Trump suma problemas: deberá presentarse en la Justicia por nueva causa que lo complica
El expresidente de Estados Unidos reveló que ha sido "convocado" para comparecer ante el tribunal el martes próximo en su más reciente imputación.
Donald Trump anunció que había sido acusado en relación a los documentos clasificados encontrados en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, un momento histórico para Estados Unidos, ya que lo convierte en el primer expresidente que se enfrenta a cargos penales coincidiendo con la campaña por su candidatura a la Casa Blanca.
Trump reveló que el Departamento de Justicia (DoJ, por sus siglas en inglés) había tomado medidas para acusarlo, citándolo a comparecer el martes ante un tribunal federal de Miami (Florida). "Este es sin duda un DÍA OSCURO para los Estados Unidos de América", escribió en su red social Truth Social.
Un abogado de Trump aseguró que la citación contra el expresidente implicaba siete cargos específicos, incluyendo obstrucción de la justicia, declaraciones falsas y violaciones de la Ley de Espionaje. Jim Trusty aseguró en declaraciones a la CNN que las acusaciones eran "ridículas". El DoJ declinó hacer comentarios.
Con o sin Trump, el colapso de Estados Unidos podría ser inevitable
Aunque una condena penal no inhabilitaría a Trump para presentarse a la Casa Blanca, podría dar un giro a la campaña para las elecciones de 2024, en las que el expresidente busca derrocar al presidente Joe Biden.
La decisión del DoJ se suma a los crecientes problemas legales de Trump. Ya se ha convertido en el primer expresidente acusado de un delito en un tribunal estatal, después de que el fiscal del distrito de Manhattan le imputara 34 delitos graves de falsificación de registros comerciales de los que se ha declarado inocente.
Al parecer, el caso federal se refiere a los documentos incautados por los agentes en Mar-a-Lago en agosto. La redada se produjo después de que el expresidente entregara a las autoridades más de 15 cajas de documentos clasificados, incluidos algunos marcados como "top secret", tras meses de negociaciones con funcionarios del DoJ. Trump había almacenado el material en una habitación de su casa de Florida durante algo más de un año.
En mayo, Trump declaró a la CNN que "se llevó los documentos" porque "se lo permitía" la Ley de Archivos Presidenciales, que establece quién controla los documentos y otros archivos de la presidencia. La ley establece que los documentos oficiales de la presidencia son propiedad de EE.UU., no del presidente, y deben conservarse en un depósito federal.
Trump no es el único político que se enfrenta a una investigación sobre los archivos presidenciales. El DoJ ha encargado a un segundo abogado especial que investigue la posible manipulación indebida de documentos hallados en el garaje residencial de Biden en Delaware y en su antiguo despacho privado en Washington. La investigación está en curso.
También se encontraron documentos clasificados en la casa de Mike Pence, el ex vicepresidente de Trump que también ha presentado su candidatura por el partido republicano. El Departamento de Justicia cerró recientemente la investigación sin presentar cargos, según los medios.
El peligro acechante de un regreso de Donald Trump
Jack Smith, el abogado especial de EE.UU. que ha dirigido la investigación sobre Trump, fue nombrado por el fiscal general Merrick Garland en noviembre para supervisar las pesquisas relacionadas con el expresidente.
Trump podría enfrentarse a más problemas legales derivados de las investigaciones separadas dirigidas por Smith en el DoJ y Fani Willis, el fiscal de distrito del condado de Fulton, en el estado de Georgia, relacionadas con las elecciones presidenciales de 2020. Expertos legales aseguran que cualquier cargo que resulte de esas investigaciones podría suponer una amenaza más grave para él.
A principios de este año, Willis afirmó que su decisión sobre si presentar cargos basados en una investigación especial del gran jurado era "inminente". Tras su nombramiento, Smith expicó que "haría avanzar las investigaciones de forma lo más rápida y exhaustiva posible". Trump insiste en que no hizo nada malo.
Las acciones legales no parecen tener mucho efecto en la popularidad de Trump entre los votantes republicanos -la mayoría de las encuestas le muestran con una ventaja dominante sobre otros candidatos a la presidencia de su partido.
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