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Las criptomonedas están cada vez más en boca de los argentinos. Esto se debe a que presentan soluciones concretas para algunas complejidades de la economía local, como por ejemplo las restricciones al acceso de dólares o las diferentes trabas para efectuar transferencias internacionales.

Dentro del ecosistema cripto, las monedas digitales que más llaman la atención de los usuarios locales son las llamadas stablecoins (o monedas estables). Estas fueron especialmente diseñadas para minimizar la volatilidad mediante la vinculación con un activo más fuerte como el dólar, el euro o incluso un commodity.

En el territorio nacional, el 17% de los adultos compró criptomonedas, con el foco puesto en las stablecoins, como forma de ahorro o inversión, frente al 12% que lo hizo durante el año pasado.

El dato surge del estudio de Americas Market Intelligence (AMI), basado en 2400 encuestas realizadas a usuarios de teléfonos inteligentes de la Argentina, México, Perú, Brasil, Colombia y Chile, durante noviembre de 2022.

Frente a este escenario, cayó como un baldazo de agua fría el análisis de S&P Global Rating, la agencia de calificación de riesgo estadounidense, que apuntó contra las stablecoins más populares del mundo, aquellas que mantienen paridad con el dólar.

Tether (USDT), Binance USD (BUSD), Paxos (USDP), USDC y DAI son algunos de los "dólares cripto" más reconocidos, que estuvieron bajo la lupa de Cristina Polizu, directora general de S&P Global Ratings, y los analistas Anoop Garg y Miguel de la Mata.

"Las monedas estables tienen como objetivo mantener un valor fijo, pero la estabilidad de cada moneda estable difiere según el tipo de garantía que la respalda o la falta de ella. Las monedas estables no están libres de riesgos y están sujetas a la volatilidad del mercado, la confianza y adopción del mercado, el riesgo tecnológico, la oferta y la demanda y la liquidez del mercado", escribieron los expertos en el informe emitido por la agencia de calificación de riesgo.

Los riesgos del dólar cripto

De acuerdo a Polizu, Garg y de la Mata, uno de los riesgos más importantes para este tipo de activos digitales es la desvinculación del valor fijo; es decir, cuando las stablecoins se desplazan de forma significativa del valor al que están tratando de seguir, como el del dólar.

Se trata de una situación recurrente en momentos de crisis o incertidumbre en los mercados, como a principios de marzo cuando cayó el Silicon Valley Bank (SVB), uno de los veinte bancos más importantes de Estados Unidos. La cripto estable USDC se desvinculó un 13% por debajo de la cotización del dólar después de que su emisor, Circle, confirmara que SVB mantenía u$s 3300 millones de reservas de efectivo que respaldaban a USDC.

En cuanto a las causas más comunes que producen la desvinculación de los "dólares cripto", los analistas destacaron la volatilidad del mercado, las tensiones de liquidez, el deterioro o la mala gestión de las reservas, un aumento repentino de la demanda, la falta de transparencia y la incertidumbre regulatoria, entre otras razones.

Sin embargo, no todas las monedas estables son susceptibles en el mismo grado a la desvinculación, porque su garantía subyacente y su gobernanza sobre sus reservas difieren. En tanto, el análisis de S&P Global Rating demostró que USDP muestra las desviaciones más altas por encima y por debajo del valor del dólar. Según el reporte, este activo "tiene una capitalización de mercado y un volumen de operaciones significativamente menores que los otros cuatro y, como resultado, su precio es más volátil".

USDT, por su parte, no sólo registró la menor cantidad de tiempo cotizando por debajo de un dólar, sino que también se posicionó como la moneda estable con menor dispersión de rendimientos en comparación a las restantes. Así, la divisa de Tether demostró por qué lidera el podio de las criptomonedas más comercializadas de todo el mundo, con un dominio del 90% del mercado de stablecoins.