El azúcar, ese ingrediente tan presente en nuestras vidas, esconde un lado oscuro que muchos desconocen: su poder adictivo. Por eso, es fundamental, saber qué comer cuando nos agarra el antojo de algo dulce.
Este compuesto, conocido como saracosa, tiene mecanismos de ser una sustancia adictiva, lejos de las alternativas saludables.
Por qué es adictivo el azúcar
El misterio de por qué nos cuesta tanto dejar el azúcarparece tener una respuesta en nuestras neuronas. Según un artículo de WeLife, un equipo de la Universidad de California reveló que esta sustancia actúa como un hacker en nuestro cerebro, activando un sistema de recompensa que nos empuja a querer cada vez más.
"Es como un círculo vicioso. El azúcar dispara la dopamina y la serotonina, los neurotransmisores del bienestar. Te sentís eufórico, pero es un espejismo. Cuando baja el efecto, tu cerebro entra en modo 'emergencia' y te manda a buscar más", explica Sandra Moñino, nutricionista y autora de Adiós a la inflamación.
Para las mujeres, este antojo se vuelve más intenso justo antes de la menstruación. "Los estrógenos caen en picada y arrastran a las 'hormonas de la felicidad'. Tu cuerpo, desesperado por energía, te grita que comas algo calórico", detalla Moñino.
Pero hay esperanza: si educás a tu paladar con opciones más saludables, tus antojos también se vuelven más sanos. "Por ejemplo, el chocolate negro sin azúcar. Es rico en triptófano, que también activa esos neurotransmisores positivos", aseguró.
Qué comer cuando tenés antojos de algo dulce
La experta en nutrición reveló algunas opciones naturales, dulces y nutritivas:
- Frutas: la mandarina, manzana y banana, son dulces que contienen fibra, saciándote y frenando la ansiedad.
- Dátiles o pasas: contienen antioxidantes y te llenan de energía natural.
- Licuados: estas bebidas son dulces, cremosas y no contienen azúcar agregado.
- Yogur natural con miel: este alimento tiene antioxidantes y con muy poco contenido alcanza para endulzar.
- Cacao puro: es ideal para agregarlo en la leche o en licuados. Si bien es amargo, tiene grandes beneficios.
