ECONOMÍA DEL CONOCIMIENTO

Inversión: la investigación clínica movilizó casi $ 20 mil millones y creció 16% en 2020

Los datos surgen de una encuesta realizada a más de 2000 empresas que hacen I+D, entre los que sobresalen laboratorios nucleados en la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAEME) y la Cámara Argentina de Organizaciones de Investigación Clínica (CAOIC).

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La inversión en investigación clínica creció un 62% en 2020, lo que a valores constantes, esto es, descontando el efecto de la inflación, representa un incremento del 16% respecto del año anterior. 

En total, la inversión alcanzó los $19.266 millones de pesos corrientes, que representan el 35,6% del total de inversión en investigación y desarrollo (I+D) del sector empresario, 3,8 puntos porcentuales más que el año anterior. 

Esto se dio incluso en un año atravesado por la irrupción del Covid-19, un período en el que no se interrumpieron las inversiones en este campo. 

El monto invertido pasó de 11.877 millones de pesos corrientes en 2019 a 19.266 millones en 2020, lo que representa un aumento 16% en valores constantes. Pero además implica un 35,6% del esfuerzo total en I+D del sector empresario en el país. 

Tomando un período más amplio, entre 2016 y 2020, la inversión en investigación clínica se incrementó 74,9%, mientras que la I+D del resto del sector empresario creció sólo 3,6% en el mismo lapso de tiempo.   

Cuál es el mapa de la inversión en I+D en el país

Los datos surgen de la Encuesta sobre Investigación & Desarrollo del Sector Empresario Argentino (ESID), presentados por la Dirección Nacional de Información Científica del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MINCyT).

En el estudio participaron unas dos mil empresas, incluyendo todas las compañías identificadas que realizan I+D, pero un dato relevante es que en lo que respecta puntualmente a la investigación clínica, sobre un total de 53 empresas identificadas que desarrollaron estudios clínicos en 2020, 27 de ellas concentraron el 92% de la inversión. 

Justamente son las asociadas a la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAEME) y a la Cámara Argentina de Organizaciones de Investigación Clínica (CAOIC).

Cuál fue el impacto del efecto pandemia

"Ni la pandemia ni el confinamiento lograron mermar los esfuerzos locales por estudiar la seguridad y eficacia de potenciales nuevos y mejores medicamentos, vacunas y dispositivos médicos", aseguró Susana Baldini, directora médica de CAEME, que reúne a los laboratorios farmacéuticos de innovación.

Agregó que "afortunadamente, por el esfuerzo mancomunado de mucha gente y la convicción de nuestra autoridad regulatoria, la ANMAT, la investigación clínica viene en un persistente crecimiento en nuestro país". 

Por su parte, la titular de CAOIC, Karina De Lazzari, dijo estar convencida de "lo bueno que es para nuestro país que crezca esta actividad. El principal beneficiado de que se estudien aquí más potenciales terapias es el paciente, quien podrá antes a medicamentos que, tal vez, puedan ayudarle a controlar mejor su enfermedad, al tiempo que recibe cuidados médicos de calidad y un seguimiento personalizado, con controles sistemáticos de su estado general de salud".

Por qué la investigación clínica genera dólares

La encuesta mostró también otra dimensión del impacto de la investigación clínica, a partir del hecho de que es una exportación de servicios, y por tanto genera ingreso genuino de divisas. 

Teniendo en cuenta que el 90,6% de la inversión en I+D en este campo para hacer los estudios clínicos se origina en las casas matrices de los laboratorios farmacéuticos, se observa éstos generan 10 veces más inversión que en otros sectores, en los que la inversión externa representa sólo un 8,2%.

"La realización de estudios clínicos constituye una exportación concreta y sostenida de servicios, lo que la convierte en una de las áreas productivas más pujantes de la economía del conocimiento en Argentina", apuntó Susana Baldini,  directora médica de CAEME

"La realización de estudios clínicos, por lo tanto, constituye una exportación concreta y sostenida de servicios, lo que la convierte en una de las áreas productivas más pujantes de la economía del conocimiento en Argentina", apuntó . Baldini.

Otro aspecto de la investigación clínica en Argentina -no medido en este relevamiento- consiste en que su desarrollo capacita en metodologías de investigación de vanguardia a profesionales de salud y a otros involucrados que participan de los protocolos. 

Esto es así porque para que el estudio internacional tenga validez debe regirse por idénticos estándares y procesos en todos y cada uno de los países y centros de investigación en donde se lleva adelante.

De cuánto es la inversión global en I+D

Se estima que a nivel global, la industria farmacéutica invierte cada año más de u$s 189.000 millones en investigación y desarrollo de nuevos medicamentos, vacunas y dispositivos médicos. 

Cerca del 80% de los ensayos clínicos de todo el mundo se concentran en Estados Unidos, Europa y Japón, pero para completar el porcentaje restante, Argentina compite con países de la región y otras latitudes para ser elegida como destino de la inversión.  

Ahí entran a tallar los criterios del laboratorio patrocinador ante cada estudio clínico internacional para elegir en qué países y centros de investigación realizarlos. 

Evalúan aspectos como la infraestructura científica, las capacidades para desarrollar estudios clínicos, el marco regulatorio, funcionamiento de comités de ética, el respeto a la propiedad intelectual y el sistema de acceso al mercado, entre otros.

En cuanto a la distribución geográfica de la inversión en investigación clínica en el país, la encuesta arrojó que aún hay una marcada concentración en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (67,7%), seguida por la provincia de Buenos Aires (10,9%), Córdoba (6,6%), Santa Fe (6,3%), Tucumán (2,9%) y Mendoza (1,8%) y el resto se divide entre las demás provincias.

"Este punto nos pone frente a la oportunidad de promover una mayor federalización de esta actividad, fundamentalmente porque nos consta que contamos con profesionales y con centros de salud absolutamente preparados para hacerlo a lo largo y a lo ancho de nuestro país", admitió De Lazzari.

Y agregó: "Hemos venido trabajando en forma colaborativa entre distintos involucrados para equilibrar este aspecto y esperamos que en las próximas ediciones de este relevamiento se visualice una distribución mucho más pareja", remarcó.

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