
Desde su fundación en 1975, Microsoft se consagró como una empresa líder en el mundo de las computadoras y el desarrollo de softwares. Con el tiempo, la compañía incluso ganó suficiente prestigio y capital como para volcarse a la inversión y así expandir sus proyectos.
A pesar de sus intentos por estar a la vanguardia de la tecnología, hubo un campo en el que Microsoft no pisó fuerte y, según su cofundador Bill Gates, esto representó el gran fracaso de la empresa.
Estamos hablando del ecosistema de los smartphones, donde Apple y Android ganaron terreno a medida que Microsoft se enfocaba en los sistemas operativos. A continuación, los grandes arrepentimientos de Bill Gates.
Bill Gates: llegó tarde a la carrera de los celulares

En 2010, Microsoft presentó su primer teléfono móvil al mercado: el Windows Phone. Este llegó con retraso al furor de los celulares inteligentes, mientras que Apple ya había lanzado su iPhone 4.
La compañía que en aquel entonces estaba bajo el mando de Gates no pensaba quedarse atrás y acudió a Nokia para formar una alianza. El CEO de esta última empresa, Stephen Elop, accedió y anunció que brindaría el sistema operativo Windows Mobile para los dispositivos de la línea Lumia esa marca.
Lo que nadie se esperaba era que, tras la noticia, las acciones de la compañía finlandesa cayeran un 14% y que pasara del 1° puesto al 10° en venta de smartphones en tan sólo 2 años.
La gran debilidad de Windows tuvo que ver con la carencia en la oferta de aplicaciones. Concretamente, la empresa fue incapaz de conseguir suficientes desarrolladores de aplicaciones de terceros. Mientras tanto, para marzo del 2017, Apple y Google Play tenían 4 veces más aplicaciones en sus catálogos que Windows Phone.
Ese mismo año se consolidó el gran fracaso de Microsoft y el gigante tecnológico anunció lo que ya todos se esperaban: el sistema operativo móvil Windows Phone había llegado al final y no se invertiría ni un centavo más para intentar competir con iOS y Android.











