El descubrimiento que desmiente el mayor mito de las dietas: la clave para un peso saludable está en la calidad de los carbohidratos

Un estudio científico publicado en el European Journal of Nutrition destacó la importante de la calidad de los carbohidratos, más que la cantidad, en la prevención de cánceres relacionados con la obesidad. 

La investigación, realizada en el marco del "Seguimiento Universidad de Navarra", analizó la relación que existe entre la calidad de los carbohidratos y el riesgo de desarrollar este tipo de tumores malignos.

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Estudio revela que la calidad de los carbohidratos reduce el riesgo de cánceres relacionados con la obesidad

Científicos encontraron que la calidad de los carbohidratos que elegimos puede ser clave para reducir el riesgo de padecer cánceres relacionados con la obesidad. 

Para llevar a cabo este estudio, se realizó un seguimiento exhaustivo a 18,446 graduados universitarios españoles. Estos individuos, con una edad promedio de 38 años, fueron observados durante un período que superó los 13 años. 

Es importante destacar que ninguno de los participantes tenía historial previo de cáncer personal, según explica la catedrática del departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, Estefanía Toledo.

"De ellos, se confirmaron 269 casos de cáncer relacionados con la obesidad", señaló. 

La clave está en elegir hidratos de carbono

En lugar de centrarse en la cantidad total de carbohidratos consumidos, los científicos se enfocaron en cuatro dimensiones clave para evaluar la calidad de los mismos:

• Alta ingesta de fibra dietética. La fibra ayuda a regular el sistema digestivo, reduce los niveles de azúcar en sangre y promueve la saciedad, lo que puede contribuir a un peso corporal saludable.
• Bajo índice glucémico. Los alimentos con bajo índice glucémico liberan azúcar en la sangre de forma más lenta, lo que ayuda a mantener niveles estables de energía y prevenir picos de insulina.
• Alta proporción de carbohidratos integrales. Los granos enteros son ricos en fibra, vitaminas y minerales, y se asocian con un menor riesgo de enfermedades crónicas en comparación con los granos refinados.
• Alta proporción de carbohidratos sólidos. Los carbohidratos sólidos, como frutas, verduras y legumbres, aportan fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes, además de ser menos calóricos que los carbohidratos procesados.

En otras palabras, elegir carbohidratos ricos en fibra, de bajo índice glucémico, integrales y sólidos podría ser una estrategia efectiva para reducir el riesgo de cáncer. 

Optar por una alimentación rica en frutas, verduras, legumbres, granos enteros y alimentos ricos en nutrientes, mientras se limita el consumo de carbohidratos procesados y azúcares añadidos, puede ser una clave fundamental para mejorar la salud en general.

Fuente: EFE