Sector bancario

Banco Santander se prepara para presentar recurso contra uno de los impuestos del Gobierno

En las últimas semanas, se presentaron diversos recursos de amparo contra el impuesto a la banca que impulsa el Gobierno. Banco Santander es la última casa financiera que se suma al reclamo.

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El Banco Santander, una de las principales entidades financieras del país y del mundo, se prepara para presentar un recurso en contra del impuesto a la banca que impulsa el Gobierno. El mismo afectará los resultados financieros de todo el sector y que, según el conjunto de entidades bancarias, es inconstitucional.

La banca señala que esto podría ir en contra del derecho a la competencia de la Unión Europea, al generar una desigualdad entre las entidades españolas, las cuales posiblemente tendrán que trasladar el tributo de nueva creación a los clientes. De esta manera, acusan que se reducirá su margen de beneficios, a la vez que se disminuirá la capacidad para otorgar préstamos en hasta 50.000 millones.

Al mismo tiempo, las principales instituciones bancarias españolas buscan la estrategia más adecuada para tener éxito en los tribunales. Todas ellas están respaldadas, de alguna forma, por la decisión tomada hace tiempo por la Asociación Española de Banca (AEB) y la Ceca (que agrupa a todas las cajas de ahorros) de recurrir también el tributo. Ambas organizaciones fueron las primeras en reaccionar, presentando recursos contencioso-administrativos ante la Audiencia Nacional, impugnando la orden ministerial que aprobó los modelos de declaración y de pago anticipado del nuevo impuesto a la banca.

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Fuerte oposición desde el sector bancario

El nuevo tributo ha provocado una avalancha de críticas por parte de todas las instituciones financieras. El Banco Santander fue uno de los primeros en reprobar la implementación del impuesto y en calcular su impacto económico.

Su entonces consejero delegado, José Antonio Álvarez, estimó que cumplir con el objetivo de recaudación de 3000 millones en dos años, como pretende el Ejecutivo, restará al sector capacidad para prestar aproximadamente 50.000 millones. También indicó que los primeros afectados por el impuesto podrían ser los accionistas, pero también la economía en general.

Todos los bancos y cajas españolas ingresaron entre el 5 y el 20 de febrero (el período legal establecido por Hacienda) el 50% del impuesto fijado por el presidente Pedro Sánchez para gravar los supuestos ingresos extraordinarios obtenidos debido al aumento de los tipos de interés, pero han decidido recurrir la nueva tasa.

El Banco Santander presentará un amparo para frenar el impuesto a la banca que impulsa el gobierno de Pedro Sánchez (Fuente: Shutterstock)

En búsqueda de una estrategia común

Las entidades financieras continúan analizando cuál puede ser la mejor estrategia para proteger sus intereses y ganar el litigio, ya que aún hay tiempo. La primera opción es hacer la declaración del impuesto, como ya han hecho, para luego autoimpugnar la propia liquidación ante la Agencia Tributaria y, en caso de que esta resuelva negativamente, recurrir en alzada al Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC). Otra posibilidad es recurrir la orden administrativa que desarrolla la ley del impuesto ante la Audiencia Nacional. Al ser ambos caminos complementarios, se espera que los bancos utilicen ambos

El nuevo impuesto establece una tasa temporal que busca recaudar alrededor de 1500 millones al año y estará vigente hasta 2024. Esta cantidad afecta a tres parámetros escogidos por el Gobierno: ingresos de la banca por márgenes, intereses y comisiones. Solo afectará a los bancos que ingresen más de 800 millones en intereses y comisiones, que representan aproximadamente el 80% de la facturación del sector.

Así, el alcance del impuesto llega a las grandes entidades (Banco Santander, CaixaBank, Sabadell y Bankinter) y a algunas entidades medianas (Ibercaja, Unicaja, Kutxabank o Cajamar). Hasta el momento, han presentado recurso Sabadell, Bankinter, Ibercaja y Kutxabank.

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Repercusiones en el Gobierno

La oposición de la banca al impuesto generó la indignación del presidente Pedro Sánchez, quien criticó a la presidenta del Santander, Ana Botín, y a Ignacio Sánchez Galán, CEO de Iberdrola.

"He escuchado a algunos dirigentes de bancos, a la señora Botín, al señor Galán... en fin, si protestan es que vamos en la buena dirección", afirmó hace unos meses el Presidente en una comparecencia en La Moncloa. El jefe del Ejecutivo destacó que "son los mismos que protestaron y dijeron que subiendo el salario mínimo y que con esta reforma laboral se iba a caer España".

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