Coronavirus: expertos del mundo debaten sobre si conviene reabrir las escuelas y no se ponen de acuerdo

Siguen de cerca la estrategia de ese país,  mientras otros países debaten medidas similares.

Una semana de que los niños y los docentes de la escuela primaria danesa volvieron a sus aulas, los funcionarios de salud y los expertos en educación de todo el mundo siguen debatiendo las ventajas de reabrir los colegios. Mientras tanto, los países europeos y Estados Unidos analizan la manera de suavizar las cuarentenas relacionadas con el Covid-19 para reactivar sus economías sin revivir la epidemia.

En el centro del debate está el equilibrio entre el riesgo de que los chicos sigan propagando el virus, la paralización de la economía que implica mantenerlos en casa y las repercusiones en su educación y bienestar. Cualquier decisión sobre las escuelas también debería tener en cuenta el nivel de contagios del país y su capacidad para detectar y responder, afirman los investigadores.

 "Hay un argumento sólido a favor de la reapertura de las escuelas primarias para permitir a los padres reiniciar la economía, dada la evidencia temprana de bajo contagio en y desde los niños pequeños , dijo Kalipso Chalkidou, director de política de salud global del think-tank Center for Global Development. "Pero primero es necesario garantizar que se hagan suficientes pruebas".

Los países escandinavos son algunos de los más relajados en cuanto al temor a que los colegios sean lugares de transmisión del virus. Noruega reabrió los jardines de infantes esta semana. Islandia y Suecia nunca cerraron sus escuelas primarias –con el argumento de que los beneficios superaban los riesgos. Johan Carlson, director de la agencia de salud pública de Suecia, considera que la evidencia que recomienda el cierre de los centros educativos es  "muy vaga".

Dorte Lange, vicepresidenta de la Asociación Danesa de Profesores, señaló: "Estos primeros días han sido muy bien organizados por los directores y profesores, y los padres están conformes".

Una explicación a favor de la reapertura de las escuelas es que los niños pequeños tienen menos probabilidades de desarrollar síntomas graves de Covid-19. El muestreo realizado en Islandia este mes mostró que los menores de 10 años tienen muchas menos probabilidades de contagiarse que los chicos de más edad. Otro estudio sobre el caso de un pequeño que contrajo el virus en un viaje de esquí señala que ninguna persona que estuvo en contacto con él desarrolló síntomas, incluidos sus hermanos.

Russell Viner, profesor del Great Ormond Street Institute of Child Health, que hace poco revisó el reducido número de estudios sobre la clausura de los colegios durante el brote del virus, afirmó: "La conclusión general es que los cierres de escuelas no son lo más importante para controlar el Covid-19".

Sin embargo, un análisis de modelado realizado por Nicholas Davies, de la the London School of Hygiene and Tropical, llegó a la conclusión de que el cierre de los colegios es una de las diversas intervenciones que tienen un efecto "moderado" en lo que ser refiere a limitar la transmisión del virus.

Combinado con el distanciamiento social, el blindaje de los grupos vulnerables y de edad avanzada y el autoaislamiento de los que presentan síntomas, la clausura de los centros de estudio "aplanaron la curva" de manera significativa para ayudar a reducir la propagación del Covid-19, agregó.

"Todo lo que suponga riesgos de que se reestablezcan los puentes de transmisión entre familias que actualmente están aisladas unas de otras debe abordarse con cautela", aseguró Davies. Refiriéndose al Reino Unido, dijo: "Diría que todavía es demasiado pronto para reabrir las escuelas de forma segura".

Sin embargo, es probable que el riesgo de que los niños regresen a casa después de clases y expongan a sus parientes mayores sea más alto en aquellos países y culturas donde cohabitan familias de diferentes generaciones.

En Dinamarca, por ejemplo, es menos común que los adultos mayores vivan con sus hijos y nietos que en los países del sur de Europa.

Mientras tanto, el impacto devastador de las cuarentenas es cada vez más evidente. Permitir que los padres vuelvan a trabajar es clave para reactivar las economías que se han detenido. Al anunciar la probable reapertura de las escuelas el mes próximo, el presidente francés Emmanuel Macron destacó principalmente los efectos perjudiciales que tiene el aislamiento en el aprendizaje de los niños de familias pobres.

 "La evidencia sugiere que es probable que aumenten las desigualdades en la educación... y una caída general en el rendimiento de los alumnos", señaló Lindsey Macmillan, economista del University College London.

Estas preocupaciones son mayores en los países de bajos ingresos, donde las ausencias aumentan la desnutrición, el abuso y la deserción escolar.

Sin embargo, los sindicatos de docentes de Francia y Alemania -que comenzarán a dictar clases en las próximas semanas- siguen preocupados por la seguridad de sus propios afiliados y por los aspectos prácticos vinculados a la implementación de las medidas de higiene con los niños pequeños.

"No está claro si se aplicará el distanciamiento social o cómo se podría aplicar en los colegios, en particular para los grupos de menor edad“, comentó Mary Bousted, Secretaria General Adjunta del Sindicato Nacional de Educación del Reino Unido, que todavía no ha anunciado planes para la reapertura de las escuelas.

Viner subrayó que es un error centrarse en enfoques "binarios", que incluso en los países donde las escuelas están cerradas para la mayoría de los niños, siguieron abiertas para los jóvenes vulnerables y para aquellos cuyos padres eran considerados trabajadores esenciales.

Cuando los niños eventualmente regresen a las aulas, se revisarán los horarios escolares. Los métodos para limitar el contagio podrían incluir un espacio mucho mayor entre los pupitres, la asistencia alternada de los alumnos en diferentes días u horas del día y permitir sólo un grupo a la vez en el patio de recreo.

Viner aseguró que observarán atentamente las lecciones que dejen Dinamarca y otros países para poder modificar las prácticas en consecuencia. "Estamos en un territorio totalmente desconocido , concluyó.

Traducción: Mariana Oriolo

Temas relacionados
Más noticias de COVID-19

Las más leídas de Financial Times

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés