Ante la pérdida de reservas, el Gobierno anuncia un nuevo dólar diferenciado para la soja y el agro. Nuevamente, y en línea con los demás programas cambiarios del pasado, esta medida tendrá beneficios y riesgos. Si bien el Central se hará de dólares y de recaudación, advierten los costos de emisión monetaria e inflación futura que este esquema generará. En medio de un acelerado ritmo de perdida de reservas, en el día de ayer se dieron a conocer los detalles sobre las nuevas medidas cambiarias que estarían por anunciar el Gobierno. Se espera un nuevo dólar "soja", el cual podría llegar a tener una duración máximo de 30 días a partir de abril, mientras que se espera también un dólar diferenciado ("dólar agro") para las economías regionales como el maní, vino, etc. En este caso, el dólar diferenciado se extendería por 90 días a partir de mayo. Se estima que tendrá una cotización de $ 300 por dólar y la vigencia sería de 90 días para productos de las economías regionales y solo 30 días para la soja. Desde Delphos Investment señalaron que la medida del Gobierno implica una devaluación sin efectivamente devaluar. "El Gobierno mantiene la política de "devaluar sin devaluar" profundizando el esquema de tipos de cambio diferenciales para ajustar el flujo de exportaciones e importaciones y de ese modo "navegar" la aguda escasez de divisas hasta las elecciones. En el corto plazo se alejarían las chances de una devaluación brusca o de un desdoblamiento cambiario", dijeron. El objetivo final de este nuevo dólar (dólar agro) es el de incrementar la oferta de divisas en el mercado de cambios ante un contexto de perdidas sostenidas en las reservas. Las medidas llegan luego de algunas semanas de muy flojo desempeño en el frente cambiario, que llevaron a las reservas netas a perforar los u$s 900 millones esta semana. Desde Facimex Valores sostuvieron que el equipo económico apunta a que la liquidación de las exportaciones del agro ascienda a u$s 15.000 milliones en el segundo y tercer trimestre del año. "Para tener una referencia, en ese período la liquidación del agro suele ser de u$s 16.800 millones en años normales y de u$s 14.300 millones en años de sequía", comentaron. Así, hay un conjunto de ventajas y desventajas sobre esta medida. Al igual que en los demás programas cambiarios, el Gobierno se va a hacer de más dólares y va a recaudar más vía retenciones. El Gobierno busca recomponer reservas, pero el costo termina siendo muy alto. Como contraposición a la acumulación de reservas, el balance del BCRA se verá afectado ya que habrá mayor emisión monetaria Fernando Marull, economista de FMyA, explicó que la medida de dólar agro tiene sus ventajas y desventajas. "La parte positiva es que el BCRA va a dejar de vender para pasar a comprar reservas. En cuanto a las desventajas, este viene por el lado del deterioro del patrimonio del BCRA. Como ya venimos viendo, esto presiona bastante al stock de Leliq. Los shocks de emisión por la compra de bonos en pesos y los programas de dólar soja se ha emitido muchos pesos", alertó. Al igual que en los otros programas de dólar soja, el BCRA no se queda con todos los dólares que compra. Por otro lado, compra dólares caros ($ 300) y los vende al oficial, que hoy esta en $ 215. Es decir, compra caro y vende barato. Para comprar esos dólares el Central debe emitir, lo cual en definitiva implicará una mayor emisión y un mayor deterioro patrimonial del BCRA. Si bien el activo va a subir (reservas), la emisión monetaria va a crecer más rápido, en línea con lo ocurrido en los otros programas previos. Por el lado de los beneficios, desde PPI remarcaron que el "dólar soja" 3 traería retenciones adicionales por $ 115.000 millones (si los u$s 3800 millones se liquidasen a $ 208 en vez de $300) y ayudaría a contener una dinámica fiscal que acorde a lo ocurrido en los primeros dos meses del año. Del lado negativo, está fundamentalmente atado al deterioro aun mayor del patrimonio del BCRA. "En caso de venderse las 7 millones de toneladas de soja acopiadas de 2022, el BCRA compraría unos u$s 3800 millones, de los que podría desprenderse al dólar oficial de unos u$s 1100 millones (si vende el 30% de lo comprado como ocurrió en promedio en las dos ediciones anteriores), quedando con un neto de casi u$s 2700 millones. El correlato de esto sería una expansión monetaria de $ 916.000 millones o 0,6% PBI (PBI nominal de $ 163 billones)", advirtieron desde PPI. Desde un banco local explicaban que el costo de hacerse dólares va a ser muy alto, en línea con los demás esquemas cambiarios previos. "El Gobierno se vuelve a chocar con la misma pared. La aceleración inflacionaria de hoy es por culpa de la emisión del pasado, dentro de los cuales, el programa de dólar soja 1 y 2 fueron protagonistas. Esto significa que si bien el Central se va a hacer de dólares, va a tener que emitir para conseguirlos. Se hipoteca dólares hoy por inflación de mañana. El plan llegar en su máximo expresión", alertó el trader.