El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que congelará por 90 días los cambios en los aranceles que había anunciado el "Día de la Liberación", pero que aumentaría los que aplica sobre China a un 125%.
El período de 90 días en el cual no se aplicarán los aranceles que había anunciado previamente tendrá un piso de 10% de aranceles uniforme.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, ratificó esto al ser consultado específicamente por los países que ya tienen un 10%: "Eso se va a mantener". La portavoz del Gobierno de los Estados Unidos, Karoline Claire Leavitt, agregó que "el nivel de los aranceles será reducido a un 10% universal". Ambos agregaron que el Gobierno seguirá negociando individualmente.
Esto implica que en el caso de Argentina, que había tenido en un inicio un arancel del 10%, al igual que Chile, Brasil y otros países de la región, mantendrá ese nivel en este período de "pausa" anunciado por Trump.
En síntesis, no habrá cambios en el aumento del costo de las exportaciones argentinas respecto de lo anunciado la semana pasada.
¿Fin de la volatilidad?
La baja generalizada al 10% podría suponer una calma, pero el foco sigue puesto en el cruce entre las dos mayores potencias del mundo.
Para Martín Kalos, director de la consultora Epyca, en una primera instancia esto implica que haya una percepción de menor riesgo en términos de los intercambios multilaterales, pero que "hay que ver como sigue la guerra comercial con China, porque eso es un punto mayúsculo".
"Son las principales potencias bloqueándose el comercio entre si, porque los aranceles a ese nivel son prohibitivos", subrayó el economista.
Es por eso que la incertidumbre y la volatilidad seguirán, aunque la moderación en el plano multilateral es una "buena noticia, en especial para los mercados financieros".
Para Florencia Rubiolo, doctora en Relaciones Internacionales y directora de Insight 21, hub de conocimiento de Universidad Siglo 21, el alivio en los mercados, las acciones y el petróleo son las primeras señales, al menos en el corto plazo, con un gran impacto en países asiáticos como Vietnam, India y Corea del Sur, que tienen una gran participación en el mercado estadounidense.
Sin embargo, marcó: "Que se imponga un 125% de arancel a China muestra que hay una puja por quién de los dos puede desistir antes de esta escalada vertiginosa".
Para Rubiolo, se sintetiza en una lucha de poder que se torna "imposible de sostener" por los niveles de aranceles que están sobre la mesa.
"En conjunto representan el 30% comercio global. Que se mantenga esta escalada de guerra comercial y arancelaria tendrá un fuerte impacto, incluso si se anulan el resto de los aranceles", concluyó la especialista.
Desaliento a exportaciones
Sin embargo, esta calma relativa podría tener otras implicancias comerciales.
"Día dos. Estamos peor que el día cero ( con un 10% arancel a EE.UU.) y peor que el día uno (perdimos la "ventaja arancelaria" respecto a los que había subido más de 10%, excepto China) pero mejor que el día tres (si China busca colocar excedentes en mercados disputables con Argentina)?", dijo en sus redes sociales el exministro de Hacienda, Hernán Lacunza.
"Comercialmente no ganamos", agregó Kalos y subrayó: "Nos suben los impuestos para entrar a Estados Unidos y ahora los demás quedan en el mismo nivel".
Es que con los cambios arancelarios, Argentina había quedado mejor posicionado respecto de otros países que habían recibido aranceles más altos, como Vietnam, India o Indonesia.
Esto favorecía a algunas producciones específicas que ganaban competitividad relativa respecto de esos mercados.
"Hay que ver mercado por mercado, porque hay productos a los que se puede afectar más especificamente", marcó Kalos.
Unos de los destacados es el caso del maní, de gran demanda por Estados Unidos. Si bien los principales competidores son México y Canadá, que se mantienen si arancel ya que negocian por canales paralelos, Argentina se enfrenta a países que tenían mayores aranceles, en especial India e Indonesia, que ahora quedarían en igualdad de condiciones.
Rubiolo en este sentido sumó que tampoco hubo anuncios sobre las excepciones, por lo que es los rubros más complicados por el cambio arancelario seguirán en vilo.
"El principal producto argentino exportado a Estados Unidos es el petróleo, que estaba excento del arancel original, seguido por el oro y productosfarmacéuticos, que también estaban fuera de la lista", marcó la especialista.
Sin embargo, si se mantiene el efecto anticipado en otros productos que integran la canasta exportadora, como aluminio, sobre el que rige un arancel de 25%.
