Frutillas: los secretos para elegirlas en la verdulería y cómo conservarlas por más tiempo en la heladera

Las frutillas son una de las frutas más elegidas por las personas en todo el mundo. En la verdulería para comerlas frescas, en un restaurante para degustarlas con crema o en pastelería, cuando están en temporada sin dudas, son un éxito.

Si sos amante de esta fruta y querés conservarla de la mejor manera posible, es importante tener en cuenta ciertos aspectos a la hora de comprarlas y guardarlas en la heladera. 

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¿Cuáles son los mejores tips para elegir y conservar las frutillas?

Para disfrutar de las frutillas al 100%, tené en cuenta los siguientes consejos:

Saber elegir frutillas

A la hora de comprar frutillas, es clave descartar las que estén pasadas. Además, tampoco se deben elegir las que todavía cuenten con una parte blanca, debido a que no maduraron lo suficiente y tendrán poco sabor.  

Otra cosa a tener en cuenta en la verdulería es no elegir frutillas aplastadas. Es recomendable tomar las que posean color uniforme y que no tengan el cabito verde pegado.

¿Cómo lavar las frutillas?

Para lavarlas, alcanza con usar abundante agua corriente (dependiendo del tipo de agua potable que se tenga), al momento en que se van a comer. 

Algunas personas prefieren usar también unas gotitas de vinagre para completar la higiene.

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¿Cómo guardar las frutillas en la heladera o en el freezer?

Lo ideal es sacarlas de la bolsa que nos dieron en la verdulería y guardar las frutillas en la heladera dentro de un recipiente. 

Es importante tener en cuenta que deben ser conservadas en la heladera colocando unas hojas de papel absorbente debajo de las frutas. Así, durarán más tiempo.

Si compraste muchas frutillas para aprovechar alguna promoción y sabés que no las vas a comer en los próximos días, podés frizarlas. Después de lavarlas, secalas suavemente con un repasador o rollo de papel. Quitales el cabito y guardalas en bolsas bien cerradas o un tupper, listas para el freezer.