Premio Nobel de impacto: dos empresas argentinas entre las 100 que pueden salvar 1000 millones de vidas
Es un listado que hace la aceleradora noruega Norrsken con las compañías con potencial para salvar al mundo. En la lista son las dos únicas start ups de Argentina y de América latina. Qué hacen para haber logrando este gran reconocimiento
Fueron fundadas por argentinos y ahora son parte del Impact 2022, el listado de una fundación sueca que es considerado el Premio Nóbel del impacto y, que en su versión 2022 incluyó a dos empresas locales.
Mamotest, la start up de healthtech liderada por el correntino Guillermo Pepe y Nilus, la desarrolladora de tecnología para reducir los costos de vida de las personas de bajos recursos, creada por Ady Beitler en laboratorio de Innovación de Harvard son parte del Impact 100, el listado que reconoce las empresas que tendrán un impacto positivo en 1000 millones de personas.
El propósito de Impact100 es destacar el poder del emprendedurismo como motor de cambio, y celebrar aquellos individuos y organizaciones que tienen el valor de trabajar día a día por un mundo mejor.
Niklas Adalberth, fundador de la Norrsken señala: "Las empresas emergentes generalmente se celebran por su crecimiento y valoración financiera, independientemente del impacto que tengan en las personas y el planeta. Creemos que los emprendedores que impulsan un cambio positivo son verdaderos héroes y merecen ser reconocidos. Del mismo modo, los unicornios suelen ser empresas con una valoración de más de 1000 millones de dólares, pero queremos reconocer los unicornios de impacto potencial, aquellos que tendrán un impacto positivo en 1000 millones de personas".
Como parte de ese reconocimiento, en un acuerdo de la Fundación con Nasdaq, las empresas elegidas fueron anunciadas en el tradicional panel de Time Saquare en New York.
"Los emprendedores que impulsan un cambio positivo son verdaderos héroes y merecen ser reconocidos"
QUÉ HACEN LAS EMPRESAS ARGENTINAS ELEGIDAS
Mamotest es una healthtech, primera en Latinoamérica que se dedica exclusivamente a reducir la mortalidad del cáncer de mama. Para ello, trabaja desde la concientización y el acceso universal a diagnóstico por imágenes de alta calidad hasta el seguimiento de las pacientes para asegurar que lleguen a un tratamiento personalizado en etapa temprana.
Según número que da la propia empresa, el cáncer de mama es el cáncer #1 en el mundo, y se lleva casi 2000 vidas por día. El 80% de estas muertes ocurren porque las mujeres son diagnosticadas en etapa tardía, reduciendo la supervivencia de 98% a 27%.
Conociendo que el sistema de salud en Latinoamérica está fragmentado y con una gran ausencia de información para la toma de decisiones, la empresa comprendió rápidamente que, una vez diagnosticadas, las mujeres se perdían en un camino confuso de cómo proceder en las siguientes etapas de su tratamiento, a qué especialistas acudir, cuáles decisiones tomar.
Es por eso que desarrolló una plataforma digital en donde psico-oncólogas, mujeres especializadas en tratamiento de cáncer, dan seguimiento a cada caso, donde se toma nota de cada historia clínica, situación socio-económica, resultados y tratamientos reportados por las pacientes para potenciar las herramientas de salud.
"Ser parte del listado de Impact100 nos llena de orgullo, y valida nuestra búsqueda incansable de cambiar el sistema de salud y acabar con el cáncer de mama como lo conocemos", señala Pepe.
Por su lado, Nilus es una plataforma que conecta con empresas que tienen alimentos próximos a vencer para que los vendas a precios sociales a comedores sociales en villas.
Fundada en la Argentina por el uruguayo Ady Beitler y ya tiene operaciones en el México y Puerto Rico.
Mediante la app, los responsables de los comedores y organizaciones comunitarias pueden ver la oferta de alimentos en sus celulares. Y cuando hacen el pedido, se dispara una convocatoria a los transportistas y aquellos que tienen disponibilidad aceptan el viaje.
En el sistema pueden inscribirse transportistas independientes o agrupados en empresas y cooperativas. Los choferes deben contar con registro profesional y vehículos adaptados para transportar alimentos frescos o que requieran cadena de frío.
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