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La hoja de ruta que el Gobierno delimitó para el 2024, con un ajuste de 5% del Producto Bruto Interno (PBI) a los fines del déficit cero, tendrá consecuencias para los sectores productivos, pero las mismas no se distribuirían de forma homogénea entre todos.

La antesala de que lo podrían ser los próximos meses fue el reporte de la Confederación Argentina de Mediana Empresas (CAME) de enero, con una caída de las ventas en un 28,5%. Como también la corrección del pronóstico por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), de la última revisión, que estipuló una contracción del 2,8%.

Un informe reciente de Audemus reveló cuáles son los rubros productivos a los que más y menos va a afectar el plan del titular de Hacienda Luis Caputo, a partir de un análisis de la elasticidad de los productos.

Los vulnerables

Con un valor de 5.2 para "Electrónicos", en la consultora proyectan que será el rubro que más sentirá los efectos de la contracción. Dado que el indicador muestra el grado de sensibilidad que tiene a los vaivenes económicos: más grande el número mayor dependencia.

"Por cada punto porcentual que crece (cae) el PBI del total de la economía argentina, la producción de dicho sector se expande (cae) en 2 puntos porcentuales. Así, un valor más alto supone que el sector es más elástico o procíclico que aquellos sectores con valores cercanos a 0", destacaron.

Por debajo quedó "Equipos de transporte" y "Automotriz" ambos con 3.7. Y con una diferencia aún mayor "Indumentaria" (2.7); "Cuero y calzado" (2.5), "Maquinaria y equipo" (2.3); y "Metales comunes" (2.2) tras considerarlas "ramas procíclicas".

"Cuando la economía se contrae, los consumos que más se recortan son los de bienes no esenciales. (...) Y cuando (...) entra en recesión, las inversiones productivas se desploman, motivo por el cual también cae la producción de bienes de capital", puntualizaron.

Tabla extraída del informe de la consultora Audemus.
Tabla extraída del informe de la consultora Audemus.

Ya a un ritmo de 2 quedó "Maquinaria de oficina" y "Construcción". Para este último, uno de los factores de más influencia, por la composición histórica de su demanda, es la decisión del oficialismo de impulsar un modelo de iniciativa privada para la obra pública.

Lo que ya despertó alertas en la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO) que declaró "estado de emergencia" tras asegurar que hay más de 3.000 obras frenadas. Con su correlato en mercado: un futuro incierto para 1.400 empresas y 200.000 trabajadores.

Al fondo de la tabla

En el escalón más bajo de la tabla, a un valor de 0.1 posicionaron al "Tabaco" pese a que la mayor parte de la producción se destina al mercado interno. La baja influencia se debe a que "las personas fumadoras no alternan demasiado sus hábitos ante los ciclos". Aunque destacaron que en las últimas décadas el consumo cayó sostenidamente por consideraciones de salud.

Otro de los rubros en donde menos va a impactaría sería la producción petrolera. El 0.4 de elasticidad se explica porque "no responde tanto a las dinámicas de la demanda local, sino a factores regulatorios y de incentivos, así como a la disponibilidad de hidrocarburos en los distintos yacimientos".

La industria química obtuvo la misma ponderación a raíz de que alrededor del 30% de los productos son fabricados por la industria farmacéutica, bienes esenciales -al igual que los alimentos- con independencia del ciclo económico.

Algo similar sucede con la "Minería" (0.6) dado que la mayor parte responde a demandas internacionales -salvo los materiales que se utilizan en la construcción-. Y que la capacidad instalada está influida por el grado de desarrollo y madurez de los proyectos.

El caso particular del agro

A pesar de que la producción industrial del sector tiene una elasticidad baja (0.4) al ser lo último a reducirse ante una baja del poder adquisitivo y la orientación exportadora, la categoría "Agro" presenta una mayor elasticidad (1.4).

"No es tan baja porque cuando cae la producción agropecuaria, se resiente el principal motor de la generación de divisas y, con ello, la capacidad de crecimiento del PBI", afirmaron. Y detallaron: "Para este sector es mejor suponer una causalidad inversa (menor producción del agro incide en menor PBI), a diferencia de los sectores analizados anteriormente".