Tras el boom de crecimiento que vivió la marca, especialmente conocida por su harina, Morixe quiere cerrar el año con un aumento en las ventas del 10%, no el 50%-60% interanual que habían logrado en plena pandemia, pero "un gran desafío, no un acto de prudencia" en el contexto actual. "En un contexto de precios controlados y suba de costos queremos dar pasos firmes y aun así crecer", explica a El CronistaRomán Malceñido, gerente general de la firma que se hizo conocida por las recetas de su presidente y principal accionista, Ignacio Noel, en las redes sociales. De hecho, la empresa conocida por su harina y rebozados a fines del año pasado hizo una inversión de u$s 7 millones en su planta de Benito Juárez para poder seguir creciendo. Desde 2018, año en el que la firma presentó su nuevo portafolio de productos tras el ingreso de Noel como accionista mayoritario, Morixe multiplicó por 15 el volumen de operación. Y ese éxito en las ventas se vio reflejado también en la performance de su acción en la Bolsa de Valores de Buenos Aires desde 2018 a la fecha, con una suba del 70% en dólares. "En 2020, con la pandemia, el papel de Morixe fue el que tuvo más suba del panel y de 2021 a la fecha tuvo una suba más lenta", indica el número uno. Sin embargo, la empresa mantiene la cantidad de inversores que son 6000 -en 2017 eran 500. "En algún momento salimos muy agresivos con el lanzamiento de categorías y la verdad que estamos en un mercado local sobre todo en el cual lanzar categorías donde tenés control de precios, márgenes congelados y demás es muy complejo", señala Malceñido, quien asegura que esas son sus principales preocupaciones y no así la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores ya que la harina es uno de los productos más baratos de la góndola. La marca hoy tiene 14 productos en el programa de Precios Justos. El ejecutivo, que lidera el día a día de la empresa desde 2019 pero es parte del staff desde mediados de 2017, agrega: "La posición hacia adelante es cuidar lo que tenemos y dar pasos firmes hacia lo que queremos alcanzar". "El balance nuestro de mayo 2022 fue con pérdidas operativas muy grandes porque tuvimos el margen básicamente congelado. Hoy, hemos hecho una recomposición de márgenes muy importante pero acompañada por una suba de costos financieros inmensa", detalla Malceñido. Con este objetivo, la firma que nació en 1901, invirtió esos u$s 7 millones en su planta de Benito Juárez para ingresar en nuevas categorías y crecer en otras. Así, lanzó premezcla de bizcochuelos para competir principalmente con Exquisita de Molinos y harina para pizza, segmento en que había un único jugador: Pureza. Además, se aumentó por cuatro la capacidad en rebozador y pan rallado, una categoría en la que la marca ya estaba con market share del 20% en supermercados, según números de la misma empresa. Este aumento de capacidad, además de ganar participación de mercado, le permitirá a Morixe entrar en el negocio industrial: la venta de rebozadores a casas de pastas, pollerías. "En el canal gastronómico vemos un potencial", indica el ejecutivo. Y señala que "la inversión ya está lista y la expectativa para este año viene atada a poner tener todas esas unidades de negocio en su máxima capacidad operativa". En el caso de pan rallado y rebozador, el objetivos es ganar participaciones de mercado importantes y en el caso de bizcochuelo y pizza como arranca casi de cero, la meta es hacerse de una parte del torta basados en el éxito de la marca en la categoría de farináceos. Justamente, siguiendo la estrategia de dar pasos firmes, la apuesta de Morixe a segmentos cuando su principal porcentaje de ventas viene de la harina 000, es "muy lógica", como la define su propio gerente general. "No queremos, en este momento del mercado, salir a dar manotazos en categorías que estén cerca pero que no son nuestro core, como por ejemplo, mayonesa", sigue Malceñido. A la vez, la empresa bajó sus volúmenes del negocio de harina en bolsa para panadería que es el negocio original con el que nació la firma pero el menos rentable. "Antes este negocio era la razón de ser de toda la organización. Es un segmento donde hay mucha competencia y en el cual operas con márgenes muy pero muy bajos", explica. Así, el objetivo de Morixe es salir de este tipo de negocios y entrar en otros de mayor valor agregado. En cuanto a las exportaciones, la empresa que venden en el exterior el 25% de sus ventas, no hizo su construcción marcaria sobre la harina, como en la Argentina. En Brasil, por ejemplo, esa construcción se hizo con el aceite de oliva y con las papas prefritas congeladas. Y hoy están evaluando ampliar su presencia en el Mercosur yendo a esquemas de ingreso que vayan más allá de la representación exclusiva. "En otros países el crecimiento no va a ser exponencial como fue en la Argentina porque ahí competís con el mundo. Ir a Brasil es empezar a jugar en la Champion League", señala el gerente general citando a Noel.