¿El fin del papel? El negocio de los audiolibros crece en la Argentina y ya mueve u$s 5000 M en el mundo
La aparición y el afianzamiento de las plataformas de comercialización y el aumento de la producción impulsan a la categoría. Esperan que se cuadriplique su facturación global para 2030.
El mercado de los contenidos en audio no dejó de crecer en los últimos años y, dentro de ese universo, los audiolibros ganan cada vez más presencia, impulsados por la aparición y afianzamiento de plataformas de comercialización y por el aumento de la producción.
Se distribuyen a través de aplicaciones descargables de las tiendas online, como Audible (de Amazon), las suecas Storytel y Nextory, o la polaca Auditeka SA, que cobran una suscripción mensual en dólares. También, ingresaron al rubro Google y Spotify, lo cual fue un gran espaldarazo para el segmento.
El fenómeno es mundial. Según el Informe Bookwire 2022, el año pasado, los audiolibros representaron una facturación de u$s 5000 millones anuales a nivel internacional. Con base en una tendencia de crecimiento interanual del 15 por ciento, el trabajo estima que, hacia 2030, el sector facturará un total de u$s 20.000 millones.
Daniel Benchimol, fundador y director de la empresa Proyecto451 y consultor de la industria editorial en materia de estrategias digitales, afirma que el mercado anglosajón es el más consolidado. "En los Estados Unidos y en el Reino Unido, es un negocio sumamente importante, que crece a tasas de dos dígitos cada año. Ya empieza a tener una cuotaparte importante de la facturación del sector editorial. Hay producciones muy sofisticadas, con artistas y figuras reconocidas", describe y manifiesta que también se advierte una evolución en la actividad en América latina y el público hispano de los Estados Unidos.
"Todavía, es un negocio bastante reducido y en el que participan pocas editoriales. Pero hay un crecimiento en la producción y en el catálogo, que es lo primero que se necesita para desarrollar una industria, y viene escalando", describe.
Los grandes al ataque
De acuerdo con un estudio de la empresa de servicios digitales Libranda, a fines de 2022, había aproximadamente 20.000 títulos de audiolibros en español, un 43 por ciento más respecto del año anterior. Por otro lado, las ventas aumentaron un 50 por ciento, lo que representa un mayor dinamismo que el que exhibe el segmento de libros impresos, que solo creció un 1,1 por ciento en 2002 con relación a 2021, según la Federación de Gremios de Editores de España y la empresa de análisis de mercado GFK.
Las editoriales más grandes, con Penguin Random House y Planeta en los primeros puestos, ingresaron al rubro, pero también hay espacio para otras de menor dimensión, como Anagrama, y para productoras independientes.
"Durante los últimos años, el formato de audiolibro alcanzó una gran popularidad. El avance de la tecnología en conjunto, con la mejora en la calidad de los audios, la profesionalización de los narradores y la dirección, contribuyeron a la expansión del público que disfruta de este formato, abarcando a personas de diferentes edades y géneros, desde los 16 en adelante", afirma Catalina Lucas, directora de Estrategia Digital de Penguin Random House, que tiene unos 4500 audiolibros editados. "En muchas ocasiones, se trata de personas que no leían habitualmente y encontraron en este formato una forma de hacerlo", agrega.
La aparición y penetración de los audiolibros conllevó cambios de hábitos, asociados al mayor disfrute. "Los consumidores destacan la posibilidad de escuchar una historia en momentos en los que la lectura no era posible, como, por ejemplo, cocinando o haciendo ejercicio, y la comodidad que representa el no tener que forzar la vista mientras disfrutan de un buen libro", dice al respecto Lucas. Y añade: "No obstante, el momento de irse a dormir sigue siendo uno de los momentos más elegido".
Según explica la ejecutiva, el formato de audiolibros es una de las prioridades de la empresa. "Tiene mucha aceptación entre los consumidores de los Estados Unidos y México, y, a su vez, está registrando crecimientos continuos en toda América latina. Pospandemia, prácticamente, se duplicó el consumo en la región", agrega.
Para 2030 el negocio de los audiolibros facturará un total de u$s 20.000 millones, según el informe Bookwire 2022
Lucas asevera que los audiolibros argentinos son reconocidos a nivel mundial y que su consumo creció más de un 70 por ciento en los últimos cuatro años.
Consultada sobre los géneros con más demanda, describe una gama amplia. "Los más vendidos van desde temáticas como la autoayuda, el autoconocimiento y bienestar personal, hasta ciencia o ficción romántica", precisa. Y cita, entre algunos hitos, títulos como Cómo ganar amigos e influir sobre las personas, de Daniel Carnegie; Emociones Tóxicas, de Bernardo Stamateas, y Rayuela, de Julio Cortázar. "También, tuvieron mucho éxito libros de conocimiento e innovación, como los de Estanislao Bachrach y Mariano Sigman. Y, entre los más jóvenes, Caos, de Magalí Tajes", añade. Y completa: "Un segmento en crecimiento son las ficciones policiales y de suspenso, entre los que se destaca Catedrales, de Claudia Piñeiro. Los libros de Eduardo Sacheri y Gloria Casañas también se convirtieron en un éxito en este formato".
Por su parte, Florencia López, responsable de Producto Digital de Grupo Planeta Argentina, indica que el modelo de suscripción representa más del 85 por ciento del negocio, en contraposición de otras modalidades, como la compra por título.
La firma apuesta a que todo su catálogo pueda tener su versión de audiolibro en el futuro, con lanzamientos simultáneos a los de las versiones físicas y e-books. "Igualmente, somos conscientes de que ciertas temáticas son más difíciles de adaptar tales como, por ejemplo, los libros de arte", aclara.
Sobre la posibilidad de expansión del sector, manifiesta: "Todos los indicadores permiten estimar el crecimiento del negocio a dobles dígitos de aquí a 2026, con América latina y el Sudeste asiático como punteros".
Respecto del desarrollo, López destaca: "La Argentina cuenta con varios estudios que se dedican a la producción. No solo trabajan en producciones locales, sino que también lo hacen a nivel mundial, con una amplia variedad de acentos disponibles para su locución, voces hispanas, neutras, regionales, según los requerimientos solicitados".
Desde Córdoba, Audiolibros Colección -unidad editorial de Curva Ediciones Creativas, una proveedora internacional de contenidos en habla hispana- se especializa en audiolibros dramatizados en acento neutro y produce para vender a través de su sitio Todoaudiolibros, como así también por medio de 12 plataformas internacionales -incluidas Audible, Audioteka y Storytel- y de su aplicación Audiona.
Desarrolló títulos para empresas de distintas partes del mundo, como Planeta Sostenible, de Chile, o la danesa Saga Egmont, y también directamente para autores, también de diversos países. La firma elabora sus propios guiones y graba hasta con 20 actores, de Córdoba y de Buenos Aires. Nació hace 16 años, cuando los audiolibros se editaban en CD y actualmente tiene 162 títulos.
Su presidente, Mariano Schlatter, cuenta que la empresa comenzó a crear series originales con temporadas de entre 10 y 12 capítulos. "Consideramos que es lo que se va a venir en materia de audiolibros", manifiesta. Además, trabaja en la distribución de tarjetas que permiten comprar a través de código QR y permiten recuperar a las librerías como canal de distribución.
Crear voz
Benchimol insiste en que el potencial del rubro es enorme y una de las razones, argumenta, es la aplicación de tecnologías de inteligencia artificial para generar voces sintéticas, lo que se traduciría en una importante disminución de los costos de producción, que hoy -señala- pueden rondar los u$s 2500 o u$s 3000 por cada audiolibro. El especialista cree que esa tecnología puede impulsar un salto en la oferta, gracias a que haría más accesible el traspaso de grandes catálogos.
"Voces tan conocidas como la de Siri y Alexa se crearon a través de personas reales que, durante largas horas de locución grababan millones de palabras, y la tecnología se encargaba de juntarlas formando oraciones, haciendo que la mayoría suenen extrañas, porque carecen de cadencia, pausas y respiración", cita un artículo de la generadora de contenidos digitales Craft. "Utilizando la inteligencia artificial, este proceso es muy diferente: sólo requiere le lectura de un texto con el que el algoritmo es capaz de aprender y replicar el patrón individual de cada voz, para generar palabras y oraciones completas que no estaban en la grabación original", suma.
"Con estas tecnologías de inteligencia artificial para crear voz, se podría pasar, rápidamente, de 20.000 o 25.000 audiolibros en español a unos 200.000, lo cual motorizaría más el negocio", grafica Benchimol.
Cada audiolibro tiene un costo de producción de entre u$s 2500 y u$s 3500, pero la aplicación de Inteligencia Artificial podría reducir estos montos
El año pasado, Sonantic, una plataforma de IA que recrea voces humanas que se hizo conocida por su participación en el negocio de los videosjuegos, fue adquirida por Spotify, luego de que esta última anunció su ingresó al mercado de audiolibros. La compradora definió a las voces generadas por esta firma como "convincentes, matizadas y sorprendentemente realistas a partir de texto".
"Estamos realmente entusiasmados con el potencial de llevar la tecnología de voz IA de Sonantic a la plataforma de Spotify y crear nuevas experiencias para nuestros usuarios", declaró en ese momento Ziad Sultan, vicepresidente de Personalización de Spotify. "Esta integración nos permitirá involucrar a los usuarios de una manera nueva e incluso más personalizada", añadió.
En tanto, los creadores de Sonantic, Zeena Qureshi y John Flynn, lanzaron un comunicado conjunto en el que afirmaron: "Creemos en el poder que tiene la voz y su capacidad para fomentar una conexión más profunda con los oyentes de todo el mundo y sabemos que podemos ser mejores que nunca en la plataforma de audio más grande del mundo".
Democratizar el acceso
Actualmente, la oferta de audiolibros gratuitos en la Argentina es incipiente, a diferencia de España, que tiene ciudades -como Madrid- en las que se puede acceder a un enorme catálogo si se es portador de un carnet de socio de las bibliotecas públicas.
En la Argentina, el Centro Cultural Kirchner realizó un proyecto por el cual la guionista y directora de cine Lucrecia Martel y la narradora y guionista de cine Graciela Speranza seleccionaron y dirigieron cuentos narrados por actores y actrices argentinas, como Verónica Llinás o Cristina Banegas.
Las obras -entre las cuales se encuentran títulos de Hebe Uhart, Juan Filloy, Martín Rejtman y Washington Cucurto- se pueden escuchar en la página del Ministerio de Cultura de la Nación o en plataformas como Spotify.
La versión original de esta nota se publicó en el número 356 de revista Apertura.
Compartí tus comentarios