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Un estudio científico reveló el impacto de la ley de Etiquetado Frontal: ¿la gente dejó de comprar los productos poco saludables?

Conocé el impacto del etiquetado frontal en las decisiones de compra y cómo podría estar influyendo en la salud de los argentinos.

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 Un estudio científico reciente analizó el impacto de la ley de Etiquetado Frontal en los hábitos de compra de alimentos y bebidas en la vida de los argentinos.

 La investigación realizada por  las nutricionistas Dahiana Malzoni y Claudia Mariela Secchi se centró en evaluar si la inclusión de advertencias en los envases de productos alimenticios logró reducir la adquisición de opciones poco saludables. 

¿La gente dejó de comprar productos poco saludables debido a la Ley de Etiquetado Frontal? 

Desde la implementación de la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable N.º 27.642, que establece el uso del etiquetado frontal en alimentos y bebidas en Argentina, se comenzaron a notar cambios en los hábitos de compra de la población.

Este estudio, realizado en agosto de 2023 y publicado en la revista San, examinó cómo los consumidores perciben y reaccionan ante los sellos de advertencia en productos ultraprocesados, con el objetivo de evaluar si la normativa está logrando reducir el consumo de opciones menos saludables.

 Un estudio científico reciente investigó el impacto de esta ley en los hábitos de compra de los consumidores argentinos. (FIC Argentina) 

Para llevar adelante la investigación, se encuestó a 1.150 personas mayores de 18 años a través de un cuestionario en línea que incluía preguntas sobre datos sociodemográficos, la comprensión y percepción del etiquetado, los patrones de compra y la influencia de los hijos en las decisiones de compra.

 Los resultados muestran que la mayoría de los encuestados, principalmente mujeres entre 25 y 34 años con estudios universitarios, conoce el etiquetado frontal: el 98.5% reconocía esta herramienta y el 94.1% entendía los sellos de advertencia, considerándolos importantes en un 85.7%.

Respecto a los patrones de compra, el 86.1% de los participantes continúa adquiriendo productos con etiquetado frontal, pero un 44.3% afirmó haber dejado de comprar ciertos productos al ver los sellos de advertencia.

Además, entre los hogares con hijos menores de 16 años, el 74.4% de los padres comentó que sus hijos piden alimentos con estos sellos, destacándose productos como galletitas, yogures y dulces. 

Estos datos reflejan que, aunque el etiquetado frontal influyó en las decisiones de compra, factores como las preferencias familiares también desempeñan un papel importante en las elecciones alimenticias.

 El estudio mostró que el etiquetado frontal tiene algún efecto en los patrones de compra de los consumidores, pero la mayoría de las familias deciden por otros factores. (Foto: Shutterstock)

 Desafíos de la Ley de Etiquetado Frontal en Argentina 

 Aunque la Ley de Etiquetado Frontal avanzó en informar a los consumidores, enfrenta algunos desafíos que complican su efectividad para reducir el consumo de productos ultraprocesados: 

  • Resistencia de la industria: algunas empresas ajustan levemente sus productos para evitar los sellos, sin mejorar realmente su valor nutricional. 

  • Falta de información clara: aunque los sellos son reconocidos, muchos consumidores no entienden del todo los riesgos asociados.

  •  Influencia familiar: los niños suelen pedir productos con sellos, en especial los más publicitados. 

  • Opciones saludables limitadas: en ciertas regiones del país, es difícil encontrar alternativas accesibles y nutritivas.

 Estos desafíos resaltan la necesidad de sumar campañas educativas y políticas que apoyen cambios reales en los hábitos de consumo.

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