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Los olvidos forman parte de nuestra vida diaria. Desde no recordar dónde dejamos las llaves hasta confundir nombres, estos lapsus de memoriason frecuentes. Sin embargo, la repetición de ciertos hábitos puede ayudarnos a prevenir algunos de estos olvidos comunes.
Un reconocido neurocientíficobrindó un listado de recomendaciones para incorporar acciones que ayuden a cuidar el funcionamiento de la memoria y mantenerla en óptimas condiciones.
Recomendaciones de un neurocientífico: estos son los principales hábitos para cuidar la memoria y evitar olvidos
Si empezás a tener dificultades para recordar cosas en tu vida cotidiana, es fundamental incorporar nuevos hábitos. Charan Ranganath, neurocientífico y director del Programa de Memoria y Plasticidad de la Universidad de California, resalta la relevancia de la información para que sea recordada.
A continuación, se detallan algunas prácticas recomendadas por Ranganath para mejorar la memoria y mantener la salud mental:
Filtrar con la experiencia: la mente puede manejar de 3 a 4 fragmentos de información a la vez, por lo que agrupar datos relacionados facilita su memorización.
Concentrarse en lo importante: la distracción puede afectar la capacidad de recordar. Es vital dirigir la atención hacia lo que se desea memorizar.
Optimizar el entorno: es importante eliminar distracciones que interfieran con la recepción de la información. Un ambiente adecuado favorece la concentración.
Estimular los sentidos: cuantos más sentidos se involucren en el proceso de memorización, más fácil será recordar la información.
Descansar y hacer pausas: dormir y tomar descansos permite que el cerebro procese y consolide la información adquirida, fortaleciendo los recuerdos.
Incorporar estos hábitos puede mejorar significativamente la capacidad de recordar y contribuir a una mejor salud mental.
Memoria: qué son los olvidos y cuándo debemos preocuparnos
Los olvidos son parte natural del funcionamiento de la memoria, y se refieren a la incapacidad temporal o permanente de recordar información almacenada en la mente.
Aunque los olvidos se intensifican con el envejecimiento, no siempre son indicadores de un problema. Con más experiencias acumuladas, recordar detalles específicos puede volverse más difícil debido a la superposición entre recuerdos.
Sin embargo, existen algunas señales que pueden ser una alerta para prestar atención a lo que sucede con nuestra memoria:
Repetir las mismas preguntas una y otra vez.
Perderse en lugares conocidos.
Olvidar cómo usar objetos cotidianos.
Generalmente, estos lapsus son parte de la vida cotidiana, pero, si estos episodios se tornan muy recurrentes y complican las acciones del día a día y el desarrollo personal, es momento de consultar a un especialista.
