El Gobierno echó a Rodolfo Barra: los cortocircuitos que lo sacaron de la Procuración
El Procurador del Tesoro había despertado críticas dentro del Gobierno por su posición en un dictamen reciente
En medio de versiones que apuntan un futuro incierto para el jefe de los abogados del Gobierno Nacional, el Gobierno definió echar al procurador del Tesoro, Rodolfo Barra. La salida fue confirmada a El Cronista desde el corazón de la Casa Rosada.
Se esperaba que, el próximo lunes, Barra se reuniera con el asesor presidencial Santiago Caputo, pero todo se precipitó.
Los cuestionamientos que pesaban sobre un hombre que fue clave en el proceso de desregulación del Estado durante los primeros 12 meses de la administración libertaria son de variado calibre: desde un dictamen que habría ido en contra de la voluntad de la Casa Rosada hasta un cuestionamiento al lugar de residencia de Barra, que estaría fuera del país.
Según explicaron, el funcionario habría favorecido a una empleada del Ministerio de Justicia que realizó una presentación judicial para pedir la impugnación de la decisión de esa cartera de recortar un incentivo complementario a los salarios.
"La Procuración General del Tesoro es un organismo autónomo que debe hacerse cargo de sus decisiones", señalaron fuentes del Ministerio de Justicia a este diario sin ocultar el diferendo que hay con Barra.
"El Ministerio de Justicia reafirma su compromiso de reducir el Estado y el gasto público para liquidar la inflación. Estamos sentando las bases jurídicas para la reconstrucción argentina, ordenando décadas de desidia, descontrol y parches jurídicos. No vamos a avalar remuneraciones excesivas ni pago de incentivos a empleados públicos en un contexto de esfuerzo económico que está realizando toda la Nación", añadieron en referencia al dictamen de Barra en favor de un agente del Estado que percibía una parte de su salario a través de un convenio con la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), un ente que el Gobierno dio de baja para despedir a 2500 estatales.
"Lo cierto es que hay ruido, que no dictamine a favor del Gobierno es raro", argumentaron por los pasillos de Balcarce 50.
Barra es un abogado especialista en Derecho Administrativo que supo ser ministro de la Corte Suprema menemista y uno de los artífices de la reforma del Estado durante la década de 1990.
Su designación había generado polémica ya que había sido repudiado por declaraciones de su juventud que lo presentaban como "filo nazi". Sin embargo, fue nombrado ofialmente y tuvo mucha exposición durante los primeros meses del Gobierno de Javier Milei, en especial cuando defendió el mega decreto 70/2023 que modificaba y derogaba cientos de leyes en un sólo trámite.
Mientras en algunos lugares esperan que renuncie por iniciativa propia en las próximas horas o cuando llegue el presidente Milei al País, ya circuló el nombre de un posible reemplazante: sería el abogado Ricardo Rojas, autor de "La inflación como delito". El también doctor en historia se desempeñó como secretario letrado de la Corte Suprema (1986 y 1993) y fue juez en lo Criminal de Buenos Aires.
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