La puja por aumentar el gasto público tiene un nuevo capítulo en la Argentina con los proyectos de ley aprobados en el Congreso y los vetos del presidente Javier Milei. "Si la Convertibilidad que fue una suerte de cinturón de castidad no pudo contra la suba del gasto público de los políticos, difícilmente se lo pueda contener en los años por venir". La frase es de un expresidente del BCRA quien, tras lacrisis del 2001, me anticipó los años por venir en la Argentina. No se equivocó: el populismo volvió a estar en auge llevando al país a una alta inflación, récord de gasto público, alta presión impositiva y estancamiento de la economía.

Lo que se desconoce son leyes básicas de la economía, desde la restricción presupuestaria hasta la escasez. El desafío es cómo hacer para modificar este vicio que parece eternizarse. Hubo intentos ya fallidos de crear leyes de Responsabilidad Fiscal, que luego fueron desconocidas o eliminadas. Acuerdos de reducción de impuestos con provincias que duraron dos años. Cuando se necesitaban fondos, especialmente en épocas de elecciones, esas promesas de bajar impuestos volaron por el aire.

Banco Central de la Republica Argentina. (Fuente: archivo)
Banco Central de la Republica Argentina. (Fuente: archivo)

Y en otro orden el desafío es cómo pasar a los otros niveles del Estado, provincias y municipios, la prudencia fiscal. Provincias y municipios no tienen a mano un banco central para emitir pesos, pero aumentan o crean impuestos en forma ilimitada sin importar en el daño que ocasionan a la actividad económica. O el incentivo que brindan a ennegrecer la economía. No es casualidad que se estime hoy en 40% el tamaño de la economía informal.

Javier Milei encabeza la lucha contra el vicio argentino de gastar por encima de lo que se recauda. ¿Podrá? ¿Y cómo puede crearse un mecanismo que elimine definitivamente ese vicio? Algunos han ensayado la posibilidad de que en una reforma constitucional se introduzca un artículo que prohíba al BCRA emitir dinero. De nuevo, ¿resistirá una reforma constitucional el embate eventual de un gobierno pro gasto? La Convertibilidad era el golpe mortal a la inflación y la que murió fue la Convertibilidad.

De corto plazo, el gobierno tiene todo para ganar en esta pulseada contra la oposición pro gasto. Si no es en el Congreso será por la judicialización de las leyes en cuestión. Lo importante en definitiva es la reacción de la sociedad a los aumentos del gasto público.

Las elecciones, especialmente en PBA el 7 de septiembre, permitirán discernir la importancia que se le da al equilibrio fiscal y a la reducción de la inflación. Es lo que quieren ver inversores extranjeros que descreen que la Argentina se haya encarrilado para siempre. Quieren ver que realmente haya un cinturón de castidad para las cuentas públicas que no sea violado.