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Las perlas negras de la economía: 5 sectores que crecen a pesar de la crisis

Las industrias que crecen pese al desorden macroeconómico o como consecuencia de él. A qué se debe su buena performance.

En medio del desorden macroeconómico que vive el país, persisten algunas perlas negras del sector productivo y de servicios, que siguen creciendo cuando todo parece ir en contra.

Con el impulso de factores como las tendencias globales, el aumento de participación en el mercado interno por las restricciones a las importaciones o la necesidad de encontrar un refugio de valor, estas actividades no solo tuvieron una buena performance en los primeros meses del año, sino que se proyectan como las de mejor rendimiento para todo 2023.

Uno de los rubros más dinámicos es el de petróleo y gas. Según el informe de Tendencias Económicas del Instituto Argentino de la Energía General Mosconi, en marzo, la producción de petróleo aumentó 11,4 por ciento interanual (i.a.) y 12,4 por ciento en los últimos 12 meses (comparando con igual período inmediato anterior o a. a.). En tanto, la producción de gas se redujo 1,1 por ciento i.a y aumentó 4,2 por ciento a.a. La producción de gas convencional se redujo 7,6 por ciento i.a y 6.7 por ciento a.a., pero la no convencional (55 por ciento del total) aumentó 4.2 por ciento i.a. y 15 por ciento a.a. en los últimos doce meses.

El rubro de textiles, prendas de vestir, cuero y calzado aumentó un ocho por ciento.

Sin embargo, para el exsecretario de Energía y presidente del IAE General Mosconi, Jorge Lapeña, el del petróleo y gas "es un crecimiento relativamente modesto". "Sólo crece el yacimiento de Vaca Muerta, que es un yacimiento importante de hidrocarburos no convencionales, pero cae en el resto de las cuencas productivas, de yacimientos convencionales".

Otro sector con comportamiento positivo fue el automotor. Natacha Izquierdo, responsable de Inteligencia Sectorial en la consultora ABECEB, indica: "Con las restricciones, la producción nacional se ha, entre comillas, beneficiado". "Creo que este desorden no favorece a nadie, pero la realidad es que la industria automotriz comenzó el primer trimestre con una mejora en todos los indicadores de desempeño: la producción creció 27 por ciento; las ventas al mercado interno, un 13 por ciento y las exportaciones, un 26 por ciento", precisa. 

Señala que los factores que incidieron fueron el crecimiento de los mercados externos de América latina y el abastecimiento al mercado doméstico, en el que operó por sustitución de importaciones. De todas formas, aclara que las ventas están por debajo del promedio de los últimos 10 años, pero -ilustra- "los jugadores internos han ganado participación. Explican el 65 por ciento de las operaciones, cuando históricamente representaban el 38 por ciento".

Otro sector con comportamiento positivo fue el automotor.

De acuerdo con el Índice de producción manufacturero (IPI, del Indec) correspondiente a febrero, el rubro de textiles, prendas de vestir, cuero y calzado aumentó un ocho por ciento. Para Izquierdo, se trata de un comportamiento de consumo impulsado por la imposibilidad de ahorrar y la necesidad de dar mejor destino al dinero. En paralelo, las empresas compran maquinarias y equipos, ítem que creció un 5,9 por ciento, en la búsqueda de un refugio de valor.

Según IPI, el segmento de muebles también tuvo una variación positiva del 7,9 por ciento e Izquierdo apunta que es un fenómeno complementario al hecho de que hay más finales de obra en la construcción (aunque pocos inicios).

El Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE, del Indec) de febrero muestra que la actividad inmobiliaria tuvo una variación del 2,1 por ciento. "El sector se está moviendo, sobre todo en Gran Buenos Aires y el interior, mientras que la Ciudad de Buenos Aires viene más demorada", afirma Germán Gómez Picasso, director de Reporte Inmobiliario. Añade que "la baja del acumulada de los valores de las propiedades del 40 por ciento en dólares en cuatro años traccionó la demanda". "De hecho, ya llevamos dos trimestres con precios estabilizados debido a que la demanda comenzó a actuar", continúa. Y concluye: "Los valores de las propiedades se encuentran en un piso técnico y el comprador más sofisticado advierte este hecho y aprovecha las mejores oportunidades. Dan por descontado que, cuanto más esperen, menos cantidad de producto de buena calidad encontrarán".

Otro rubro que se vio impactado favorablemente por las restricciones -en este caso en el acceso a divisas- es el de hoteles y restaurantes, que, según el EMAE de febrero, aumentó un 8,6 por ciento. Izquierdo recuerda que este rubro también está impulsado por programas específicos, como Previaje.

Esta nota se publicó originalmente en el número 343 de revista Apertura.

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