ANÁLISIS

La oposición debe clarificar su programa económico

Juntos por el Cambio y el resto de la oposición deberían clarificar sus plataformas programáticas, incluyendo claro está, su programa económico. Para las elecciones recientes, por ejemplo, ha habido un compromiso público de los principales referentes políticos, de no aumentar tasas impositivas. E incluso ya ha habido iniciativas para baja de impuestos. La más notoria, la propuesta de reducción de IVA del 21% al 18% firmada por varios referentes opositores.

Pero, observo al menos hasta ahora, poca claridad a la hora de responder preguntas como las siguientes:

1) Si no hay aumento de impuestos (o incluso hubiera baja de los mismos), implica que hay preferencia por mantener un altísimo "impuesto inflacionario"?

2) Si tampoco esa es la preferencia (respuesta en principio obvia), hay algún programa de reducción inmediata del gasto público de 3,5% del PIB para cerrar la brecha fiscal?

Tal vez existan propuestas concretas al respecto, con efecto inmediato, tanto en el seno de Juntos por el Cambio o en el de los partidos llamados "libertarios". Pero si existen, tales propuestas no han sido bien difundidas.

¿Si se quisiera bajar el gasto público para cerrar el déficit fiscal, será el llamado "gasto político" el que nos daría una buena solución? Muy difícil. Supongamos que se redujera a la mitad el gasto de funcionamiento del Congreso y del Poder Ejecutivo (muy fuerte reducción del número de asesores, reducción de Ministerios, etc.). Podemos estimar el gasto total de estas partidas en $ 500.000 millones (el gasto total en personal es de $ 900.000 millones de los cuales $ 400.000 millones corresponden a fuerzas de seguridad) en 2021, aproximadamente un 1,1% del PIB. La reducción a la mitad de ese gasto, podría implicar un ahorro entonces del 0,5% del PIB. Sería muy bueno y muy ejemplificador encarar acciones en esta dirección. Pero aún si algo así, bien drástico se lograra, el ahorro concreto luce limitado.

Podría haber una reforma en el sistema jubilatorio para eliminar/reducir las llamadas jubilaciones de privilegio. Es un tema legal complejo. Podría ser invalidada judicialmente, por cercenar derechos adquiridos. Hasta que un proyecto concreto no superara las instancias legales, no convendría computar ahorros por esta vía. Pero, claro está, sería bueno avanzar en este tema también.

Hay muchísimos ahorros que podrían hacerse en todas las reparticiones públicas "administrando bien", pero puede llevar bastante tiempo en concretarse.

A corto plazo (un año), las fuentes más promisorias para baja de gastos serían:

1) Suba de tarifas para reducir los subsidios.

2) Cambio fórmula de movilidad jubilatoria.

3) Transferencias a las Provincias.

4) Privatizaciones o racionalización de empresas públicas.

Suba de tarifas. Para eliminar los 3,1% del PIB en subsidios energéticos al transporte y otros con que finaliza el 2021, estimamos que las tarifas promedios de luz, agua y gas deberían aumentar un 300% si la inflación en 2022 fuese del 50%. Y si se pretendiera que los subsidios sean del 1% del PIB (ahorro de 2, 2% del PIB), las subas promedio deberían ser del orden del 250%, con inflación del 50%. Es una gran macana que el gobierno de los Fernández haya revertido tan fuertemente lo que se había avanzado en el gobierno de Macri en este tema. Pero la cuestión, es que hay que ver ahora, cual es la propuesta concreta de la oposición en referencia a las tarifas.

Cambio fórmula jubilatoria. Desde el punto de vista fiscal, lo mejor sería una fórmula que sólo indexe por IPC, de modo que, si el país crece, el diferencial entre PIB nominal e IPC (p.ej. 3% anual), quede en las arcas del Tesoro. Pero no conozco iniciativas concretas de la oposición en este tema. Y, además, sería un tema de alto impacto en el tiempo, pero posiblemente de bajo impacto inmediato.

Transferencias a provincias. El Tesoro podría empezar a desactivar las transferencias discrecionales de 0,8% del PIB que viene otorgando a provincias, aún a costa de que éstas aprovechen las nuevas normativas, y aumenten impuestos locales.

Transferencias a empresas. Sea racionalizando personal y gastos, o directamente privatizando, podría bajarse el déficit de Aerolíneas Argentinas y otras empresas estatales (en total, insumen recursos por 0,9% del PIB).

Sean estos u otros los rubros a atacar, es necesario que la oposición vaya clarificando lo que propone a la sociedad. Y como piensa eliminar el déficit fiscal en forma inmediata, si es que pretende crear las condiciones para que Argentina prescinda del impuesto inflacionario (condición necesaria, no suficiente, para que la inflación local sea similar a la internacional).

Tanto para la acción legislativa en 2022 y 2023, como especialmente, si accede al gobierno en 2023, la oposición debe tener propuestas concretas bien claras, de modo de tener mandato, y empoderarse legítimamente para actuar si llega a esa instancia.

Dado lo difícil del tema, ya que cada gasto y cada impuesto legislado tiene nombre y apellido, y genera resistencias lógicas cuando hay que pagar más o hay que recibir menos, se requiere mucha capacidad política para encarar estos temas.

Y si no hubiera consensos o capacidades suficientes para logros importantes e inmediatos, sería bueno que la oposición sea honesta en su discurso (ya que el Gobierno no lo es y no es de prever que algún día lo sea), y diga cosas tales como: "compatriotas, todavía no hemos logrado suficientes consensos para cerrar la brecha fiscal, y como deberemos convivir con un financiamiento monetarios del orden del 3% del PIB (por ejemplo), deberemos también convivir con una inflación no menor al 40% anual".

Propuestas concretas y honestidad intelectual, serían dos cosas que se apreciaría mucho y que la oposición pudiera ofrecer a la sociedad con claridad.

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Comentarios

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  • EC

    Emilio Cerato

    06/01/22

    Rubinstein, no hace falta que clarifique nada, solo tiene que decir que van a hacer lo mismo que en 2015 a 2019.

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  • PDDBDDB

    pablo diaz de brito diaz de brito

    06/01/22

    Muy lúcido, Rubinstein. Sobre todo teniendo en cuenta la falacia de 2015, el gradualismo, que creía que el déficit se iba a licuar con crecimiento (de paso, hoy Guzmán repitió este argumento tan frágil). Pero falta calcular cuánto gasto político hay en provincias y municipios que es mucho. Piense en los miles de Concejos municipales en todo el país, son miles. Y las 24 Legislaturas provinciales, etc.

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  • OADL

    Oscar Adolfo De Leo

    06/01/22

    Excelente árticulo. Para la reflexión ¿Una reducción del IVA genera un aumento de la renta disponible de los consumidores o un aumento de la ganancia de los que concentran la oferta y evitan la competencia?

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    • EC

      Emilio Cerato

      06/01/22

      Los precios son lo que la gente está dispuesta a pagar por algo, la baja del IVA solo incrementa ganancias, como pasó siempre.

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