Otra multinacional se va de la Argentina: Hasbro cierra sus oficinas en el país

Otra empresa se va de la Argentina. Hasbro, la fabricante de juguetes estadounidense, creadora de éxitos como Monopoly, Jenga y Twister y tiene licencias de las franquicias de más ventas, como Star Wars, Disney, Marvel,  My Little Pony, Transformers y Peppa Pig, se suma a la lista de las multinacionales que abandonan el mercado nacional.

A pesar de que, según fuentes del sector, Hasbro, que había llegado al país en los '90, tenía la intención de armar sus valijas y abandonar sus operaciones en la Argentina desde hace más de un año, la compañía ya decidió la disolución anticipada de la sociedad (Hasbro Argentina SA), según salió publicado este viernes en el Boletín Oficial.

Curiosamente, la información se produce en días en los que se estrenó en los cines locales Trolls 3, nueva entrega de la saga de películas animadas y franquicia que, a su vez, es una de las principales apuestas globales de la empresa para este año. 

De acuerdo con fuentes de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), Hasbro, que también fabrica las marcas Play-Doh y Nerf, decidió retirarse del país por "competencia desleal". 

Según explicaron en el sector, desde hace años, la industria del juguete atraviesa momentos difíciles, a causa del ingreso al país de mercadería de contrabando. Esto provoca que los precios de los juguetes de imitación sean más baratos que los originales. De hecho, el Monopoly original se consigue en las jugueterías con un valor de $ 39.000, mientras que, las versiones más económicas rondan los $ 17.000. En muñecos de franquicias como Star Wars, Disney y Marvel, las diferencias también son, de por lo menos, el 100 por ciento. 

De esta manera, según fuentes de la industria, las principales motivaciones de la firma para abandonar la Argentina fueron "el fraude del mercado, la restricción en el poder de compra de los argentinos y un mercado local, en volumen, muy poco significativo para la empresa".

El negocio de Hasbro era netamente importador. Sin embargo, a diferencia de otras empresas que abandonaron el país por el cepo, no fue esa la razón que más incidió en su decisión. De hecho, el mercado del juguete argentino es importado en un 60% y, durante 2023, el ingreso de productos fabricados en el exterior creció más del 50%, de acuerdo con datos de la CAIJ, que representa a 180 fabricantes y 3500 comercios.

Pero, pese a eso, durante el último año, Hasbro había dejado de importar productos a la Argentina. Los juguetes de sus diversas marcas aún llegan al país por medio de otros importadores locales.

La multinacional estadounidense desembarcó por primera vez en la Argentina con oficinas locales en 1996. Sin embargo, sólo permaneció por un periodo de cinco años. A partir de ese momento y hasta 2014, fue la empresa de capitales locales, Fibro SRL -dueña de la juguetería Cebra-, quien importó y comercializó sus productos. Posteriormente, en 2016, Hasbro volvió a instalarse en el país.

Éxodo de empresas en la Argentina

La salida de Hasbro se suma a las recientes partidas de multinacionales, como el gigante de e-commerce de moda brasileño Dafiti, que el mes pasado dio de baja su plataforma digital en el país. La compañía forma parte de Global Fashion Group (GFG), holding de moda con operaciones en 17 países, y buscaba llenar el vacío que dejó Falabella.

En la industria financiera, otra compañía brasileña abandonó también la Argentina. Itaú le cedió su operación por u$s 50 millones a Banco Macro, en una operación acordada en agosto. Así, Macro se convierte en la entidad privada con la mayor red de puntos de atención distribuidos en todo el territorio nacional. Con 565 sucursales y 9400 colaboradores, brindará diariamente servicio a 6 millones de clientes.

Previo a ello, el grupo español Inditex, controlante de la cadena de indumentaria Zara y el vertical de artículos para el hogar Zara Home, le dejó sus activos al holding panameño Regency Group, gestionado por el grupo Harari, que también se hará cargo de la marca en Uruguay y que el año pasado tomó el manejo de Nike, que dejó de estar presente de forma directa en la Argentina, a partir de este acuerdo de cesión.