A mitad de la semana pasada, el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) comunicó interferencias en sus plataformas digitales tras un ataque cibernético por el ransomware Rhysida, que alteró la atención médica y la tramitación de medicamentos y tratamientos.

Los piratas informáticos implementaron un programa malicioso -malware- para secuestrar los datos de la entidad y pedir un rescate por ellos. 

Si bien desde el PAMI aseguraron que el ataque fue mitigado y que la información está a salvo -además de retomar el funcionamiento normal de los servicios-, los atacantes comunicaron que poseen 1TB de documentos financieros e información de los afiliados. Para dar prueba de ello, compartieron varias capturas de pantalla. 

Hackeo a PAMI: qué dicen los ciberdelincuentes

En declaraciones para el portal Rosario 3, integrantes del grupo Rhysida comentaron: "Las declaraciones de los representantes del PAMI en los medios de comunicación, (señalando) que no han perdido datos personales e importantes, son mentira". 

A modo de sustentar sus declaraciones, los piratas compartieron balances y documentos personales extraídos directamente del módulo Gedo, un sistema administrativo que se emplea en el sector público para crear, firmar, registrar y archivar los documentos. 

"Pronto comenzaremos la publicación de estos datos si no cambian de opinión y no se ponen de acuerdo con nosotros", aseguraron al medio previamente mencionado.  

El ransomware Rhysida, también responsable del reciente hackeo al Ejército de Chile, tiene su propio sitio en la darkweb donde publican la información de las víctimas en caso de que no se pague el rescate.