Bridgestone reconoce "atrasos" en liquidación de exportaciones y descomprime tensión con el Gobierno
La fabricante de neumáticos Bridgestone admitió atrasos en liquidación de divisas por sus exportaciones de cubiertas. Informó que la situación ya está normalizada. La Aduana había detectado operaciones por u$s 4 millones, lo que podría valerle una multa de u$s 20 millones a la empresa
La fabricante de neumáticos Bridgestone asumió haber cometido "atrasos" en las liquidaciones de exportaciones por u$s 4 millones, por los que la Dirección General de Aduanas (DGA) había anticipado una posible multa de u$s 20 millones para la empresa. De esta forma, con el reconocimiento del error, la compañía descomprimió la tensión que se abrió en la última semana con el organismo.
"Desde Bridgestone Argentina, queremos clarificar la situación con relación a divisas no liquidadas por exportaciones de neumáticos. Las mismas se debieron a retrasos por temas administrativos y dichos pagos fueron regularizados en agosto de 2023", explicó la empresa, en un nuevo comunicado difundido este viernes.
"En Bridgestone Argentina, siempre actuamos de buena fe y guardamos un fuerte compromiso con el crecimiento y desarrollo del país. Con más de 100 años operando en la Argentina, somos el mayor exportador de neumáticos y continuaremos trabajando en pos del desarrollo de la industria nacional, impulsando el crecimiento de nuestro país", agregó la empresa en su statement.
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La semana pasada, la Aduana había denunciado a Bridgestone por presunta falta de liquidación de divisas por un total de u$s 4 millones. Eso podría caberle una multa de u$s 20 millones. El organismo había puesto sobre la lupa 65 exportaciones de cubiertas de la japonesa con destino a Brasil, Uruguay, los Estados Unidos, Colombia, China y Corea del Sur.
Inicialmente, la empresa contestó que siempre estuvo "en estricto cumplimiento con las liquidaciones de divisas de conformidas con las regulaciones aplicables" y explicó que los "retrasos que podrían haber existido" por "demoras en los pagos de clientes" fueron "oportunamente cumplidos y acreditados ante el Banco Central de la República Argentina en agosto 2023". "Incluso, entendiendo la relevancia de las exportaciones, hemos cancelado pagos futuros", agregó.
Bridgestone, hasta el momento, no recibió notificación formal de la denuncia. Pero, durante esta semana, mantuvo reuniones con funcionario de la Aduana, en las que la empresa admitió haberse atrasado en esas liquidaciones. Con ese reconocimiento, descomprimió la tensión, pese a que, formalmente, hizo su descargo administrativo y el proceso continuará por los canales legales, donde se llegará a una resolución.
Bridgestone Argentina es filial de la mayor fabricante de cubiertas del mundo. En 2013, puso en marcha en el país un plan de inversiones por u$s 220 millones. Se ejecutó hasta 2020 y fue el más importante que su planta local, la ex Firestone de Llavallol, recibió en los últimos 40 años. Su objetivo era elevar de 12.000 a 18.500 unidades diarias la capacidad de producción, además de una modernización técnica para hacer neumáticos de mayor sofisticación y valor agregado. Esto último le permitiría incrementar su volumen de exportaciones.
De cara a 2022, la empresa había tomado 350 personas -un aumento del 30% de su dotación, que hoy suma las 1600- y, así, sumar un nuevo turno y elevar su producción un 40%. Pero, por el conflicto gremial que se detonó en mayo de ese año, y se extendió durante cinco meses, a un costo de paralización -parcial primero y total al final- de la fabricación de neumáticos en el país, Bridgestone, con 350 personas más, llegó a tener niveles de productividad cercanos a los de 2019.
La empresa comenzó 2023 con un volumen de 10.000 neumáticos mensuales, con el objetivo de incrementarlos gradualmente a lo largo del año. En el medio, volvió a sufir nuevos paros de actividad: otra vez, por enfrentamientos con el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna), que abrió varios frentes de conflicto con la empresa: desde reclamos por el cálculo de bonos hasta denuncias por las condiciones de trabajo, con pedidos del gremio al Gobierno para que le prohíba a la empresa seguir importando. La tensión por esas disputas fue creciente, a punto tal que hubo una demanda penal sobre Alejandro Crespo, secretario general del Sutna, por agresiones físicas y amenazas a ejecutivos de la empresa. La Justicia de Lomas de Zamora, donde se radicó la denuncia, lo sobreseyó.
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