

En un mundo cada vez más conectado, los científicos advierten que un alimentoen auge en Estados Unidos podría representar un riesgo para la salud pública y desencadenar una nueva pandemia.
Las tendencias alimentarias que surgen en un país pueden expandirse rápidamente a nivel global, pero algunas conllevan peligros inesperados.
En este caso, una bebida en particular preocupa a la comunidad científica: la leche no pasteurizada. Promocionada como una opción "natural", ¿podría este producto convertirse en el origen de un nuevo brote epidémico?

¿Qué es la leche no pasteurizada o "raw milk"?
La leche no pasteurizada se define como aquella que no ha sido sometida a pasteurización. Este proceso de calentamiento está diseñado para eliminar bacterias dañinas.
Si bien sus defensores argumentan que conserva nutrientes, enzimas y probióticos que se pierden durante la pasteurización, esta falta de procesamiento es precisamente lo que preocupa a los expertos en salud pública.
Organismos como la FDA y los CDC advierten sobre los riesgos de consumir leche no pasteurizada, ya que esta puede contener gérmenes como E. coli, Salmonella, Campylobacter y Listeria.
Estos patógenos pueden causar enfermedades graves, especialmente en niños, ancianos, mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunitarios debilitados.
El riesgo de la leche no pasteurizada y la amenaza de una nueva pandemia
Un estudio reciente de la Universidad de Stanford reveló que el virus de la gripe puede permanecer infeccioso en la leche no pasteurizada refrigerada hasta por cinco días. Además, se detectó la presencia de ARN viral (material genético del virus) hasta por 57 días.
Este hallazgo plantea serias interrogantes sobre la seguridad alimentaria y la posibilidad de transmisión viral a través de este alimento. La FDA ha vinculado el consumo de leche no pasteurizada con más de 200 brotes de enfermedades transmitidas por alimentos.
Estas enfermedades pueden manifestarse como diarrea, vómitos y calambres estomacales. En casos más graves, pueden derivar en complicaciones como el síndrome de Guillain-Barré, insuficiencia renal, accidentes cerebrovasculares e incluso la muerte.
En diciembre de 2024, el estado de California ordenó el retiro voluntario de todos los productos de leche no pasteurizada y crema de la compañía Raw Farm debido a una posible contaminación con gripe aviar.
Además, se reportaron casos de gatos domésticos que murieron o fueron eutanasiados después de consumir estos productos de la misma granja, y las pruebas confirmaron que estaban infectados con este virus.

El debate político en EE.UU. sobre este alimento de moda
En Estados Unidos, la leche no pasteurizada se ha convertido en un tema de debate político e ideológico. Algunos conservadores y defensores de la "libertad de salud" abogan por una flexibilización de las regulaciones sobre su venta, argumentando que los consumidores tienen derecho a elegir lo que consumen.
Sin embargo, los expertos en salud pública y las agencias reguladoras insisten en los riesgos para la salud y la necesidad de mantener las normas de seguridad alimentaria. La reciente detección de gripe aviar en el ganado lechero ha añadido una nueva dimensión a la controversia.
Si bien la cepa actual de gripe aviar no se considera altamente peligrosa para los humanos, existe la preocupación de que pueda mutar y volverse más contagiosa. Esto podría representar un riesgo para los trabajadores de las granjas lecheras y, potencialmente, para la población en general.
Mark McAfee, CEO de Raw Farm y director del Raw Milk Institute, busca establecer certificaciones federales para granjas de lácteos no pasteurizados. Sin embargo, virólogos han expresado su alarma.













