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Viajar a Europa siempre ha sido caro para los argentinos, sobre todo ahora, por la gran diferencia que hay en el tipo de cambio. Sin embargo, el Viejo Contienente es muy grande y hay lugares que resultan más baratos que otros.

En Europa hay lugares hermosos para conocer que no resultan tan dolorosos para el bolsillo, como puede ser el caso de grandes capitales como Londres, Paris o Roma, que manejan precios bastante elevados en cuanto a hotelería, transporte y gastronomía.

El Viejo Continente está dividido en tres grandes zonas: la occidental, la central y la oriental. Cada una tiene sus particularidades y presupuestos a tener en cuenta a la hora de viajar.

Estos son los dos destinos de Europa más baratos para viajar

Según el grupo de viajes Thomas Cook del Reino Unido, hay algunos destinos dentro de Europa del este que resultan baratos para viajar. A continuación, dos de ellos...

  • Budapest, Hungría

La publicación destaca a Budapest, capital de Hungría, como uno de los destinos más baratos de Europa ya que el tipo de cambio no es tan desfavorable como en otros países de la zona euro.

Lo bueno de este destino para quienes buscan ahorrar es que la mayoría de los sitios que se pueden visitar, como el Parlamento, el Puente de las Cadenas o las casas medievales en el sector de Buda, son gratuitos.

El Danubio, fuente de inspiración para numerosos artistas, separa con su inmensidad Buda y Pest, dos grandes ciudades que hoy se unen para formar una de las capitales europeas de mayor importancia.

  • Praga, República Checa

Con sus puentes que cruzan el río Moldava y sus techos color terracota, Praga es una de las ciudades más bellas -y económicas- de Europa.

El segundo lugar que resalta la publicación es Praga, la capital de la República Checa: undestino ideal para conocer una hermosa ciudad sin gastar grandes sumas de dinero.

En Praga las comidas son más baratas que en las principales ciudades europeas, con menús que rondan entre 6 y 10 euros, un precio muy por debajo de lo que le puede costar en Berlín, París, Madrid o Roma.

Tanto por su arquitectura tradicional como por este patrimonio histórico y cultural, la capital de la República Checa es una de las ciudades más visitadas de todo el mundo.