Quiroga, el pueblo encantador de 2000 habitantes que queda en la provincia de Buenos Aires

Se acerca la Semana Santa y este pueblo, con infraestructura similar a una pequeña ciudad, que lleva el nombre del abuelo de su fundador, es una gran opción para escaparse.

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Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, la búsqueda de opciones para escapar al bullicio de la gran ciudad durante unos días se multiplican. Y entre ellas no puede obviarse a Alfredo Demarchi, también conocida como Estación Facundo Quiroga, una comuna del centro de la provincia de Buenos Aires, perteneciente al partido de Nueve de Julio.

A Quiroga, que tiene alrededor de 2000 habitantes, se accede por camino pavimentado desde las ciudades de Carlos Casares y Lincoln a través de la Ruta Provincial 50 hasta el acceso por la Ruta Provincial 70.

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El pueblo tiene su mayor ocupación durante los meses de diciembre y enero, ya que vuelven los estudiantes universitarios que van a cursar a las ciudades durante el año. El resto del año es un sitio muy tranquilo.

ESTACIÓN FACUNDO QUIROGA: CÓMO LLEGAR

Queda a 75 km de la ciudad cabecera del Partido y tiene a 3 ciudades cabeceras de partidos (Casares, Lincoln y Los Toldos) más cerca que la ciudad de su propio partido. A diferencia de otros pueblos, la gran mayoría de las calles en Quiroga son asfaltadas.

Lo que hoy es el pueblo, correspondió a una extensa llanura de la Estancia "El Socorro", propiedad del Ingeniero Alfredo Demarchi, quien no sospecharía quizás que al rápido transcurrir del tiempo sus campos serían el suelo de Quiroga.

La empresa ferroviaria construyó la estación en los terrenos de la Estancia "El Socorro", con el fin de favorecer la demanda de los numerosos colonos y chacras vecinas. Velozmente se edificó a ambos lados de la estación.

El Ing. Demarchi observando el progreso de la colonia quiroguense y considerando que progresaría aún más, habiendo lotes para edificación y dándole el carácter de pueblo, donó al Gobierno de la Nación una importante fracción de tierra. El gobierno la dividió en lotes y los vendió a precios muy accesibles. Llegaron más pobladores y colonos y fué así que Quiroga fue progresando paulatinamente y gracias al gesto altruista del Ing. Demarchi, sus campos son el regazo del pueblo.

La localidad tiene dos denominaciones: Quiroga se denomina a la estación y al casco urbano, Demarchi. Una curiosidad es que el tren dejó de pasar hace 20 años aproximadamente, por lo que ahora la estación funciona como biblioteca y museo.

De acuerdo a la visión de los viajeros, Quiroga es acogedor con efusiva complacencia a los que llegan al pueblo, ávido de nobleza y rectitud. También, llegaron a la localidad familias hebreas para incorporarse a su vida comercial y social.

QUIROGA: HISTORIA DEL PUEBLO

Alfredo Demarchi compró las tierras de esa zona a Carlos Salas en 1867, instalando allí la estancia "El Socorro", donde se dedicó a la cría de ganado vacuno de la raza Shorthorn.

Años después, el Ferrocarril Oeste de Buenos Aires proyectó la extensión de la línea ferroviaria del oeste, desde Bragado, en la provincia de Buenos Aires, hasta General Pico, en el entonces Territorio Nacional de La Pampa.

Para llevar a cabo tal proyecto solicitó a los dueños de los campos la donación de los terrenos en el trayecto donde pasarían las vías, poniendo los nombres de los donantes a las estaciones ferroviarias respectivas. El ingeniero Demarchi solicitó que la estación que se creara en sus terrenos no llevara su nombre, sino el de su abuelo, el caudillo federal Juan Facundo Quiroga.

Esta iniciativa fue aceptada por la empresa, pero el gobierno de la Provincia de Buenos Aires la rechazó, nombrando al pueblo con el nombre del donante. Quiroga tiene un museo, centro de jubilados, teatro independiente, biblioteca, jardín de infantes, escuelas primarias y secundaria.

En Quiroga se encontraban los talleres del Ferrocarril Oeste, ya que está ubicado a mitad de distancia entre Buenos Aires y General Pico. En 1923 estalló una huelga de los obreros de estos talleres, debido a la paga insuficiente y las condiciones de trabajo a que eran sometidos. Se trató de un movimiento anarquista, en el que todos los talleres fueron incendiados. En respuesta, la empresa ferroviaria desmanteló lo que quedaba de los talleres y los redistribuyeron entre las estaciones Mechita y Timote.

Las calles de la localidad llevan los nombres de sucesos y lugares históricos relacionados con la vida del caudillo riojano.

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