Hoy sucedió algo impensado dos años atrás, cuando Juntos por el Cambio perdió estrepitosamente las elecciones primarias que daban ganadas por seguro: el "si se puede" volvió a resonar esta tarde en Rosario. Fue en el acto realizado para que Mauricio Macri respaldara a sus candidatos a senadores y diputados nacionales en Santa Fe, una provincia donde la principal fuerza de oposición tiene chances ciertas de ganar las elecciones, donde se uso todo el aforo permitido, que es de 1000 personas.

En rigor, nadie quiere mostrar triunfalismos. El 2019 fue muy difícil para la coalición que en ese tiempo gobernaba la Argentina. Macri llegó a Rosario pero los maestros provocaron cortes por toda la Ciudad y, ante el temor de los escraches, el ingreso al acto fue extremadamente controlado y con las famosas "pulceritas" estrictamente divididas por color.

Macri pudo hacer su previa recorrida por los medios, ir al acto y luego desplazarse a la Fundación Libertad, donde se presento su libro, sin ningún tipo de problemas. Sin embargo, temen repetir esa escena de sorpresiva derrota de las PASO presidenciales. Y no se permiten ninguna ilusión. No solo por la lista que encabeza el vicepresidente del PRO, Federico Angelini, a senador y el economista Luciano Laspina, a diputado; y que es fuertemente respaldada por Macri, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.

Algo similar sucede con las otras tres listas, la que encabeza la periodista Carolina Losada a senadora, la que encabeza el ex intendente de Santa Fe José Corral y la que del ex ministro de seguridad santafesino, Máximo Pullaro.

En el acto, se vio un Macri especialmente eufórico y dando un discurso tradicional, de esos que no son demasiado habituales en el mundo PRO. Criticando el daño que el populismo genera en las sociedades, desde el público una señora le dijo que el Gobierno transformó la carne en polenta; y él lo repitió en el escenario.

Pero, además, reconoció que en su gestión no le encontró la vuelta a la economía: "No llegamos a tiempo con la macro y no pudimos domar la inflación, revertir tanto desatino (previo) en solo cuatro años no fue fácil". Y aportó a la autocrítica personal, sin denostar a los que volvieron a votar al kirchnerismo, al decir: "Mucha gente, con razón, decidió tentarse con el asado"

"Hoy no es el 41% el que esta preocupado, sino mas del 50% que creyó en el asado gratis y la heladera llena y se dio cuenta de que caímos en el menor consumo de carne en 100 años", enfatizó.