Se esperaba una sesión maratónica en Diputados pero se cayó de forma imprevista: los motivos

La Cámara de Diputados esperaba tener esta tarde una sesión especial que, además de un temario que incluía el tratamiento de 14 proyectos, estaba marcada por una agenda pública dominada por la denuncia por violencia de género contra el expresidente Alberto Fernández y la visita de legisladores de La Libertad Avanza a represores de la última dictadura.

A partir de las 12.15 comenzó la convocatoria para que los diputados bajaran al recinto para dar comienzo a una reunión en la que se formalizaría el reemplazo de diputados, donde también se esperaban discursos de condolencias por el fallecimiento de la hija de Ricardo López Murphy y la esposa de Carlos Castagneto, y finalmente, el tratamiento de iniciativas que ya tiene dictamen de las comisiones legislativas de la Cámara. 

Sin embargo, pasada media hora, el oficialismo y una parte de sus aliados no tenía quorum, por lo que los legisladores opositores pidieron al presidente de la Cámara, Martín Menem, que diera por "caída" la sesión y que convoque a una nueva. Aunque Cristian Ritondo (PRO) pidió una extensión del tiempo para reunirse acusando el mal funcionamiento de los ascensores del edificio, luego de la intervención de Cecilia Moreau (Unión por la Patria) señalando el reglamento, Menem tuvo que dar por concluida la espera y dejar a la cámara sesionando "en minoría". 

Las ausencias que impidieron el desarrollo no sólo fueron del bloque kirchnerista: también faltaron los diputados encabezados por Miguel Pichetto y oficialistas libertarios.

A partir de ese momento, los discursos sirvieron para acusarse por la "caída" del debate. En muchos sentidos y para muchos, se trataba de un escenario incómodo. El oficialismo señaló al kirchnerismo de no querer hablar de la "dictadura en Venezuela" y del caso Fernández; mientras que la oposición peronista apuntó a la vocación del oficialismo por eludir las sanciones contra sus diputados por la visita a exmilitares condenados por crímenes de lesa humanidad. 

"No les interesan los tema. Esa es la forma que tienen de legislar", acusó  al peronismo Gabtriel Gornoroni (LLA), mientras que su colega de bancada Santiago Pauli apuntó contra los diputados que se quedan "detrás de las cortinas" para no debatir de Venezuela: "Son cómplices de lo que pasa" en el país que gobierna Nicolás Maduro, disparó. 

Moreau, al igual que los diputados de la Izquierda, cargó contra el oficialismo y acusó al bloque libertario de trabajar en proyectos "para liberar a genocidas". 

"Cuando la reunión salió a la luz, dijeron que habían ido a ver mujeres embarazadas. No quiero tomar la reunión entre genocidas y diputados como hecho aislado. Acá no hubo una reunión, hubo muchas reuniones, desmiéntanme si están dispuestos a desmentirme en la justicia", desafió la legisladora massista. 

La sesión no podía ser ajena a la agenda pública, que está tomada en las últimas horas por la denuncia por violencia de género que realizó la ex primera dama, Fabiola Yáñez, contra el expresidente Alberto Fernández. 

La noticia tuvo alto impacto mediático y político, concitando un repudio amplio, entre ellas los de figuras femeninas del Frente de Todos, como los de la senadora Juliana Di Tullio y la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza.  

En el debate "en minoría", en las que sólo se pueden hacer expresiones y discursos sin votaciones, también hubo acusaciones por los temas que se iban a tratar en la sesión, entre ellos, la modificación del Registro Nacional de Datos Genéticos para que esa entidad -hasta ahora abocada a los casos de reconocimiento de familiares de desaparecidos- también pueda extender sus esfuerzos a reconocer material genético asociado a delitos contra la integridad sexual.

Finalmente, también hubo cruces por la imposibilidad de tratar un proyecto referido al tránsito vehicular que había motivado la presencia de representantes de "Madres del Dolor" en los palcos. En parte, los familiares de víctimas de tránsito fueron el foco de la atención discursiva de los diputados, quienes se acusaron mutuamente por no atender a sus demandas y de "usufructuar" el sufrimiento de ese grupo.