La escalofriante amenaza que recibió la familia de una joven desaparecida: "La tenemos a la nena"
Candela está desaparecida desde el sábado pasado en la localidad bonaerense de Berazategui. ¿Qué pasó con la joven?
Una adolescente de 17 años desapareció el sábado de la casa de sus abuelos, en la localidad bonaerense de Berazategui. En las últimas horas, sus padres recibieron un aterrador mensaje de extorsión para recuperar a Candela: "Tenemos a la nena".
La joven se habría escapado de su casa alrededor de las 21 horas, cuando sus padres la esperaban con la comida. Si bien varios vecinos de la zona afirman haberla visto, los efectivos de seguridad no pudieron dar con su paradero.
Según la hipótesis de la familia, la joven habría hablado con alguien antes de irse de la vivienda, ya que estuvo varias horas con el celular. Mientras que en las cámaras de seguridad también se la ve con el teléfono.
"Se ve que alguien la está guiando porque mira el celular constantemente", sostuvieron. No obstante, recibieron fuertes mensajes de amenaza que podrían prevenir de sus captores.
Las amenazas que recibió la familia de Candela, la nena desaparecida de Berazategui
A cinco días de no tener rastro de su hija, el padre de la joven denunció: "Recibí un mensaje donde me pidieron dinero para recuperar a Candela. Fueron tres mensajes distintos de una línea".
El primero fue "la tenemos a la nena" y luego le llegó otro texto con "queremos $ 200.000". No obstante, él no respondió y eliminaron los mensajes, aunque evitaron comunicarse con la policía por miedo de ponerla en peligro.
¿Qué le pasó a Candela?
En diálogo con Nosotros a la mañana, la mamá sostuvo que cree que su hija "se fue a encontrar con alguien, porque es la primera vez que pasa eso". "Ella no es de desaparecer nunca, es muy de la casa. No entendemos qué pasó", insistió.
Además, sostuvo que no es de tener muchos amigos ni se movía sola en colectivo. "Debe estar desorientada", comentó, angustiada.
Su última conexión figura de ese mismo sábado a las 21:30, luego el teléfono se apagó y nadie supo de su paradero. Vestía pantalón negro, una campera negra con capucha, unas zapatillas blancas y una mochila blanca. Según la familia, no se habría llevado ropa para cambiarse.
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