Boom de subastas: cuáles son las más 'exitosas' y a qué sectores apuestan los rematadores

Las casas de remates buscan consolidar el furor que viven las subastas online desde el inicio de la pandemia. Luego de dos años favorables para la actividad, las principales compañías del sector planean afianzar el crecimiento del negocio con nuevas inversiones. 

Adrián Mercado arrancó 2022 con un desembolso de $ 100 millones, de los cuales $ 30 millones estuvieron dirigidos a la apertura de dos nuevas sedes: una en Ramos Mejía y otra en Tigre, en la provincia de Buenos Aires. "Son dos corredores que demuestran un gran crecimiento. La sucursal de la zona oeste se orientará a atender el segmento industrial en un 80% y al comercial en un 20%, mientras que la del noreste se abocará a servicios vinculados a parques industriales y naves logísticas", dice Adrián Mercado, titular de la firma homónima.

Los otros $ 70 millones fueron destinados a la mudanza de las oficinas, que se llevó adelante el 2 de marzo. "Nos mudamos al tercer piso del edificio Porteño Plaza I, ubicado sobre Olga Cossettini, en Puerto Madero, arriba de un local de Dandy. Antes, funcionaban allí las oficinas del hotel Hilton. Refaccionamos el espacio y pasamos de 550 metros cuadrados a 800", explica el ejecutivo.

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En este contexto, Adrián Mercado incorporará a su plantel actual de 92 empleados, por lo menos, a otros 15. "En función de cómo se desarrolle el año, ajustaremos el número", afirma. 

Narvaezbid, otro referente de la industria que presta servicios a empresas para vender sus activos ociosos o inmovilizados a través de un sistema 100% digital, facturó $ 4600 millones en 2021 y espera llegar a $ 6000 millones este año. 

"Las ventas crecieron casi un 80% el año pasado. La naturaleza anticíclica de la actividad encajó bien con las necesidades del mercado. Tanto el público comprador como vendedor respondió por encima de las expectativas. Este será un año de muchas oportunidades en la comercialización de bienes durables y las subastas continuarán posicionándose como una alternativa de compraventa cada vez más utilizada", considera Fabián Narvaez, presidente de Narvaezbid.

Este año, la empresa prevé invertir $ 15 millones en la plataforma y servicios complementarios. La cifra que se suma al desembolso reciente de $ 40 millones realizado en la mejora de procesos operativos. "Desarrollamos nuevas tecnologías de automatización para los pagos y el resto de los servicios que forman parte de las subastas", detalla Narvaez. 

Como parte del proyecto, ampliará en un 10% su staff, con la contratación de cuatro empleados que se sumarán a los 40 que hoy tiene la firma. "Son recursos para reforzar el desarrollo de procesos y el área de marketing", anticipa el presidente.

A su vez, la compañía acaba de lanzar el primer marketplace de subastas del país, Marketplace Superbid, que funciona de forma independiente y conecta de forma directa a las partes involucradas -empresas, martilleros y potenciales compradores-, permitiéndole así a la empresa sumar a más actores y ampliar su presencia a países limítrofes, como Uruguay y Paraguay.   

Por su parte, Monasterio Tattersall, firma dedicada a subastas virtuales con tres unidades de negocio -hacienda, campos y activos- invertirá $ 1 millón para ampliar el segmento de la venta privada, que creció un 60% en 2021.

"Se trata de subastas exclusivas para empleados de empresas, a quienes se les ofrece primero los bienes, antes de brindarlos en remates abiertos. En este rubro, trabajamos con grandes compañías, como Farmacity, Prosegur y Saint-Gobain", comenta Martín Ruiz, gerente del Área de Subastas de Activos de Monasterio Tattersall. 

En ese sentido, la empresa contará con un predio exclusivo para la venta de la flota de sus clientes. Se trata de una superficie de 1000 metros cuadrados en Parque Avellaneda, que además tendrá un taller, donde se reacondicionarán los vehículos.

Boom de remates

Con la misma dinámica que la versión tradicional, pero en un auditorio virtual y con pujas en tiempo real, la modalidad online crece cada vez más. Desde el comienzo de la cuarentena, subió más de un 300% la actividad.

Los remates de Falabella, tras la salida de la cadena chilena de la Argentina, son una muestra del boom que experimenta la industria. Tal fue el éxito de esos eventos que rápidamente se agotó todo el stock.

Las casas de remates califican al fenómeno como un "éxito total", no solo por la excelente performance en las ventas, sino también porque mes a mes se supera el promedio habitual de visitantes, que buscan aprovechar la oportunidad de acceder a ofertas de hasta el 60%.