Bonos: la brecha entre los mercados emergentes y los desarrollados está en el nivel más bajo en 16 años
Los bancos centrales de América latina y Europa del Este actuaron con mayor rapidez para subir las tasas en respuesta a las presiones inflacionarias tras la pandemia.
La brecha en los costos de endeudamiento público entre los mercados emergentes y los desarrollados ha caído al nivel más bajo desde 2007, a medida que los inversores prevén inminentes recortes de las tasas de interés en algunas grandes economías emergentes y un mayor endurecimiento en Occidente.
Según datos de Allianz Global Investors, esta semana la brecha cayó a menos de 2,9 puntos porcentuales -el margen más pequeño en 16 años-, frente a los 4,8 puntos de hace un año.
"Este año se ha producido una enorme divergencia entre la deuda de mercados emergentes en moneda local y los mercados desarrollados", dijo Richard House, director de inversiones de deuda de mercados emergentes de Allianz Global Investors.
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"Los inversores están reconociendo la reducción de la brecha de credibilidad entre los funcionarios...Los mercados emergentes han hecho un buen trabajo sorteando este shock inflacionario y no estoy seguro de que se pueda decir lo mismo de algunos de los bancos centrales occidentales".
Los bancos centrales de América latina y Europa del Este -regiones que tiene los mercados de renta fija con mejor comportamiento del mundo este año- actuaron con mayor rapidez para subir las tasas en respuesta a las presiones inflacionarias cuando las economías se reabrieron tras la flexibilización de las restricciones por la pandemia.
El índice del JPMorgan de bonos soberanos de mercados emergentes en moneda local, muy seguido, ha arrojado una rentabilidad total del 7,5% en lo que va de año, impulsada por el subíndice latinoamericano, que ha subido un 21%, y por el de Europa central y oriental, que ha ganado un 11%.
Por el contrario, los bonos del Estado de Estados Unidos han ofrecido una rentabilidad total de sólo 1,6% este año, medida por un índice ICE Bank of America de bonos del Estado, mientras que los bonos alemanes -la referencia para la eurozona- han ofrecido una rentabilidad total de 1,2%.
Dados los elevados rendimientos reales que sigue ofreciendo la deuda de los mercados emergentes, el descenso de la inflación y la perspectiva de recortes de tasas que deberían impulsar los precios de los bonos, muchos inversores se están posicionando para obtener mayores ganancias.
Liam Spillane, responsable de deuda de mercados emergentes de Aviva Investors, afirma que "las tasas y los bonos en moneda local presentan una oportunidad muy atractiva durante los próximos seis meses y más allá", y destaca México, Perú, Sudáfrica, República Checa y Polonia, donde cree que los mercados han subestimado la posibilidad de recortes de tasas.
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Iain Stealey, director de inversiones internacionales de renta fija de JPMorgan Asset Management, dijo que esperaba que los bonos en divisa local de los mercados emergentes "siguieran comportándose bien debido a las elevadas tasas reales, a que los bancos centrales ya no suben las tasas y al descenso de la inflación".
"Nuestra preferencia son los países con altas tasas reales, como Brasil, México e Indonesia, así como los países en los que esperamos que la inflación caiga en picada, como la República Checa", añadió.
Las perspectivas económicas en el mundo en desarrollo también parecen relativamente sólidas. En una reciente nota a sus clientes, Bank of America pronosticó que las economías emergentes crecerán un promedio de 4,1% en 2024, por delante del crecimiento del 0,5% de EE.UU., lo que supondría la mayor brecha de crecimiento en una década.
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El comportamiento de la deuda en moneda local refleja la relativa resiliencia de algunas de las mayores economías emergentes, que suelen tener mercados de bonos locales sólidos. Los mercados emergentes más pequeños y menos desarrollados, que dependen en mayor medida del endeudamiento en divisas, han tenido dificultades este año a medida que el aumento de los rendimientos de los bonos en Occidente reducía el atractivo de su deuda denominada en dólares.
El aumento de las tasas de interés en EE.UU. ha llevado a algunos países que dependen de la deuda denominada en dólares, como Pakistán, Túnez y Egipto, a una situación de estrés por la deuda y más cerca del default, según David Hauner, jefe de estrategia y economía de activos cruzados de mercados emergentes de Bank of America.
"Tenemos una historia muy positiva que beneficia a los mercados principales, más líquidos, y al mismo tiempo tenemos una crisis de deuda silenciosa en los mercados fronterizos", dijo Hauner.
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