención para poder consolidar la contrapropuesta en el transcurso de este año.
En este sentido, la reelección del presidente Xi Jinping como Secretario General del Partido en el reciente Vigésimo Congreso Nacional resulta una buena noticia para Argentina y para Latinoamérica, ya que es el presidente chino que más conoce nuestra región y que más visitó Latinoamérica.
Durante su gestión se consolidó la cooperación y creció el volumen comercial con la mayoría de los países de nuestra región, afianzándose como uno de los países más relevantes. La consolidación del mecanismo CELAC-China es otro buen ejemplo de este avance regional, que posee una economía muy complementaria con nuestros países. Por otra parte, el presidente Xi Jinping ha sido uno de los principales promotores para sumar a más países emergentes al espacio BRICS. El presidente Alberto Fernández fue invitado por Xi a la última cumbre donde se formalizó la solicitud de Argentina de formar parte de este importante grupo de países.
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