Desde que el secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, dio su apoyo a la Argentina, los bonos y las acciones subieron con fuerza. Sin embargo, la mejora no fue pareja.
La renta fija tuvo una performance mejor que las acciones. Los analistas remarcaron que dicha novedad favorece mas a los bonos en el corto plazo. Sin embargo, también indican que las accione podrían verse favorecidas en el mediano plazo. ¿Qué tipo de activo prefieren los analistas?
Movimiento dispar entre bonos y acciones
Desde la confirmación del apoyo extraordinario del secretario del Tesoro de EEUU a la Argentina, los bonos y las acciones evidenciaron un rebote.
Sin embargo, la mejora fue despareja, con una recuperación mas pronunciada en la renta fija que en la renta variable.
Esto es un comportamiento extraordinario ya que, generalmente son las acciones mas volátiles que los bonos. De cualquier manera, en esta oportunidad, los bonos tuvieron una mejor performance porcentual que las acciones.
Yendo a los números, desde el piso de la semana pasada hasta los valores actuales, los Globales del tramo corto subieron entre 16% y 19%, mientras que los bonos del tramo medio ganaron entre 17% y 18%.
A su vez, los títulos mas largos, a 2041 y 2046, evidenciaron ganancias de 13% y 17% respectivamente.

Los avances que muestran las acciones desde el piso registrado el lunes pasado son más moderadas
Las acciones de Grupo Financiero Galicia o Banco Macro son las que mas subieron, con avances de 11% y 13% respectivamente.
Por su parte, otras acciones como Grupo Supervielle, BBVA Argentina, YPF, Pampa, Edenor, Telecom y TGS registraron subas mas leves, de entre 4,5% y 9,7%.
Es decir, la acción que mas subió lo hizo en la misma magnitud que el bono que mas recuperó desde el piso de la semana pasada hasta la actualidad.
A la hora de explicar el movimiento dispar ente las acciones y los bonos, los analistas remarcan que el apoyo de EEUU le da mayos sustento a la renta fija ya que reduce la probabilidad de incumplimiento de la deuda.
En cambio, para las acciones, dicha noticia no implica una mejora directa en sus perspectivas.

Nicolás Guaia, CEO de Max Capital Asset Management, consideró que la recuperación asimétrica entre acciones y bonos responde a que el optimismo y la calma de los últimos días se explicó, en gran parte, por el anuncio de apoyo de los EE.UU.
"Este apoyo vendría en la forma de swap de monedas, compra de divisas y/o compra de bonos. Las primeras dos opciones fortalecerían al Peso o reservas y la segunda tendría efecto directo en las paridades de la deuda en dólares, pero todas son buenas noticias para los bonos. Esta asistencia, de todos modos, no garantiza mayores votos de cara a octubre", advirtió.
Por otro lado, Guaia agregó que el resultado de las elecciones es determinante para definir el futuro de los activos financieros
"Las acciones son activos con horizontes de largo plazo y sus precios dependen de perspectivas y expectativas más ligadas a resultados electorales. En caso de que el oficialismo tenga un buen resultado en las elecciones nacionales de medio término, seguramente haya una recuperación de las acciones y vuelva a haber mayor correlación entre acciones y bonos", dijo.
Por su parte, los analistas de Sailing Inversiones indicaron que, en la reciente recuperación, quedó en evidencia que los bonos tuvieron un desempeño superior a las acciones.
Según señalaron desde la compañía, esto se explica porque el apoyo de Estados Unidos a la Argentina -con swap de monedas, líneas de asistencia y la expectativa de recompra de deuda- impacta de forma directa sobre la sostenibilidad de los cashflows soberanos, lo que mejora el perfil de repago y, en consecuencia, reduce el riesgo de crédito.
"La narrativa favorece inicialmente más a los bonos que a las acciones. Hoy los bonos cargan con el viento de cola más inmediato, pero las acciones ofrecen un potencial de catch-up interesante para quienes estén dispuestos a tolerar la incertidumbre del corto plazo", dijeron.
Por otro lado, agregaron que la misma dinámica que mejora la percepción de riesgo país termina teniendo un efecto de segunda ronda sobre las valuaciones accionarias.
"Al comprimirse spreads y bajar la prima de riesgo, se eleva la valuación implícita de las empresas. Si la tendencia de compresión de tasas se sostiene, es esperable que las acciones acompañen en el corto plazo con mayor fuerza, corrigiendo el atraso relativo observado frente a los bonos", explicaron desde Sailing Inversiones.

Lisandro Meroi, Research Analyst de TSA Bursátil, consideró que el anuncio del apoyo político y económico de EEUU llegó como un catalizador para los activos argentinos, impulsando las cotizaciones en medio de la contienda electoral.
"La posibilidad de contar con ayuda financiera viene a despejar ciertas dudas sobre cómo se afrontarían los próximos vencimientos, teniendo en cuenta las pocas señales en materia de acumulación de reservas que venía mostrando el gobierno. Algo de esto podría estar detrás de la mejor performance relativa a favor de la renta fija, sobre la cual persiste un view positivo en caso de un resultado favorable en las elecciones", dijo Meroi.
Menos probabilidad de default
El hecho de que el secretario del tesoro haya anunciado un paquete extraordinario, esto reduce la probabilidad de default de la deuda.
El mercado observa que el gobierno ha encontrado una nueva vía de financiamiento para seguir cumpliendo con sus compromisos de deuda.
Por esta razón, y dado que a comienzo de este mes la perspectiva para el pago de la deuda era oscura, el apoyo de EEUU ha sido visto como un alivio para los inversores, haciendo que los bonos suban más que las acciones.

Adrián Yarde Buller, economista jefe de Facimex Valores, indicó que con el apoyo de EEUU a la Argentina, el programa económico queda blindado durante la presidencia de Javier Milei, aliviando la urgencia de volver al mercado.
"Los vencimientos de deuda de mercado en moneda extranjera ascienden a u$s 31.000 millones hasta fin de 2027, incluyendo Globales, Bonares, Bopreal y repos. Por lo tanto, un eventual swap de u$s 20.000 millones cubriría los vencimientos hasta abril de 2027 inclusive, lo que junto al financiamiento ya obtenido del FMI permitiría cubrir la totalidad de los vencimientos hasta fin de 2027", indicó.
De esta forma, Yarde Buller remarcó que los anuncios de esta semana despejan el gran interrogante que tenía el programa de cara a los próximos años, que era la capacidad de acceder al mercado ante un escenario electoral adverso en octubre.
"Ahora, eso se volvió menos determinante y el equipo económico podría seguir avanzando con su plan independientemente del resultado de la elección. Por eso, tras haber llegado a un pico de 4,0x hacia finales de la semana pasada, el ratio entre el EMBI Argentina ("riesgo país") y el spread de la deuda emergente high yield se desplomó a un todavía muy alto 2,75x", afirmó Yarde Buller.

Pilar Tavella, directora de Research Macro & Estrategia en Balanz, afirmó que el anuncio del Tesoro de EE.UU. está orientado a fortalecer las reservas y ayudar a afrontar los pagos de deuda, por lo que tuvo un impacto positivo principalmente sobre la deuda soberana.
"El apoyo implica, además, que el escenario macroeconómico de 2026 sería un poco más favorable de lo que podría haber sido de tener que afrontar pagos de deuda sin acceso al mercado. De todas maneras, el programa económico requerirá cambios luego de las elecciones para que comprima el riesgo país desde estos niveles, en particular un mayor foco en la acumulación de reservas", remarcó.
Por otro lado, Tavella afirmó que los riesgos políticos siguen latentes, y estos no son solamente electorales, sino que también están relacionados con la sostenibilidad política del programa económico.
"Los bonos soberanos siguen abajo de los niveles previos a las elecciones de PBA, a pesar de la reciente suba, con lo cual incorporan parte de estos riesgos. Vemos valor en los bonos para perfiles agresivos, asumiendo un escenario electoral medianamente favorable para el gobierno. Los bonos tienen potencial de alza en un escenario macroeconómico más favorable, en el marco del respaldo financiero anunciado por EE.UU, aunque entendiendo que todavía hay riesgos que podrían implicar downside", indicó Tavella.

¿Bonos o acciones?
Cuando se analiza la dinámica de los activos financieros en el mediano plazo, se evidencia que ambas clases de activos muestran un proceso correctivo bastante pronunciado.
En lo que va del año, las acciones muestran una perdida mucho mas abultada que los bonos.
Esto tiene sentido ya que la renta variable tiende a tener una volatilidad mayor que los bonos.
En el acumulado del año, las acciones bancarias son las que más sufren, con Grupo Supervielle perdiendo 65%, seguida por Banco Macro, Grupo Financiero Galicia y BBVA Argentina, que can entre 52% y 53% en 2025.
Otros papeles como TGS, Telecom, YPF, Pampa, entre otras, muestran retrocesos este año de entre 23% y 41%.
Por el lado de los bonos, el ajuste es más moderado.
El tramo corto de la curva cae entre 7% y 8%, mientras que los bonos del tamo medio marcan perdidas de entre 14% y 15%.
Finalmente, los instrumentos de mayor plazo, a 2041 y 2046, muestran caídas de entre 16% y 17%.

Dado el apoyo que recibió la Argentina por parte de EEUU y pensando en inversiones a mediano plazo, la pregunta clave hacia adelante es si conviene bonos o acciones.
La respuesta a dicho interrogante radicará en función del perfil de riesgo y las perspectivas macro.
Sin embargo, los analistas en general consideran que el potencial alcista es mayor en la renta variable que en la renta fija.
Matías Waitzel, socio de AT Inversiones, coincidió en que, en la última recuperación del mercado argentino, los bonos mostraron un repunte más acelerado que las acciones, reflejando la lectura positiva del respaldo financiero de Estados Unidos.
"Mientras que los bonos ya capturaron buena parte de la mejora en expectativas, las acciones, particularmente las energéticas, lucen mejor posicionadas para liderar el próximo tramo de la recuperación siempre y cuando el resultado electoral lo acompañe", detalló.
Sin embargo, consideró que, al mirar hacia adelante, el mayor atractivo parece estar en el equity.
"Las acciones se encuentran claramente más rezagadas que la deuda soberana, con valuaciones comprimidas y un nivel de descuento que no refleja del todo el potencial de recuperación. El caso más evidente está en el sector energético: compañías como YPF, Pampa y TS cuentan con activos tangibles, flujos relativamente estables y una proyección ligada al desarrollo de Vaca Muerta y la capacidad exportadora del país", dijo.
En esa línea, remarcó que "estos fundamentos le otorgan un perfil defensivo frente a la incertidumbre política y, al mismo tiempo, un upside significativo si se consolida un escenario de mayor estabilidad".
Finalmente, y respecto a la preferencia de asset class, los analistas de Sailing Inversiones remarcaron que es importante separar perfiles.
"Los bonos son más adecuados para inversores conservadores o moderados, que priorizan visibilidad en los flujos, las Acciones en cambio son para inversores agresivos y de horizonte de inversión de largo plazo. Dicho esto, los múltiplos actuales están en niveles históricamente bajos, ofreciendo un punto de entrada atractivo, aunque con volatilidad elevada y ruido preelectoral", remarcaron
En cuanto a las acciones que favorecen los analistas de Sailing, indicaron que ven valor en Vista, YPF, Pampa, Central Puerto, TGN y TGS.















