Fuente: Archivo
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La de ayer no terminó siendo una elección de tercios. Pero, de alguna manera, los tercios de las PASO se verán plasmados en el Congreso. En los últimos cuatro años, el Poder Legislativo se vio atravesado por "la grieta", con Juntos por el Cambio y Unión por la Patria como protagonistas. A partir de diciembre, se viene un Parlamento dividido en tres, con La Libertad Avanza con un lugar menor, pero decisivo. Tras el resultado de ayer, en el que UP dio el batacazo, se convertirá en la primera minoría en ambas cámaras.
Gane Sergio Massa o Javier Milei, quien desembarque en Casa Rosada el 10 de diciembre deberá negociar con el resto de los bloques para sacar cualquier tipo de ley.
Desde la dolarización que impulsa el anarcocapitalista, hasta la "moneda digital" a la que aludió el tigrense durante la campaña o incluso para la sanción del próximo Presupuesto, este tipo de leyes podrán ver la luz siempre y cuando el próximo oficialismo logre consensuar con alguno de los "dos tercios" restantes. De lo contrario, los proyectos naufragarán.
El fin del Congreso agrietado
Así las cosas, diciembre será el fin de un Congreso que fue el fiel reflejo de la Argentina "agrietada". Sobre todo tras el triunfo de Juntos por el Cambio en las elecciones del 2021, tanto en Diputados como en el Senado, reinó el empate entre ambas coaliciones. Juntos por el Cambio y el Frente de Todos (ahora denominado Unión por la Patria) cuentan con casi el mismo número de bancas en ambas cámaras.
En Diputados, UP tiene 118 bancas y Juntos por el Cambio 117. En el Senado, el interbloque opositor cuenta con 33 bancas, mientras que el oficialismo, 31.
El resto de las expresiones representadas en el Congreso, tanto en Diputados como en Senado se reparte en bloques y monobloques que, en algunos casos votan con el oficialismo, dependiendo de las leyes que se debatan. Mientras que otros espacios, directamente, se convirtieron en aliados incondicionales del Frente de Todos.
La nueva conformación dejará a Unión por la Patria y a Juntos por el Cambio aún más lejos del quórum reglamentario de 129 lo que le impidió al Frente de Todos avanzar con leyes polémicas como la reforma judicial o la ampliación de la Corte Suprema de Justicia.
¿Cómo será el nuevo Congreso?
Cuando se ponga en marcha la nueva conformación del Congreso, en Diputados, el oficialismo retendrá la primera minoría, con 109 bancas mientras que Juntos por el Cambio tendrá 93 bancas.
La Libertad Avanza reunirá un total de 39 bancas, cuando hoy tiene apenas tres. El resto de las bancas se las repartirán el Interbloque Federal (8), Izquierda, que sumó un diputado y ahora serán cinco, Juntos Somos Río Negro (1), SER (1) y MPN (1).
En el Senado, en cambio, Unión por la Patria se ubicará como la primera minoría -al igual que durante los dos primeros años del Frente de Todos-, con 32 bancas, mientras que Juntos por el Cambio tendrá 24. La Libertad Avanza pasará de cero a ocho bancas mientras que el Frente de la Concordia Misionera, aliado histórico del oficialismo tendrá dos bancas (una más que en la actualidad).
El espacio que conduce el gobernador electo de Santa Cruz, Claudio Vidal debutará con dos bancas, mientras que los peronistas díscolos que conviven en Unidad Federal pasarán de cinco a tres lugares. Por último, Juntos Somos Río Negro mantendrá su banca actual.
Si bien Unión por la Patria tendrá un escenario aun más adverso que el actual, en caso de ser gobierno, sancionar una ley será una tarea menos lejana que en un eventual triunfo de Milei.
En ambas Cámaras, si bien La Libertad Avanza crecerá considerablemente, lo cierto es que quedará muy por debajo del quórum y de reunir los votos para la sanción de cualquier ley.
La gran duda es qué hará JxC. ¿Resistirá como interbloque opositor para defender los intereses de sus gobernadores e intendentes? ¿o terminará desmembrado? De esta decisión dependerá el futuro de las leyes que intente sancionar el próximo Gobierno.
