El Banco Central (BCRA) obtuvo una ganancia de $ 24.500 millones en el primer bimestre del año fruto de las operaciones con el dólar a futuro. La incertidumbre generada por el posible default con el Fondo Monetario Internacional (FMI) hizo que trepara la demanda de cobertura de empresas principalmente ante un verano que se temía con altas temperaturas en el mercado cambiario.
"En enero la ganancia fue de $ 12.500 millones mientras que en febrero el monto final ascendió a $ 12.000 millones. Es un alto monto en relación a los $ 30.000 millones obtenidos en todo el 2021" destacó a El Cronista una fuente del BCRA.
Con la calma aportada en el mercado cambiario por el acuerdo con el FMI, se descomprimieron las transacciones en la operatoria a futuro. El mercado ya no avizora saltos en el tipo de cambio oficial, más cuando la semana próxima se ingresará en la mejor época del año en lo que a ingresos de divisas se refiere con la liquidación de la cosecha de soja.
En el último informe de la consultora 1816, se destaca que "la posición vendida del BCRA en futuros del dólar bajó a u$s 2700 millones en febrero contra los u$s 3800 millones existentes en enero". Agrega que "el BCRA podría vender el extremo hasta u$s 6300 millones adicionales en lo que resta del año porque el límite con el FMI es tener vendidos u$s 9000 millones para fines de diciembre".

Paradójicamente ayer las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania generaron un descenso en los precios de los granos en Chicago y el interrogante que surgió inmediatamente es el siguiente: ¿pueden desaparecer los súper precios para el campo en forma inmediata?
La soja por lo pronto se puede ir ya a los precios del 2021 con el agravante de que la cosecha será menor este año fruto de la sequía. Se estima que sería 5% inferior.
En el caso del maíz, la estimación actual es de una cosecha de 48 millones de toneladas, 11% menor a la del 2021. Con estas estimaciones de cosecha y precios recientes, se diluye el incremental de dólares de la soja y el maíz entre u$s 500 millones y u$s 1000 millones.
La incógnita que plantean las importaciones de gas licuado es otro elemento a la hora de estimar la variación de las reservas del BCRA. Por lo pronto, es de suponer que el "efecto GNL" afectará más a la actividad económica y al empleo que a las reservas del BCRA o a la cotización del dólar oficial.
El lunes pasado hubo una reunión en la UIA a la que asistieron empresarios de diferentes sectores como PAE, Ledesma, ADIMRA, petroquímicas, automotrices, cementeras, autopartistas, alimenticias, petroleras, laboratorios, industria avícola. El tema único en el encuentro pasó por el impacto que sufrirán en la producción los cortes de suministro y la recepción ya de avisos de las distribuidoras de gas.
Pero un auxilio adicional que viene recibiendo el BCRA proviene de Brasil. El real continuó apreciándose a niveles de 4,80 frente a los 5,70 de enero. Además esta tendencia da oxígeno al tipo de cambio real multilateral de la Argentina que no se aprecia en lo que va del 2022. "Brasil pondera un 25% en el tipo de cambio real de la Argentina, lo que hace que sea determinante para la competitividad de nuestra moneda" señala la firma 1816. Miguel Pesce, en el BCRA vuelve a respirar.
¡Queremos conocerte!
Registrate sin cargo en El Cronista para una experiencia a tu medida.















